Mi decisión

Son las 5 am, hasta el momento no duermo, después de dejar a los chicos, el chofer me dejo en mi casa. Tome un baño y acá estoy lista para salir a correr. Me pongo mis audífonos con Nirvana a todo volumen, ya que en verdad necesito aislarme de todos y todo.

Esta vez voy mas temprano a la cafetería, necesito cafeína pura.

Hola Sergio, porfis me puedes servir lo mismo de siempre, pero esta vez auméntale todo el expreso que te permita la máquina – le digo, el me sonríe.

Supongo que no tuviste una buena noche ¿Verdad? – me dice, después de tomar mi orden.

Algo así – solo respondo, mientras me siento en un sillón cerca a la barra.

Estoy mirando hacia afuera admirando el paisaje, y tratando de no quedarme dormida, tengo que ir a trabajar. Y la verdad es lo único que no quiero hacer.

De pronto alguien se sienta a mi costado, y presiento que me esta mirando. Volteo a ver y siento como la ira vuelve a mi. Me paro recojo mi pedido que ya esta listo en la barra y salgo corriendo del local.

- Alexia, espera necesitamos hablar – me grita mi nemesis, desde media cuadra atrás.

Sinceramente no tenemos nada de que hablar, anda busca a Cassandra, supongo que ella te recibirá con los brazos abiertos – le digo, tratando de acelerar el paso y sin que se me caiga mi bebida.

Llego a mi edificio, y le grito a Ramón – el otro conserje – que no quiero que nadie suba a mi departamento, a menos que yo lo autorice…. subo al ascensor, pero justo cuando se va a cerrar la puerta, Alejandro la detiene y se mete.

- Puedes escucharme, por favor, no es lo que estas pensando - me dice.

La verdad que no necesitas darme explicaciones de nada, total no soy nada tuyo y tampoco pretendo serlo – digo totalmente seria.

Yo quiero ser algo más – me dice en respuesta.

Pues te equivocaste de persona, si piensas que voy a dejar de lado lo que tengo trazado en mi vida, para aguantar a un casanova como tú – le digo sin mirarlo.

Llego a la puerta de mi departamento, abro la puerta, sin darle espacio para que el ingrese. Y antes de cerrar, le digo lo último.

- Sr. D’Angelo, estaré en su oficina a las 9 am, con mi carta de renuncia, ya no voy a trabajar en su empresa. Así que agradeceré que se retire de acá – y cierro.

Esto es suficiente, no voy a seguir torturándome con esto. Siempre he sido una persona muy directa en lo que quiero.

Terminar mi carrera, lograr ser una de las mejores Arquitectos del País, vivir mi vida al extremo. Pero jamás en ella estuvo incluida una relación, no la necesito y no la quiero.

Llego a la oficina a las 8 am, espero que lleguen todos incluido mi jefe, voy a hablar con el antes, ya envié por mail a RRHH mi carta de renuncia, y tengo impreso 3 juegos.

Hola Alexia – me saluda mi jefe al entrar.

Sr. Marco buenos días, necesito hablar con usted – le digo.

Ok, pasa a mi oficina – se va caminando, yo lo sigo.

Le entrego el papel impreso con mi renuncia – ya presenté mi carta de renuncia a RRHH, esto es solo para informarle, que a partir de hoy ya no vendré – le digo sin rodeos.

Me queda mirando sorprendido y en silencio – ¿ya hablaste con Alejandro? – me dice.

Si ya le informé, e incluso en un momento, iré a su oficina a dejarle la copia del documento, para terminar de formalizar, aunque igual ya esta todo con RRHH – le digo muy segura.

- Ok, pero Alexia, puedes pensarlo bien, nos gusta tu trabajo, tu desempeño a sido más que impecable – me dice cabizbajo.

- Muchas gracias por todo, en verdad me encanto trabajar con todos ustedes, pero es tiempo que tome mi camino – lo miro tratando de mantener la cara en alto.

Son casi las 9 am, así que me dirijo a la Gerencia, para terminar de una vez todo esto. Mis cosas ya están guardadas en una caja, para solo jalarla cuando me vaya.

- Clarita como estas, te dejo este documento, ya presente todo a RRHH, pero quería despedirme de ti, ya que renuncie y ahora me estoy retirando – le digo un poco triste, es una señora muy linda y le he tomado cariño.

- ¡¡¡En serio!!! No puede ser, ¿por qué te vas? – me pregunta.

- Problemas personales, que no puedo contar, gracias por todo, no perdamos contacto ¿ok? – le digo

- Claro mi niña, te vamos a extrañar – me dice triste.

- Bueno ya me voy – le digo, viendo que esta apunto de llegar el idiota y no lo quiero ver.

- ¿No vas a estar al Sr. D’Angelo para hablar con él? – me dice

-No te preocupes, ya hablé con el sobre este tema, Adiós – le doy un abrazo y me dirijo al 5to piso por mis cosas.

Estoy en mi departamento, tratando de ordenar mis ideas y ver que hacer, solo faltan 06 meses para culminar la universidad. Y tengo una idea, pero no se si el decano acepte.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***