LA IRÁ DE ALYA

Es bastante difícil, más bien parece un amor imposible - Expresó Alfa Sam, para Hades era entendible aquella situación para su amigo, él mismo lo sintió cuando deseó con locura a Alya desde que la niña tenía 15 años.

Aunque la Diosa Luna aceptó su solicitud de emparejamiento con Alya, Hades Dumonts sabía perfectamente que su pareja predestinada antes que Alya apareciera sufrirá el día que se encuentren y vea que él está unido por todas las de la Ley Lobuna con otra Loba.

¿Cuándo lo descubriste Sam?

En el enfrentamiento en contra de Anastasia DuPont, desde aquel día yo supe quien era.

Hades suspiró, el Ministro también poseía una rara inteligencia, se masajeó la frente y se levantó de su asiento.

Sam sea quien sea, aunque ya sé quien es, tienes que hablarlo con ella, nunca olvides que La Diosa Luna nunca se equivoca.

Si ya lo sabes Hades, entonces descubres la Barrera que se interpone entre nosotros.

Sam ¿Cuál barrera? Hombre por Dios, su situación nunca será una barrera.

Ella tendrá que elegir entre ser Reina o Luna - dijo Sam con una sonrisa amarga- Y Hades, claramente ella no renunciara a su trono por amor y sabes cuál es la mayor prueba de certeza que tengo.

Hades negó con la cabeza - No lo sé asi que dímelo. Respondió Alfa Hades.

Alya DuPont renunció a su amor destinado, renunció a Artemis Lombardi por su manada.

La sola mención del Vampiro logró hervir la sangre del Ministro de celos, claramente Sam dio en un nervio de Hades.

Entonces yo estoy seguro de que Bronwen DuPont elegirá al Trono de la Dinastía Vampírica antes que ser mi Luna.

Sam háblalo con ella, luego saca tus conjeturas, de hecho ya llegó - El ministro sabía perfectamente cuando alguien de las filas de Asher DuPont pisaba su territorio.

Los nervios volvieron a azotar el cuerpo de Alfa Sam.

Deja de ser estupido, pareces que eres humano y no un Alfa - Se burló Hades.

Para ti es fácil, sacaste todo el provecho a tu celo sigo sin entender por qué Asher no te quitó la cabeza.

De hecho, también me hago la misma pregunta- Respondió Hades con una sonrisa.

Deja de mostrar esa sonrisa no soy Alya si sigues sonriéndome así me voy a enamorar de ti.

Hades frunció el ceño y se dispuso a salir del despacho seguido por Alfa Sam.

La sala estaba tenso en el momento en que los dos ministros entraron, Bronwen levantó la vista sintiendo una conexión muy fuerte con Sam.

Alya que se dio cuenta rápidamente de lo que estaba sucediendo con su mirada, logró relajar completamente a su hermana con su poder, evitando de esa forma que Asher se diera cuenta.

Es un placer tenerlos en la manada, aunque no era la manera en la que me gustaría- Hades tuvo que cortar de raíz absolutamente todo.

Definitivamente, no era la manera en la que deberíamos estar aquí - Asher tomó el rumbo de la conversación.

Estamos en familia, opinó que debemos discutir algunos asuntos antes de estar en frente de los demás ministros, Alya tenía mucha seguridad en su manera de hablar logrando que Ahser y Siena se sintieran orgullosos de su hija.

Estoy de acuerdo cariño - Continuó Asher - Antes que nada debemos ponernos de acuerdo en algunos asuntos.

Por supuesto pasemos al Despacho Lobuno- Hades guio a todos hasta el enorme salón, como era de esperarse, Siena y Asher tomaron el centro de la mesa.

A su derecha los Licantropos, a su Izquierda la Vampiresa y las brujas.

Te escuchó Hades - era tradición que el Alfa de la Manada afectada tuviera el privilegio de expresar toda su inquietud.

Una fuerte lluvia caía en ese momento, era el clima característico de aquel sitio.

Es de conocimiento que mi Beta fue asesinado anoche razón por la cual solicite la Asamblea debemos recordarle a los Vampiros el tratado de paz.

Ya que los responsables de esta tragedia son los Vampiros y pertenecen a territorio Vampírico - Expresó Alfa Hades, con eso logró que Bronwen apretara los puños.

Asher también se puso furioso en sus adentros, ambos sabían que el Gobernador estaba detrás de esto.

Como futura Luna de La Manada exijo Padre que aquel que incumpla el tratado sea asesinado.

Asher abrió sus ojos al escuchar la solicitud de Alya, en esa hermosa rubia de ojos azules no había ni una pizca de arrepentimiento ante aquella solicitud.

Hermana, te recuerdo que es la especie que tengo bajo mi mandato, yo buscaré la forma de lidiar con el asesino sin arriesgar la vida de inocentes.

Y ¿El Beta al que asesinaron no era inocente? la cobardía de aquel asesino supera mis respectivas y aquí te sostengo Bronwen que voy a destruir a tus Vampiros si vuelven a matar a uno de los míos, no puedo tener compasión por alguien que tampoco la tuvo con su víctima.

No, Alya esa no es la manera, la Vampiresa se levantó de la silla, quedando frente a frente con Alya. En ese momento un rayo iluminó toda la habitación.

Suficiente ambas golpeó la mesa El Rey Asher DuPont, Bronwen te advierto que si la especie Lobuna se ve amenazada por los Vampiros volveremos a un punto muerto del cual nunca pudimos salir.

No hace falta que te recuerde que tu deber es evitar eso.

Padre lo estoy intentando, pero tampoco puedo permitir que mi hermana ponga en peligro a mi especie.

Yo no pondré en peligro a los Vampiros que sean fieles a ti, pero si mataré a sangre fría a los traidores, al momento de que Alya DuPont pronunció aquellas palabras, un escalofrío recorrió la espina dorsal de los presentes.

Asher y Hades eran familiarizados con la frialdad del lugar, las sombras estaban para cumplir cualquier solicitud de Alya y ya estaban presentes en la habitación.

La mirada azul intensa de Alya podría doblegar incluso a Asher DuPont, Bronwen no fue capaz de sostenerle la mirada a su hermana.

El resto solo guardaba silencio, las dos hermanas eran muy poderosas, Asher dejó que Alya se expresará y liberará un poco de su enojó, sabía que la ira de su hija era mucho más fuerte y mortal que la suya.

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