Capítulo 4

El domingo habia estado muy ocupado trabajando,  el dia habia sido demasiado pesado al igual que la mañana del lunes pero sin embargo decidí ir a recogerla.

-ahora ya no te creo que solo sea un juego reprocho mi hermano en tono serio mirando como subia a la moto.

-es un juego, no te preocupes sigo siendo el mismo de siempre aseguré en tono burlón.  Sonrió y se despidió de mí con un saludo de mano. Arranque la moto a toda velocidad; estaba cansado de lo mismo,  me estaba aburriendo y solo esperaba terminar con este estúpido juego de una vez por todas.

Llegue al lugar en donde solía parquear y me detuve, los estudiantes salían con expresiones aburridas, era primer dia de semana y como todos seguro que pensaban en el fin de semana cuando la semana acababa de empezar.

La vi salir a paso rápido entre el montón de estudiantes,  no salía sonriendo como de costumbre al contrario iba con una expresión triste. Frunci el ceño con confusión y arranque la moto a una velocidad lenta hasta que la alcance.

-hey! Saludé llamando la atención,  ella me miró y luego siguio su camino ignorandome completamente. Detuve la moto, me baje de ella y caminé a paso rápido hasta alcanzarla, la retuve tomandola del brazo.

-qué pasa? Pregunte con confusión volteando con mi mano su rostro hacia mí.

Sus ojos estaban llorosos y rojos,  algo no muy común en ella.

-no quiero verte susurro ella bajando su mirada hacia el piso.

-cuéntame pedí abrazandola con fuerza.

-nos están viendo aseguró ella con su rostro sobre mi pecho. Volte a ver a los lados,  muchos de los estudiantes habían detenido su camino para observar la escena que estábamos montando,  los fulmine con la mirada y me aparte de ella,  me monte en la moto.

-subete ordene en tono serio. Ella asintió sin ánimos e hizo lo que le pedí,  arranque la moto;  Sheila me abrazaba fuerte como si temiera a que desapareciera, pero por ahora iba a permanecer a su lado.

La lleve hacia un mirador donde me gustaba pasar tiempo cuando queria estar solo y olvidarme del mundo.

Nos sentamos sobre el césped uno al lado del otro con la mirada hacia el hermoso cielo que a la luz de la luna era una gran obra de arte.

Minutos después ella comenzo hablar y yo me dediqué hacer silencio,  solo me dediqué a escucharla.

-papá y mamá se conocieron cuando tenían cinco años,  sus padres eran socios. Con el tiempo se volvieron los mejores amigos, se tenían confianza,  se querían como si fueran hermanos. Los años pasaron y todo siguió igual decidieron estudiar la misma carrera universitaria ya que era lo que les apasionaba.

Al quinto semestre papá consiguió una hermosa novia de la cual se enamoró y con la cual planeaba casarse al terminar su carrera todo iba bien hasta ahí.

Un dia papá fue a recoger a mamá para llevarla a una fiesta de fin de semana,  su novia no podía ir porque tenía que estudiar, esa noche papá y mamá tomaron tanto hasta que terminaron en la cama.

Al siguiente dia ni siquiera se dirigieron la palabra y su relación cambio en definitiva, pasaron de quererse como hermanos a odiarse como si fueran los peores enemigos, dejaron de hablar y a todas las personas cercanas le extrañaba su actitud.

Un mes después,  mamá decidió volver hablar con papá para darle una noticia que les cambiaría la vida.

Papá se sorprendió cuando mamá le dijo que estaba embarazada,  los dos estaban deacuerdo con la decisión de abortar pero ocurrió algo y no pudo hacerlo, sus padres se enteraron y exigiron que tenían que casarse, papá tuvo que dejar a su novia y casarse con mamá por obligación.

El matrimonio empezó infeliz y es así como sigue.

Nunca les he importado, desde que tengo conciencia ellos me dejan sola y jamas tienen tiempo para mí.  Trató de complacerlos con mis buenas notas, mi buen comportamiento pero al parecer sigo sin importarles.

Me cansé de satisfacerlos en todo lo que quieren,  me duele que me ignoren,  me duele que me traten como un objeto más de la casa, me duele confesó ella con la voz rota.

-yo no tengo la culpa,  fue su error, no el mío dijo alterada.

La abracé para que sintiera mi comprensión,  la abracé para que sintiera mi compañía,  solo la abracé en silencio pero ella no lloro, era demasiado fuerte y orgullosa para hacerlo y en menos de nada la tuve frente a mí con una sonrisa sincera.

Era verdad lo que decían, una sonrisa tiene la capacidad de ocultar hasta el sentimiento más cruel y doloroso.

Aunque Sheila sonreía siempre por dentro estaba dañada,  no tenía la necesidad de quitarle su sonrisa inquebrantable pero si tenía la necesidad de verla llorar, queria que perdiera su orgullo y su fuerza,  mis planes habían cambiado totalmente.

Me iba a dedicar a ello en cuerpo y alma.

~♥~

Los dias pasaban lentamente y Sheila habia cambiado tanto física como mentalmente, me habia logrado cautivar por completo y ahora me gustaba demasiado,  me volvía loco.

Ahora su largo cabello negro caía hasta más abajo de su cintura, sus profundos ojos grises se observaban desde lejos sin esas horribles gafas, su uniforme era más corto y dejaba ver sus largas piernas, era hermosa.

-hola saludo dándome un beso en la mejilla,  levante una ceja. La tomé del mentón y la acerqué a mí para besarla con pasión,  ahora no me importaba que me vieran junto a ella.

Me separé y la miré directamente a los ojos, su rostro tenía una sonrisa impecable como siempre.

-mi orgullosa y testaruda chica dije en tono orgulloso con una sonrisa ladeada.

-algún dia te cansaras de mí y me dejarás.  Dejaré de ser tu chica y pasaré hacer la chica de alguien más aseguró acariciando mi mejilla.  Su comentario me molesto, aleje mi rostro de su mano y puse una expresión seria en mi rostro.

-jamas dejarás de ser mi chica, no voy a permitir que nadie más te toque aseguré en tono serio.

-me perteneces informe, ella era uno de mis trofeos y nadie me lo iba a quitar.

-te equivocas.  No soy un objeto que tiene pertenencia contradijo ella en tono enojado.

-no me gusta cuando estás enojada informé acariciando su mejilla con delicadeza cambiando de tema abruptamente.

Ella sonrió despúes de un par de minutos. Me miro de una manera que no supe deducir que expresaba pero por primera vez sentí miedo de que ella llegará amarme y que quedará metido en su piel tanto que no pudiera olvidarme y no pudiera rehacer su vida. Pero eso ahora ya no importaba, era una más. Uno más de mis trofeos 🏆.

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