>>6<<

'Ethan'

Luego de terminar la pequeña llamada que me vi obligado a atender, me dirigí a la sala encontrando a mi pequeña practicando sus pasos de baile.

- Papi mira, ya casi me sale la danza del cisne.- contó contenta y sonreí para luego aplaudirla.

- Muy bien cariño, estoy orgulloso de ti.- Respondí para luego acercarme a ella y besar su cabeza.- ¿*Donde esta Emily?

- En la cocina papi, estaba preparando nuestra cena*.- contestó y asentí para luego dejarla seguir con su baile y dirigirme a la cocina.

Me apoye por el marco de la puerta y me dedique a observarla, sus movimientos de aquí y allá eran como una danza, una que daba solo para preparar nuestra cena.

Me era imposible no admirarla, no creer que existiera una mujer con todas las cualidades que buscaba. Bueno.. casi todas, aun no conseguía encontrar una mujer que fuera capaz de provocarme un Orgasmo y aunque ella tampoco pudiera hacerlo.. definitivamente no la dejaría ir, no estoy tan loco como para dejar que alguien más disfrute de la mujer que siempre quise tener, prefiero fingir satisfacción para retenerla a mi lado.

- ¿Le falta o no le falta? - La escuché decir mientras veía un punto fijo luego de probar lo que cocinaba.

- ¿Quieres que te ayude a debatir? - pregunté parado detrás de ella y giró a verme rápidamente para luego sonreír.

- *Lo siento, no lo oí llegar.

- Ya, no necesitas ser formal aquí, tratame de tu*.- Respondí y ella asintió.- Acabo de llegar, por ello no me oíste.- Añadí y ella vuelve a asentir.

- ¿Desea sacarme una duda? - preguntó y está ves fui yo quien asintió para luego verla tomar un poco de esa deliciosa salsa y soplarla para luego llevarla a mis labios. - Prueba y dime que tal esta de sal.- Añadió y abrí mi boca para luego probar y vaya que estaba buenísima. La sensación que hizo recorrer mi cuerpo fue inexplicable, jamás había comido algo casero, de una mujer que cocinara para mí y hoy.. mi paladar puede degustar una delicia casera. - ¿Y? - Preguntó y sonreí.

- Para mi punto de vista es lo mejor que he probado en mi vida, pero para no quedarme con dudas déjame probar un poco más.- Respondí para intentar acercarme pero ella me detiene.

- No no, deberás de esperar como Dixy, no puedo consentirte a ti y a ella no.- respondió para luego girarse y dejarme con una sonrisa en el rostro.

- ¿cuál es tu ingrediente secreto? - pregunté mientras me colocaba detrás de ella y acomodaba su cabello.

- Mi ingrediente secreto se llama Cariño, ternura y dedicación. - respondió para luego girar y verme con una hermosa sonrisa. - Toda comida que lleve esos ingredientes.. siempre será perfecta.- Añadió y sonreí.

- Pues gracias por compartirlo conmigo, ahora debo de aprender a cocinar para ponerlos en práctica.- Respondí y ella asintió.

- No te preocupes, yo puedo enseñarte.- Añadió para luego besar mi mejilla y sorprenderse de su acto colocando una mano en su boca.- *L-lo siento yo..

- No te disculpes*.- la interrumpi para luego tomarla de la cintura.- *Soy una persona a la cual le encantan esta clase de cariños y.. si me los das más a menudo seré el mejor jefe de todos.

- Entonces lo repetiré todos los días*.- respondió y sonreí asintiendo para luego tomarla de sus mejillas y acortar la distancia entre ambos.

Apenas vi su foto cuando me enviaron el currículo no dude ni un solo instante en contratarla, algo dentro de mi me decía que no iba a arrepentirme y pese a que llevamos poco de conocernos.. se y creo en que mi instinto no ha fallado.

Me quedé junto a ella hasta que termino de cocinar y juntos acomodamos todo lo que utilizariamos para la cena, mi pequeña corrió a nosotros pidiendo que la dejáramos preparar el jugo y ambos asentimos con una sonrisa.

Sentía aquí el amor de una familia, esta escena me hacía creer en que lo eramos.

Cenamos entre charlas y risas por las locuras de mi pequeña Dixy, quien no perdió ninguna oportunidad para avergonzarme y obligarme a darle una serie de cosquillas por su humillación, luego de ello, levantamos juntos lo utilizado y mientras yo me ofrecí a lavarlos, Emily acompaño a Dixy a su habitación para arroparla y acompañarla hasta que ella se durmiera.

Distraído entre mis pensamientos uno de los vasos se cae de mis manos y al querer recogerlo termine por cortarme.

- ¡Rayos! - Dije para luego reincorporarme y buscar un trapo con el cual hacer presión.

- ¡Ho Dios! - exclamó asustada Emily para luego correr a mi y tomar mi mano colocandola debajo del grifo para luego ver mi pequeño he insignificante corte.- No es profundo pero aun así sangra mucho.- comentó para luego levantar su mirada a mi.- ¿Donde tiene el botiquín de primeros auxilios? - preguntó y le indique con mi mano sana el lugar.- Bien, no se mueva, enseguida vengo.- respondió para luego correr por el como si fuera a desangrarme por esto.

Río ante su excesiva preocupación y la veo volver corriendo. Al llegar junto a mi saca un desinfectante junto a un pedazo de algodón y luego de remojarlo con el desinfectante, saca mi mano de él agua, la seca con su ropa y se dispone a desinfectar la herida.

Solo la observo fijamente preguntándome el porqué ha tardado tanto para aparecer en mi vida.

Me pierdo en mis pensamientos sin poder creer en lo que estoy diciendo, acabo de conocerla y ya la he traído a mi casa, le he permitido estar con mi hija y cuidar de nosotros. ¿Acaso es la indicada o solo es mi deseo desesperante por encontrar a la mujer de mi vida?

