Capitulo 13

Diego

Estamos en inicio del año escolar y estoy haciendo la mudanza de mis objetos personales, mi ropa y lo enseres que compre para tener mi estadía por algunos años en esta ciudad, desde hoy voy a vivir cerca de la casa de la familia Cusme. Mi familia consideran que esto es como unas vacaciones, voy a considerar estos años como un tiempo sabático y de paso sigo con mi búsqueda, mi compañera eterna, jamás he indagado en el mundo de los humanos, esta vez se que tendré suerte.

- Si es que te queda tiempo, estando de niñera de esa adolescente grosera, busca mejor nuestra compañera - hace rato no hablaba con mi lobo.

- Dylan no he desfallecido en mi búsqueda, esta puede ser la oportunidad de encontrarla, quizás no sea de nuestra raza.

- No me importa de que  p**** raza sea, quiero tenerla ya, humano apresúrate.

Pronto se acabará el verano e iniciarán las clases, las calles están agolpada de personas disfrutando los últimos días de vacaciones. He organizado, ya tengo el tiempo para conocer a la adolescente que voy a "cuidar'.

Estoy al frente de la casa de la familia, se escucha muchas voces, debe de haber una reunión familiar, voy a irme, intento arrancar mi auto, vendré más tarde o quizás otro día,e detengo porque escucho una voz del interior de la casa.

- Diego entra, te estábamos esperando.

La música se confunde con la voz de mi interlocutora, es la señora de casa. Ahora confirmo, hay una celebración. Entro a la casa y encuentro un ambiente familiar, hay una pareja de invitados que me sonríen, no los había visto antes.

-Diego acércate te queremos presentar los padrinos de Lorenza y Karen, ellos son Diana María y Alonso su esposo.

- Un gusto conocerlos, soy Diego.

- ¿Diego ya tienes todo organizado para venirte a vivir a nuestra casa? Tenemos el cuarto de invitados preparo para ti, Diana y Alonso se van a organizar en las habitaciones del primer piso, par que tengan privacidad.

- No he querido molestar, he comprado un apartamento cerca de la casa, además Alana tendrás su propia espacio.

- Ah - hay un silencio incómodo - Diego cuentas con la habitación de arriba la de invitados, Sí en el futuro decides quedarte en la casa.

- Lo tendré presente, aunque no creo que sea necesario.De igual forma voy a estar cerca, el apartamento queda a unas calles.

Estan radiantes las adolescentes, están en toda su vigor y juventud. Alana está tomando las fotografías esa cámara... esa cámara fue el regalo de navidad que le di, cuando era niña. Mi mano toca en mis bolsillos el dije de luna llena, son mitad luna. Creí en las falsas palabras de la mujer de la fuente de los deseos.

- Buenos días señor Diego

- Buenos días señoritas.

Otra vez la mirada de Alana, me mira y me inquieta que no sea de su agrado. Me interesa que le guste mi presencia, quiero ser su amigo. Es un comprensible su rechazo, si vengo a hacerle un favor a sus padres, no es por gusto que esté aquí. Ella debe mostrar un poco de agradecimiento por la consideración de sus padres, pero en vez de gratitud, en ella solo hay distanciamiento y rechazo.

- Señorita Alana, requiero hablar con usted.

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