Al principio se tornaba demasiado sería y formal, pero conforme el tiempo pasaba Dangella me mostró otra faceta de ella, que no se alcanzaba a ver a distancia.
Su inocencia, su alegría, su sonrisa, su generosidad ayudó a que mi camino se desviara por completo.
Cuando la vi con su genuina sonrisa,
Cuando la vi con su inocencía y su bondad.
Supe que era lo que me enojaba, Dangella me gustaba demasiado, sonreía cuando ella lo hacia y ni siquiera me daba cuenta de ese detalle, me hacia falta cuando no se encontraba a mi lado, me gustaba trabajar con ella y que Dangella me corrigiera cuando me equivocaba, me gustaba verla sonreír; fue entonces que comprendí, su sonrisa era una sonrisa inquebrantable que jamas de los jamases se podría romper.
Después su lado petulante me parecía agradable y me recordaba a mí, cuando se enojaba me parecía tierna. Con el pasar de los días ella se relajó y yo hice lo mismo, dejando que ella poco a poco fuera entrando en mi corazón, sonreía con más frecuencia, sus ocurrencias me hacían reír estruendosamente tanto que ni siquiera me reconocía. Ya no era el mismo, en menos de nada, había quitado la armadura que resguardaba mis sentimientos.
Con el tiempo empezamos a dejar espacio para nosotros, espacio para ver películas, salir a comer, ir a la feria, ir a la librería, compartir opiniones de libros que leíamos juntos, intentar cocinar aunque los dos éramos un desastre en eso, solíamos salir a las calle por las noches y ni siquiera nos importaba que las personas nos vieran, bailábamos sin música 🎶, cantábamos a gritos y reíamos como locos, empezamos a disfrutar la vida como si no hubiera un mañana.
- ¿Terminaron el trabajo? pregunto Sergei entrando al Penthouse, Dangella se levantó de golpe debido a que estábamos viendo una película en el sofá mientras recostada tenía su cabeza sobre mi regazo y yo la acariciaba.
- Aún no, estamos tomando un pequeño descanso respondí en tono serio poniéndome de pie. Su mirada no demostraba sorpresa, más bien, está vez era fría, no había rastros de ningún tipo de sonrisa, era raro verlo de ese modo, frunci el entrecejo. Vi por el rabillo del ojo como Dangella salió de la sala.
- Recuerda; el trabajo va primero, trabajas para mí y no quiero que mi empresa se vaya a la quiebra dijo en tono brusco. ¿Qué le pasaba a este tipo?, ¿por qué ese humor de mierda?
- ¿Qué te pasa? pregunte un poco enojado. 😡
- ¿Qué te pasa a ti?, te doy la confianza para que trabajes en mi empresa y tu gastas tu tiempo en estupideces grito sorprendiéndome, en todo el tiempo que habíamos compartido no me había alzado la vos, eso me enojó aún más de lo que estaba.
- Yo no te pedí trabajo solté en tono frío, - no sé que te pasa, pero ni siquiera trates de desquitar tu enojo conmigo dije con el ceño fruncido.
- Te estoy dando toda mi confianza y tú me estas defraudando comentó con ironía, sonreí sin poderlo creer.
- ¿Cómo te estoy defraudando?, pregunte con decepción, -simplemente porque por primera vez tomó tiempo para mí, ¿tú, estás enojado? pregunte apretando mi puño con fuerza.
- Te estás enfocando más en tu vida privada y no en el trabajo, tienes que balancear las cosas para que todo permanezca equilibrado comentó él un poco más calmado, lo vi respirar profundamente, sabía que no quería desahogar su enojo conmigo. Pero Sergei ya me habia hecho enojar, no soportaba su estúpida actitud. Lo que no sabía era que estaba más preocupado por su empresa y porque las autoridades no la investigarán, debido a sus negocios ilícitos que aunque me habían dicho ya no tenía, esa empresa era una bomba de tiempo que pronto iba a explotar si alguien que trabajaba para los federales se acercaba y el sabía que si trabajaba cerca a Dangella todo saldría a la luz.
Él estaba interesado en su proyecto, porque tenía visión, un futuro muy prometedor, pero tambien quería que el trabajo de su empresa se hiciera a distancia. No puedes obtener todo lo que quieres, ¿verdad?
- Me voy informé pasando por su lado y saliendo de la sala, vi a Dangella caminando de un lado a otro un poco nerviosa, la abracé por atrás haciéndola sobresaltar, se giro y me miró con su sonrisa, esa sonrisa que me hacía sonreír 😃.
- ¿Qué pasó? pregunto en un susurro mientras miraba hacia la entrada de la sala.
- Nada de que preocuparse respondí en un susurro mientras sonreía.
- Vamos a descansar del trabajo hoy comenté deshaciendo el abrazo y tomando su mano para luego dirigirnos al ascensor, ella apretó mi mano con fuerza, tenerla cerca me tranquilizo, mi enojó se desvaneció, estaba mucho más tranquilo.
- Primero quiero ir a comer, luego vamos al cine, jamas hemos ido desde que empezamos a salir, luego vamos a bailar hay un lugar genial que esta de moda, me entere por las redes sociales y quiero ir ahí contigo, también hay karaoke podemos ir por un momento, quiero comer amburguesa y muchas papas con soda, quiero ir a practicar bungee jumping, quiero volar en parapente, quiero ir en globo infable, ir a la playa, ver un atardecer y ver un amanecer 🌅. Todo eso y más lo quiero hacer, pero únicamente si tu estas a mí lado, porque sino lo estás todo lo que haga no tiene sentido comentó después de enumerar en sus dedos todas las actividades que queria hacer. Sus últimas palabras me dejaron en shock, ¿acaso esa era una confusión?, no sabia como sentirme, me sentía confundido, nervioso, ansioso y feliz, Dangella me miraba con una sonrisa feliz, con una sonrisa de enamorada como si yo fuera su razón de ser.
Minutos después su sonrisa se hizo una mueca, un poco de decepción apareció en su mirada, cerró los ojos un momento, los abrió y volvió a sonreír como antes. Ella iba a decir algo, pero antes de que lo hiciera escuche mi corazón y la besé, al principio era un beso brusco, sentía como si para ella fuera su primer beso, pero después se relajó y poco a poco se fue acostumbrando hasta convertirse en un beso tierno, lleno de cariño. Nos separamos cuando el aire nos falto, junte mi frente con la suya mientras tenía los ojos cerrados susurre.
- Lo siento por no decirte antes, siento lo mismo por ti, me gustas solté y la abracé con fuerza.
- Deberías decir te quiero susurro ella fingiendo seriedad, ¿cómo descubrí que no era su tono serio normal?, porque en su voz se sentía felicidad y su abrazo demostraba lo contrario.
- Eso también susurre cerca de su oído apretando mi agarré.
- Me dijiste que no has estado en una relación seria, quiero ser la primera y si tú me traicionas voy hacer que te arrepientas amenazó con una voz tierna, que me dio escalofrío.
- No lo voy hacer aseguré, - solo confía en mí pedí besando su sien, sentí como se tenso entre mis brazos, pero no le di importancia, me interesaba más estar a su lado, estar entre sus brazos y que ella no se fuera de mi lado, quería que ella fuera mía por siempre.
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