- Listo.- La escuché decir sacándome de mis pensamientos y vi mi dedo el cual ahora estaba cubierto con una pequeña bandita. - Ahora vaya a la sala mientras yo limpio esto.- Añadió para luego agacharse frente a mi y iuntar con rapidez los vidrios rotos para luego tirarlos a el tacho y girar terminando de lavar lo que deje a medias.

Mientras ella ordenaba todo, yo me dedique a verla y tratar de encontrar el porqué de su acto desinteresado asía nosotros pero solo vía a una hermosa he inofensiva mujer dispuesta a ayudar a quien sea sin importar entregarle de su tiempo.

Me acerqué a ella para luego girarla en mi dirección y sin perder mi tiempo comenzar a besarla.

Ella no puso resistencia, enredo sus brazos en mi cuello y correspondió a mi beso con la misma intensidad que yo la besaba.

Poco a poco mis manos descendieron hasta sus muslos y tomándola por ellos la levante logrando que enredara sus piernas a mi cintura y de esa forma la lleve hasta lograr sentarla en la mesa, lugar en el cual tuve la oportunidad de pegarme más a su cuerpo y saber que su sola cercanía provocaba en mi mucho más de lo que quería que provocará.

Levante su falda dejándola en su cintura y poco a poco la pegue a mi intimidad para luego frotarme contra ella, escuchándola gemir entre besos y gemir de igual manera yo al sentir como todo mi cuerpo pedía por más contacto.

Quite una a una sus prendas y de igual manera ella lo hizo conmigo quedando ambos completamente desnudos. No obviamos nada, no dejamos nada, solo era su cuerpo y el mio pidiendo más contacto.

- Ethan..-Gimió mientras yo me dedicaba a besarla desde su cuello hasta llegar a sus senos.- Ethan.. Dixy podría venir y..- la interrumpi volviendo a besarla para luego volver a tomarla en mis brazos y llevarla a la habitación.

No rompí el beso ni por un instante, sentí que si lo hacía ella iba a arrepentirse y en verdad la deseaba, en verdad quería que fuera solo mía.

Al llegar a la habitación ni siquiera me tome el tiempo de correr las mantas, solo la recosté en la cama y deje caer mi cuerpo sobre el suyo, moviéndome sobre ella, frotándome contra su feminidad y dejando escapar los mismos gemidos que ella daba.

Era la primera ves que perdía la cordura de esta manera pero no era algo que me importara, yo la deseaba al igual que ella a mi.

- Di-dime que no te has arrepentido.- dije agitado mientras seguía frotándome contra ella.- *Dime que deseas continuar.

- Es lo que más quiero ahh*..- respondió gimiendo y logrando que mi miembro tomara más dureza.- Qui-quiero que me hagas tuya Ethan..- Añadió y no basto más, Me abri paso entre sus piernas y de una sola estocada la penetre, sintiendo como me recibía, como se abría para mi.- *ohh Dios.

- Emily*.. - gemi para luego comenzar a moverme dentro de ella, sintiendo como sus paredes me apretaban, como su cuerpo me recibía y me acompañaba. - ¿Hace..hace cuanto tiempo no tienes intimidad con un hombre? - pregunté, pues para mi punto de vista y por lo que estaba sintiendo.. creí que tal ves podría ser virgen.

- N-no lo recuerdo bien, creo que la última ves fue hace 5 años atrás.- contestó y sentí arder todo dentro de mi.

- Pues de seguro el imbecil no supo hacértelo bien, porque estas bastante cerrada Muñeca.- Respondí para luego comenzar a moverme sobre ella. Arriba, abajo, dentro, fuera, en círculos. Todos y cada uno de mis movimientos provocaban que ella se mojara más de lo que estaba, que se sonrojara más de lo que parecía y yo.. yo me sentía en el mismo paraíso.

No.. No podía ser ahora, no cuando acabo de comenzar.

Me moví con rapidez tomándola de sus caderas con fuerza, sintiendo como cada ves era mejor y por fin.. después de tantos años, he podido volver a apreciar un orgasmo, uno de esos que no he tenido desde mi juventud.

- ohh Dios..- gemi al vaciarme completamente en ella y sentir como los espasmos de él orgasmo aún seguían haciendo efecto en ella. - ¿Estas bien?

- Aun estoy ardiendo.- respondió envolviendo me por mi cuello.- Aún quiero más. - Añadió. Iba a decirle que tal ves deberíamos de esperar porque mi cuerpo no funcionaba así pero.. Al parecer mi miembro cobraba vida ante sus palabras.- ¿Puedes darme más?

- Puedo darte mucho más.- Respondí sonriendo para luego besarla y poco a poco ir girandola y dejándola sobre mi, que sea ella quien lleve el ritmo ahora. - ohh Dios Emily, si, sigue así, justo así.- pedía mientras sentía sus sensuales movimientos sobre mi. - Ahh nena, no pienso dejarte ir jamás.- Añadí para luego tomarla de su cintura y ayudarla a poner intensidad en el momento.

- Tampoco pienso dejarte ir jamás.- respondió tomándome de ambas mejillas y me detuve para luego mirarla a los ojos.

- ¿Lo juras?

- Lo juro.- respondió y me fue inevitable no besarla mientras sentía como ella volvía a moverse sobre mi y lograba que volviera a eyacular dentro de ella, una ves más y creo que no será la última.

Esta ves la gire boca a bajo para luego posicionarme detrás y darle con todas mis fuerzas mientras ella gemia, mientras ella me pedía más y yo muy encantado la complacía.

*Emily, lo has jurado y por ello deberás de cumplir con tu palabra.*

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***