Capítulo 5:las caras bonitas no siempre son lo que aparentan
* sonido de alarma *
El sonido de mi alarma nuevamente me despertó como el día de ayer, solo que esta vez no tenía que ir al trabajo.
Me sentí rara con la experiencia que acababa de suceder en lo que creía que era mi sueño.
Sentí que todo lo que había experimentado en mi sueño era demasiado real, el aire que respiraba, los sonidos de los animales y la experiencia que aún sigue tan fresca en mi mente como si lo hubiera vivido en carne y hueso.
Normalmente, los sueños que uno tiene son olvidados por completo o en gran parte cuando uno se despierta, pero tenía la vívida experiencia en mi mente y sabía que no lo olvidaría al menos en un tiempo corto.
* sonido de timbre *
El sonido del timbre de mi puerta ocasionó que me levantara de mi cama rápidamente para ir a lavarme la cara antes de abrir la puerta, no podía salir con mi piyama a abrir la puerta, así que lo más rápido posible me trate de alistar.
* sonido de timbre *
"¡Ahora salgo que me estoy arreglando!" Grite en un intento de que la otra persona sepa que estaba un poco ocupada,
al parecer ante mis palabras la otra persona dejó de tocar el timbre, así que me arregle con tranquilidad en un intento de hacerlo rápidamente.
[20 minutos después]
Tardé 20 minutos en arreglarme y cambiarme, pero ya estaba lista, así que procedí a salir a ver quien era el que llamaba tan temprano.
"Qué estuviste haciendo… arreglándote para una cita"
La voz al parecer irritada de Ethan me llegó cuando abrí la puerta para encontrarme cara a cara con el, se le veía molesto por esperarme durante 20 minutos.
“Para tu información el que me demorara 20 minutos ya es un tiempo corto” trate de refutar, pero al parecer él no pareció escuchar mis palabras cuando entro a mi departamento.
"¡Qué te pasa!"Me queje ante la interrupción sin permiso a mi departamento por parte de Ethan.
"El día de ayer mi madre te dijo que te ayudara, así que he venido a ayudarte"
“Debes saber que no puedes entrar al departamento de una dama sin su consentimiento” me queje ante la falta de modales de Ethan.
“Dama tú… si tú lo dices” trato de burlarse de mí Ethan.
“Para tu información tú no eres un príncipe encantado ni nada de lo que tu apariencia hace ver” conteste a su burla mientras aprendía el verdadero rostro de mi ex jefe.
"Así soy, así que tienes que soportarme mientras te ayudo con la mudanza"
"Llamaré al camión de la mudanza para que me lleve a mi anterior departamento para traer mis demás cosas"
"No has llamado todavía al camión de la mudanza para que traigas tus demás cosas ... Pensé que mientras me hacías esperar ya los habías llamado"
Ethan parecía algo irritado ante el hecho de que no había llamado al camión de la mudanza, al parecer quería terminar todo lo más rápido posible para poder irse.
“Lo llamo ahora mismo… no tienes por qué ser tan gruñón” susurre mientras me iba a buscar mi celular.
"Tengo demasiadas cosas que tengo que hacer ..."
Logre escuchar las palabras de Ethan mientras me iba, al parecer la otra parte no quería ayudarme con cada fibra de su ser, posiblemente todo era obra de la señora María quien debió haberle obligado a ayudarme.
Me sentí cálida por la ayuda de la señora maría y pensaba buscar la manera de agradecerle con algún regalo después.
"Ya llamé al camión de la mudanza, van a venir en 30 minutos aproximadamente"
"Vamos ordenando todo para las cosas que vendrán"
Tras las palabras de Ethan, procedí a recoger algunos muebles que tenían para ordenarlos en las respectivas habitaciones.
Aunque no eran muchos los muebles que tenía, porque no era tarea fácil el mudar los muebles que traían de un primer piso a un tercer piso con la ayuda de una persona solamente.
“¿Quieres algo de beber?” Pregunte al ver que ya habíamos ordenado todos los muebles que se han traído anteriormente.
"No es necesario ..."
Ante la negativa de Ethan procedí a ir a mi cocina para sacar una jarra de agua, planeaba dejarla en medio de la sala, por si le apetecía a Ethan después.
* sonido de camión *
* sonido de celular *
Escuchando sonar mi celular procedí a contestar lo que parecía ser la llamada y al parecer el camión de la mudanza había llegado para irnos a traer lo que restaba de mis cosas.
Esta vez procedí a gastar un poco más de dinero para que el personal de mudanza me ayude a subir el resto de mis cosas, quería que todo se terminara el día de hoy porque no sabía cuánto se demoraría si solo ordenamos a Ethan y yo.
“¿Entonces nos van a ayudar esas personas también?” Preguntó Ethan al ver a los 3 hombres que estaban en el camión desde la ventana del apartamento.
"Sí ... Pensé que como estabas muy ocupado con más ayuda lo terminaremos rápido todo para que no tengas problemas"
"Ya veo ... Igual me iba a marchar si se me hacía tarde ayudándote en la mudanza"
"¡Sabía que no eras un príncipe como decían las demás chicas!"
“Claro que no soy un príncipe… me gustaría decir que soy un diablo” hablo Ethan mientras se acercaba más a mí.
Los pasos de Ethan parecían firmes como un animal salvaje rodeando a su presa.
La figura de Ethan, que era más grande que la mía, parecía imponente cuando se acercaba cada vez más a mí.
Me sentí empequeñecida ante la presencia de Ethan, me sentí un poco intimidada por unos segundos, pero mi madre no había criado a una chica indefensa y había aprendido algo de defensa personal un tiempo atrás, así que no era alguien indefensa.
En el momento en el que trato de agarrar mi mentón le solté un golpe en la mano mientras me alejaba, no era una mujer fácil como para dejar que el hombre que tenía enfrente se burle de mí.
"Por favor me gustaría que se mantiene alejado de mi persona a unos 3 metros si es posible"
Mi comentario al parecer tomó por sorpresa a Ethan, quien se quedó tomando de la mano que había golpeado con un ligero golpe para alejarlo.
Viendo que el ambiente se había calmado, me aleje para poder bajar y poder irme a mi departamento anterior para terminar con mi mudanza.
"Al parecer los gatos por muy dóciles que parecen aún tienen garras"Dijo Ethan mientras salía del apartamento detrás de mí.
A paso continuo me dirigí hacia el camión de la mudanza y ahí lo vi, al parecer las personas que estaban ahí eran las mismas que yo ayudado el día que traje mis cosas por primera vez a mi actual departamento.
“Señor Noah, un gusto volver a verte” saludé al conocer al señor que conocía y a sus hijos.
Los dos hijos de Noah eran Liam y Jayden, dos chicos que no parecían llegar a sus 18 años aun.
Los había conocido antes, eran chicos muy buenos a diferencia de un insensible el cual estaba parado al lado mío.
"¿Quién es la persona que está al lado tuyo señorita Jasmina?"
“Él es mi vecino que me está ayudando en la mudanza” conteste sin la menor vergüenza por las miradas que me daban el padre e hijos.
“Espero que la ayudes joven… que los hombres debemos ayudar a las mujeres en este tipo de cosas” comentó Noah mientras levantaba la mano para saludar a Ethan.
* gruñido *
“Te está dando la mano… no seas descortés” susurré mientras le daba un codazo a Ethan, quien no le devolvía la mano al señor Noah.
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