cap 2

Baje rápidamente las escaleras cuando mi mamá Sana envio un mensaje desde su trabajo de decoradora escribiendo que había comprado budín así que salí rápido antes que Amber se lo comiera pero termine tropezando en el cuarto escalón y cayendo.

Puse rápidamente mis manos hacia delante para apoyarme y no golpear mi cara mientras mis rodillas si impactaron en el suelo.

- Mina!...- escuche la voz de alguien familiar gritar mi nombré y alce mi cabeza para ver a Chae.- Tienes que tener más cuidado al bajar las escaleras.

-Lo sé...

Se acerco a mi mientras yo me sentaba viendo mis rodillas rojas, Chae se puso de cuclillas delante mío.

- ¿No te lastimaste en otra parte?

- No.

- Hay que poner un poco de hielo aunque eso no evitara que te salga un hematoma.

- Estoy bien...

- En serio deberías tener más cuidado?

- Es que Amber podía comerse mi budín.

- ¿Budín?

- Si mamá compro dos.

- Mierda...

- ¿Sucede algo?

- Verás... Es que...- hablo mirando hacia otro lado acariciándose la nuca.- Ella me lo regalo...

- ¿Qué hizo que?

- Lo siento mucho, ella no me dijo que era tuyo solo me lo dio.

- Esa idiota.

- Lo siento mucho...

- No pasa nada, no hiciste nada malo...- estire mi mano para acariciar su corto cabello, tan suave.

- Vamos al sofá para poner hielo.

- Si, en la nevera debe haber varias bolsas de hielo.

- ¿Por qué tantas?

- Bueno como sabes tenemos una mamá muy celosa que no se controlan cuando intentan sobrepasarse con mi mamá Sana y termina con los nudillos rojos después de lanzar un puñetazo a un idiota provocador.

- Entiendo... Al menos tu mamá hace bien al pegarle al idiota y no a ella..- recorde que antes de que Chae pasara a vivir sola con su tío, él estaba casado y presenciaba las peleas y maltrato, vi una pequeña sonrisa pero no de felicidad, una amarga sonrisa pequeña en sus labios.

- Tú tío volvió a...- él a veces se enojaba con ella y la lástima.

- Si.

- Por eso estabas triste el día de la presentación?

- En parte si.

- Y la otra?

- Mi novia me engaño...

- ¿Tenías novia?.- sabía que Chae salia con algunas chicas por diversión pero no una formal.

- Un nuevo record dure un mes con ella, era una relación en secreto y bueno la vi besándose con alguien en su salón de clase mientras sus amigas la alentaba, era un desafío o verdad y me pidió perdón.

- Es una idiota...

- Ya no importa, ahora estamos bien.

- ¿Volviste con ella?

- No, somos amigas y además creo que la relación no duraría mucho más también me sentía mal por estar con ella pensando en otra persona...

- Pero no le fuiste infiel...

- No, iré por el hielo.

Asentí, me preguntó quien le gusta a Chae, era molesto no se por qué... Tal vez me sentía así porque ella ya estaba sufriendo mucho para que alguien causara más dolor, era alguien que se veía fuerte pero no era así, me preocupaba mucho.

...>>>...

Cuando llegue a la dirección que Jihyo me había mandado mire a mi alrededor hasta encontrarla sentada en una fuente moviendo sus piernas de atrás hacía delante.

- Aquí esta su príncipe al rescate hermosa doncella.- dije al pasarme delante suyo.

- ¿Por qué tardaste? .- me miro con el ceño fruncido.

- ¿Qué? Todavía que eres tu la que me pides que venga te enojas, genial.... Sabes cuanto tardo de aquí a mi casa y tuve que correr desde la estación porque no traje mi billetera y solo tuve para pagar el bus...- oí su risa y la mire molesta.

- Lo siento... Pero me alegra que vengas.

- ¿Y bien que sucedió?

- Daniel y yo nos veríamos aquí pero dijo que le surgió algo importante y unas chicas de mi clase no paran de observar me.

Cerré fuertemente mis puños, exhale e inhale tratando de controlar aquel impulso de enojo por lo que pasaba ella, quería ir a donde estaba él idiota y golpearlo.

- No quieres que piensen que te dejaron plantada.- me senté a su lado abanicándome con mi mano.

- Bueno es lo que ellas pensarían si supiera que tenía una cita con Daniel.

- Ya... Casi siempre le surge algo.

- Es porque ayuda a su mamá y papá con la empresa, también a ti puede que te suceda...

- Puff que una chica me deje plantada nunca, antes son las que me piden la citas...

- No me refería a eso idiota, lo decía por la empresa.

- A... Bueno mamá Tzuy no le gusta eso, es como poner una carga sobre nuestros hombros y están los estudios sería mucha presión, además nosotras podemos elegir lo que queramos...

- Eso es bueno, que te dejen elegir lo que quieres ser, por lo que hay padre que quieren que sus hijos sigan sus pasos y no los dejan hacer lo que ellos quieran más los dueños de empresas o ricos.

- Si pero por suerte mi mamá no es así, ni mamá Sana, ambas nos dan la libertad de elegir.- (También Daniel puede elegir si no lo sabías tonta)

Jihyo no tenía una vida facil, su madre tuvo que criarla sola después de que su padre la abandonada a los 7, la señora Jisoo era una buena madre que se esforzaba para darle lo mejor a su hija pero por eso se enfermaba y perdió él trabajo, así que Jihyo empezó a trabajar de mesera en una bar incluso había noches en las que cantaba en el lugar y yo iba a verla para cuidar que nada le pase.

Yo le ayude a su mamá a conseguir trabajo, convirtiéndose en una secretaria de una conocida de mamá Tzuy, llamada Jennie también empresaria que estaba en el top de las mejores.

- Vamos por algo de tomar, debes estar muy sedienta...

- Ya estabas tardando en invitar, estoy apuntó de tomarme todo el agua de esta fuente.

- Eso es imposible.

- Lo es pero si no tomo algo, beberé agua de aquí.

- Quieres ir a una cafetería o de la máquina expendedora.

- Primera, ya me esta molestando las miradas de esas chicas.

- Al parecer les gusta observar la vida ajena.

- Si...

- Pero tu no salías con una de ellas.

- Solo fue por dos días.

- ¿Por qué?

- No lo se, tal vez celos, además sabes que tengo muchas chicas alrededor entonces era imposible que no se pusiera celosa.