Capítulo 7

Máximo

Me levanto tarde, ni tiempo de desayunar y me voy a la empresa, resuelvo unos asuntos y voy al restaurant dónde Lisa trabaja pero no la veo por ningún lado. Voy a hablar con su empleadora y me dijo que ella estaba trabajando en la cocina hoy. Por el rostro que puso al decirme esto un escalofrío me recorrió. Algo se que está muy mal y hasta que no la vea no lo descubriré.

Me guía hasta donde ella se encuentra y le hablo pero no puedo ver su rostro. Aceptó ser mi esposa pero algo me esconde y lo sé. Cuando me permite verla es que me quedo atónito. ¿Quien es capaz de golpear a una chica indefensa como ella? Su rostro está rojo, cerca de su boca morado y sus labios partidos e hinchados.

Hablo con la dueña del lugar para decirle que me la llevaré de inmediato así la ve un médico y que no seguirá trabajando y se pone contenta por ella. Le pregunto si sabe quién es capaz de algo así y si es la primera vez que sucede. Ella no sabe quién la maltrata así pero mi furia aumenta cuando me dice que no es la primera vez que asiste así

-Despidete porque es tu último día de trabajo- hablo serio y la dejo unos instantes a solas

Una de las empleadas la fue a abrazar cuando abrí la puerta para irnos y vi que un quejido salió de sus labios y que con dificultad le devolvió el gesto. Camina y sujeta su estómago cuando viene a mi lado. Salimos del restaurant y subimos al auto

-Necesito pasar a recoger algo

-Te compraré todo lo que necesites

-Por favor es importante

-A su casa- le digo a mi chófer

-Gracias

Me quedo en la puerta observando el lugar, es muy pequeño pero se que no todos pueden vivir en un lugar como yo. De todos modos ese lugar no me da una buena sensación. Lentamente con dificultad Lisa sale con una caja de regalo que despierta mi curiosidad pero le preguntaré en otro momento que hay dentro.

Llegamos a la mansión, debemos subir escaleras para ir al cuarto, mi chófer le dió el día libre a toda la servidumbre para que nadie pueda verla en tal estado. La cargo sin dificultad y la llevo a la habitación, la deposito en la cama y salgo un momento para llamar al médico.

-Ahora si me dirás quien te hizo esto

-Por favor no hagas nada

-Muestrame

-¿Qué?

-Tu abdomen, me di cuenta que te duele- la veo tan serio que está pensando que hacer así que levanto su ropa y la miro. Un moretón en esa zona que es bastante grande me sorprende y no quiero imaginar la fuerza necesaria para hacer algo así

-Dime quien fue, ¿Tu madre verdad?- mira hacia otro lado y eso confirma mis sospechas

-Mirame y escucha bien lo que te diré nunca más nadie volverá a tocarte, jamás

-Gracias

-El médico ya viene a verte

Encargué mucha ropa para ella ya que calculo cuales son sus medidas y por ser el mejor cliente del lugar una hora después ya muchísimas bolsas y cajas habían llegado. Ya que mi chófer es el único empleado aquí, él me ayudó a subir las cosas a la habitación que compartiremos. El médico abrió la puerta porque ya había terminado de revisarla y le pedí que me espere abajo

-¿Que son estas cosas?

-Ropa para ti. Ordené un poco pero cuando estés bien iremos a comprar todo lo demás

-¿Más que esto? Debió costar una fortuna, no hace falta que gastes tanto dinero en mi

-Seras la señora Blent, hace falta mucho más que esto. Ahora regreso

Bajé las escaleras y vi al doctor

-La señorita fue golpeada con mucha fuerza pero no hay mucho de que preocuparse, las lesiones sanarán pronto, no hay daños severos. Tiene que comprar esto, la medicación tomarla cada ocho horas y ésta crema aplicarla varias veces al día para que su rostro cicatrice rápidamente- me dejó la receta

-Gracias doctor- le di sus honorarios y se fue

-Ve a la farmacia y trae esto- le pedí a mi chófer

-Enseguida señor

Volví al cuarto y ella se veía mejor, me dijo que el médico le aplicó un analgésico inyectable pero aún así le recomendó hacer reposo unos pocos días. Comencé a abrir las bolsas y dándole algunas a ella para que me ayude en la tarea. Estaba sorprendida por la cantidad de cosas

-Puedes darte una ducha y luego colócate esto

-¿Cuál es el baño?

-Ven

Abri la puerta del baño y la hice pasar primero, comencé a llenar la tina, coloqué sales aromáticas y la deje sola para que se duchara

-Si necesitas algo estaré afuera

-Gracias

Seguí abriendo las bolsas y fui guardando todo. Unos golpes en la puerta me sacaron interrumpieron mi tarea

-Señor todo lo que me pidió está aquí y también traje algunos perfumes para la señorita

-Siempre eres tan eficiente, buen trabajo. Puedes retirarte, luego pide el almuerzo por favor

-Si señor

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