LA VISITA DEL REY

Alteza - Uno de los centinelas de la Realeza Lobuna se encontraba parado enfrente de la máxima autoridad Lobuna.

Asher DuPont se encontraba jugando con su hija menor en el momento que se produjo la aparición del guardia.

El Ministro y Alfa, Hades Dumonts, exige la realización de una Asamblea Lobuna, además le envía esta carta.

Asher con solo ver la cinta negra que envolvía lo que su yerno envío sabía que no sería nada bueno. Lleva a tu princesa junto a tu Reina - Ordenó Asher al guardia, sus ojos azules se volvieron amarillos, KAM estaba presente.

Su majestad- El pueblo Soberano de la Manada Luna de Sangre, expresa con hondo pesar el incumplimiento del Tratado de Paz firmado entre Vampiros y Licántropos un mes atrás.

Yo Ministro de La Realeza Lobuna y como Alfa de la Manada afectada le informó sobre el asesinato del Beta de la Manada Luna de Sangre en manos de Vampiros.

Razón por la cual exijo la realización de la Asamblea Lobuna.

Esperando una pronta respuesta.

Atentamente: Alfa Hades Dumonts.

Maldita sea rugió Asher, la furia del demonio de la oscuridad se sintió bastante poderoso.

¿Qué sucede? Siena se dio cuenta de que algo no estaba bien por la sacudida de ira que recibió a través de la marca que comparte con Asher.

Los vampiros mataron al Beta de Hades, eso sucede cariño, entenderás que con ese crimen se afectó a la segunda manada más poderosa, Hades puede romper el tratado y enfrentar a Territorio Vampírico.

La Reina de todos los Licántropos se llevó las manos en la boca sorprendida - Alya, susurró Siena, conociendo a la rubia, tiene una vaga idea de donde podría encontrarse su hija.

No te preocupes por ella, nunca enfrentaría a su hermana, de hecho están frente a frente en estos momentos - Dijo el imponente hombre parado en el ventanal.

¿Qué piensas hacer? Siena que tenía el vientre un poco abultado se le acercó a Asher.

Visitaré Luna de sangre, convocaré a los Ministros para que en 48 horas estemos en Salem, también solicitaré la presencia de Bronwen.

Siena abrazo a Asher tal parece que nunca vivirán tranquilos, si no es una es la otra, no se imagina la Reina que sus hijos llegaran a enfrentarse por culpa de otros.

Alya por su parte no se quedaría más tiempo, pero le dejo una advertencia bastante clara a su hermana de que cuidara a los Vampiros porque eso podría conllevar a un enfrentamiento sangriento.

Cuando la Loba se disponía para salir tropezó con alguien.

¿Qué haces tú aquí? La voz de Sarah contenía odio.

Vine a hablar con mi hermana y baja tu intensidad y tu posesividad, si estás así por Artemis te advierto que conmigo pierdes el tiempo. Porque antes que nada tu vampiro de mierda no me interesa, no me intereso antes, mucho menos lo hará ahora, es más me da asco.

La voz de la Diosa de la Oscuridad adquirió cierta tonada terrorífica que logró que Sarah diera dos pasos hacia atrás, pero Alya volvió a dar dos pasos hacia ella. Mantente alejada de mí y haz que tu chupa sangre sepa cuál es su lugar y si no puedes atajar a tu alma gemela, te recomiendo que te alejes de él, porque lo voy a destrozar.

Quien avisa no traiciona, puedo machacar el tratado de paz que tienen las especies en un abrir y cerrar de ojos, puedo matar a todos con solo tronar los dedos y saben que es lo mejor que no me arrepentiría jamás.

Alya había infringido temor en la Vampireza, de manera que Artemis lo sintiera aunque sea un poco.

Y efectivamente el Gobernador había sentido algo raro sin poder detectar de donde provenía aquel sentimiento.

Alya se dio la vuelta dejando sin habla a Sarah, con eso también dejaba en claro que con Alya DuPont nadie podía meterse, que quizás no existía rival para ella.

Varias horas después Alya piso nuevamente territorio de Luna de Sangre, el ambiente era frío, la manada estaba en duelo, mañana a tempranas horas se rendiría homenaje al joven Beta de la manada.

Alya posó sus manos en la espalda del imponente hombre que contemplaba el paisaje del bosque encantado.

Nena, no vuelvas a irte así- Hades se había dado la vuelta para enfrentar a su futura Luna.

Ya estoy de regreso, quien va a ocupar el cargo de Beta, preguntó Alya.

Según las reglas de Realeza, uno de los príncipes se convertirá en Beta si el trato fuera roto, a sique Amarok vendrá como Beta.

Alya adquirió un azul intenso en su hermosa mirada, su hermano estaba bien con su padre, pero las reglas son las reglas. Y él de ellos dejaba bien en claro que si La manada fue creada hace dos o tres años y si sus líderes aún no tienes descendientes, el Rey tiene por obligación entregar a uno de sus hijos para tomar el cargo.

Hades se acercó a Alya y unieron sus labios en un beso hambriento que carecía de timidez, la lengua de ambos se entrelazan queriendo tomar el control.

El Alfa jadeo no sabía cuánto tiempo más podría aguantar estar sin hacerle el amor a su preciosa pareja. Pero la rubia tenía otros planes.

Ella sentía que Hades estaba tenso y lo entendía no es fácil llevar sobre los hombros la carga de una manada que está siendo vigilada y para completar matan a su mano derecha.

Las manos de Alya se posaron en el bulto que era palpable debajo del pantalón de Hades.

Mi amor no hagas eso - Hades estaba luchando por mantenerse cuerdo, pero el contacto con la piel de Alya era una locura, las pequeñas caricias de la Rubia en su cuello eran emociones electrizantes que hacían vibrar su cuerpo.

El enorme y elegante hombre cargo a su pequeña loba por encima del escritorio y empezó a desprender los botones de la camisa que traía Alya.

Hades hazme el amor, pierde el control por mí, descarga tu frustración y relájate, encuentra tu tranquilidad en mi cuerpo- La voz de La futura Luna era canción para Hades.

Con un gruñido volvió a tomar posesión de los labios de Alya, un beso posesivo como queriendo tragársela por completo, Alya sentía que por fin volvería a sentirse completa.

Hasta que unos pasos se escucharon por el pasillo.

Solo había una persona que podía caminar con esa seguridad inigualable e inalcanzable.

Su Alteza- Saludaron los guardias de Luna de Sangre, como Hades lo sospechaba El Rey Asher DuPont ya estaba en el territorio de la manada.

Las puertas fueron abiertas dejando ver la perfecta figura del hombre de ojos azules ante la pareja.

Padre- Dijo Alya, sin inmutarse ante la presencia del Rey, la rubia hizo todo lo posible para que el olor de su excitación no se sintiera de lo contrario el Rey se enojaría. Aunque su padre se llevaba todos los premios por interrumpir en el mejor momento.

Majestad - Saludó Hades inclinando la cabeza.

Asher intentaba ver más allá de ambos, pero no se percató de nada raro, mucho menos que ambos se estaban por devorar antes de su llegada.

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