Capítulo 15

Decklan se giró para buscar a la persona que lo había saludado, pero la persona ya no estaba.

Se sintió un poco inquieto, sin saber por qué sintió que era un poco grosero. Debería haber respondido a ese saludo. No no. El chico negó con la cabeza para tranquilizarse. No podía permitirse acercarse a esa chica. El hombre volvió a caminar recto.

"¿Vas a participar en la actividad esta noche?" preguntó Pika después de que el Sr. Duda, el maestro de matemáticas que enseñó en el primer período, saliera del aula. Chaby miró a su lado, mirando a Pika con el ceño fruncido y confundida. Pika suspiró ante la estúpida expresión de su mejor amiga. Sabía que la niña no debía saber nada. No es que quisiera hablar mal de su propia mejor amiga, pero en su opinión, Chaby no era inteligente y era fácil de engañar.

"Aunque no quieras, tienes que venir, si no quieres que te castiguen", dijo en tono amenazante. Mientras Chaby, al escuchar las palabras castigada, se estremeció de miedo. Uh..

"¿Qué actividad es esa, Pik?" preguntó, hablando. Ella realmente no sabía a qué actividad se refería Pika.

"Fogata", respondió Pika rápidamente.

"Cada año, nuestra escuela suele hacer un evento de fogata al comienzo del semestre escolar", agregó, explicando.

Chaby asintió con la cabeza en señal de comprensión. Luego sacó su teléfono de su bolsillo y llamó a alguien. Pika solo observó la conversación de la niña por teléfono.

"Hermano, recógeme esta noche. Quiero unirme a la actividad escolar primero", informó después de asegurarse de que su hermano hubiera contestado el teléfono y pudiera escucharla.

"¿Estás segura de que quieres venir?" preguntó Danzel al otro lado. El hombre que no estaba seguro.

"Mm." Chaby asintió, aunque solo Pika la estaba mirando.

"Está bien, no olvides llamar a tu hermano cuando la actividad esté a punto de terminar".

Chaby volvió a asentir y colgó el teléfono.

"Estás muy unida a tu hermano, ¿verdad?" preguntó Pika con admiración. Chaby asintió mientras Pika hacía una mueca.

"Tu hermano también parece quererte mucho, a diferencia de mi molesto hermano", dijo, sintiéndose celosa de la cercanía entre Chaby y su hermano. Era muy diferente en comparación con el hermano Decklan y ella.

Chaby la miró con lástima, quiso decir algo pero se detuvo porque alguien llamó de repente a Pika desde la puerta del aula.

"¡Pik, te dijeron que fueras a la sala del consejo estudiantil ahora!", gritó Damar, uno de los miembros del consejo estudiantil desde la puerta del aula.

"Sí Sí." respondió Pika, luego miró a Chaby por un momento.

"By, me iré un rato. Más tarde, en el descanso, vamos juntos a la cantina", dijo, Chaby solo asintió.

\*\*\*

Como dijo Pika, regresó al salón de clases a la hora del almuerzo e invitó a Chaby a la cafetería. Los dos fueron a la cafetería del duodécimo grado en el segundo piso porque la cafetería del décimo grado ya estaba llena.

"Lo siento, la cantina ya está llena porque llegué tarde. Comamos en esta cantina", dijo Pika, mirando a Chaby con pesar. Ya estaban frente a la entrada de la cafetería del duodécimo grado. No me importa si a algunos estudiantes de último año no les gusta, además, ella también tiene algunos amigos de último año. Su hermano también está en duodécimo grado. Su estómago había estado gruñendo desde antes y no quería morir de hambre.

"¿Tú también debes tener hambre, verdad?", le preguntó a Chaby, quien respondió con un asentimiento seguro de la niña. Pika se rió entre dientes. Parecía que a Chaby realmente le gustaba comer, su expresión no podía mentir cuando escuchó la palabra comida.

"Bueno, ¡vamos!" Pika rápidamente tomó la mano de Chaby, buscando un lugar para sentarse que aún estuviera vacío. Su mirada se posó en una esquina de la habitación donde casualmente había sillas vacías. Había tres chicos ocupando el lugar y ella los conocía. Por supuesto que eran Decklan y sus dos mejores amigos. No había otra opción, ese era el único lugar vacío, sin decir una palabra, volvió a tomar la mano de Chaby y caminó rápidamente hacia los chicos. Algunas chicas de la cafetería los miraron con el ceño fruncido, pero qué demonios, a Pika no le importaba. Una vez más, solo se preocupaba por su estómago, que ya estaba gruñendo y pidiendo que lo llenaran.

"¿Qué estás haciendo aquí?" fue la voz de Decklan. Su tono era brusco, sin importar que Pika fuera su propia hermana menor. Su mirada se desplazó hacia Chaby, que todavía estaba de pie junto a Pika. Esa chica otra vez. Resopló molesto. Ya sea por el destino o lo que sea, seguían encontrándose.

"Mira, no quedan asientos vacíos", señaló Pika a toda la cantina.

"La cafetería del décimo grado está llena, Chaby y yo tenemos mucha hambre, así que venimos aquí", agregó largamente y no menos brusca. Su hermano pensó que era el único que podía ser grosero, ella también. Afortunadamente, su posición estaba en la esquina más alejada y la fuerte voz de Pika quedó ahogada por el ruido de la gente en la cafetería. Podría ser Dekclan quien se sintiera avergonzado por pelearse con una chica marimacho como su hermana pequeña.

"Depende de ti", respondió el chico perezosamente. Volvió a estar ocupado con su juego haciendo girar el vaso que todavía contenía agua frente a él.

Pika sonrió satisfecha sin olvidar invitar a Chaby a sentarse.

"Espera aquí, yo haré el pedido. Te pediré sopa para que estés sana".

Chaby quiso hablar con la intención de cambiar el menú que Pika iba a pedir, pero la chica se fue muy rápido. Bien, solo pudo suspirar derrotada. De hecho, tenía que sentarse en medio de los estudiantes de último año.

La niña levantó la vista y vio a los tres chicos frente a ella que la miraban. Volvió a bajar la cabeza avergonzada y se rascó la cabeza, lo que no le picaba en absoluto. ¿Por qué la situación se volvió tan incómoda así, al menos debería saludarlos? La niña volvió a armarse de valor y levantó la cabeza, su mirada se encontró con la de Bara. Hizo todo lo posible para sonreírle dulcemente al chico.

"H..hola, hermano Bara", la saludó, pero no hubo respuesta. Vio al chico mirándola fijamente con hostilidad, haciéndola perder el valor de inmediato.

"Una chica como tú no debería hablarme", dijo Bara, nada amable. Sus palabras fueron duras y dolorosamente hirientes, hasta el punto que Andra y Decklan lo miraron como si no pudieran creer que tales palabras salieran de la boca de Bara.