CAPÍTULO X Cerrando ciclos

Mientras ordenaba su equipaje y sacaba su ropa de las maletas y organizaba su ropa en el armario, Catalina se dio cuenta de un importante detalle, el cual debido a que se encontraba disfrutando de sus vacaciones no

había notado antes y era que las toallas sanitarias que llevaba dentro de su equipaje no fueron utilizadas, y ella por lo general solía ser muy regular con su visita mensual, aunque esta no era la primera vez que le ocurría que se retrasara su periodo cuando enfrentaba algún problema personal que la causara mucho estrés, consultó en su calendario y notó que solo había transcurridos dos semanas desde la fecha que debía haber llegado su periodo, intentó calmarse porque también recordó que Felipe usó preservativos durante el acto y las estadísticas dicen que son efectivos en un 95%, y ella no creía ser tan afortunada de encontrarse en el 5% en las cuales fallaba ese método anticonceptivo.

-Deja de pensar en absurdos Catalina, seguramente en un par de días llega mi periodo y me voy a estar riendo por estar asustada - Se dijo a sí misma para calmarse

Catalina no le dio mayor importancia a ese hecho  y al día siguiente se vistió con su nuevo outfit para ir a su trabajo y enfrentar las miradas incómodas de sus compañeros de trabajo, se despidió de su familia y se dirigió a la empresa para reincorporarse a  su trabajo, por suerte para ella debido a la rapidez con la cual actuaron los ayudantes de su papá y los conocidos de Felipe el efecto de las fotos no fue muy grande en su entorno laboral, aunque algunos compañeros la miraban con curiosidad debido a las fotos publicadas dado que se trataba de un hombre diferente a su novio, aunque en la empresa  prefirieron actuar como si no sabían nada porque Catalina en cuanto a su trabajo era una mujer muy profesional y por eso era muy apreciada por sus supervisores.

Julio intentó comunicarse con ella desde que se fue de viaje, porque a pesar de que  obtuvo lo que necesitaba de Héctor y comenzó a trabajar en el hospital pediátrico de la ciudad al cual era muy difícil conseguir una vacante siendo un profesional recién graduado, su orgullo le impedía dejarla ir, y en cuanto se enteró de

que ella regresó a su trabajo decidió llamarla a su extensión para hablarle.

-Cata, por favor, dame la oportunidad de explicar bien lo que sucedió - Insistió Julio

Catalina, por su parte, y debido a todo lo sucedido luego de la discusión entre ambos, sentía un poco de remordimiento y  quería darle un cierre a toda esta vergonzosa  situación con Julio, y a pesar de que sentía mucha ira hacia él debido a su engaño, ella era una persona con fuertes valores y sabía que tampoco había actuado de forma correcta al tener una aventura con Felipe cuando aún no estaba claro que la relación con su novio había terminado y por eso aceptó tomar un café con Julio a la salida de su trabajo.

-Está bien Julio, considero que es importante que hablemos, dime la hora y el lugar para encontrarnos - Dijo Catalina con decisión

Catalina quería dejarle en claro a Julio que todo había terminado entre ellos, que no estaba dispuesta a perdonar su engaño ni a darle otra oportunidad  a pesar de lo avergonzada que se sentía porque un asunto tan

personal salió a la luz pública, aunque  también  fue gracias a esta aventura que se dio cuenta de algo muy importante, y, era que sus sentimientos por su exnovio no eran tan profundos como ella suponía, ni estaba a gusto con la relación que tenían, y por eso quería pasar página y pedirle  que  continuaran con su vida cada

uno por su lado y no volver a una relación  tan tóxica, porque durante los dos años que fueron pareja  siempre fue muy complicada debido a los constantes abusos verbales de Julio hacia ella, lamentablemente Catalina tenía una baja autoestima y le permitió muchas conductas inapropiadas  hasta que terminó creyendo que

esto era lo “normal” en una relación hasta que al tratar con una persona como Felipe, tan apuesto, pero a la vez tan respetuoso y haciéndola sentir  como la mujer más hermosa del mundo, lo que le hizo anhelar algo diferente para su vida.

-Catalina finalmente te atreves a darme cara.

Catalina y Julio se encontraron en la cafetería de un centro comercial ubicado en las inmediaciones de la empresa, el cual era el más moderno de la ciudad, y ese café estaba de moda además la decoración del sitio evocaba al romanticismo de décadas anteriores, y Julio insistió en encontrarse allí porque sabía que a Catalina le encantaba ese lugar, sin embargo, y a pesar de la belleza del sitio desde el principio Catalina sintió que el ambiente entre ellos era muy hostil, y aunque sentía un poco de desconfianza, se convenció de  que necesitaba hablar con Julio con honestidad

-Ese día te dije que debíamos terminar y vine a esta cita porque quiero qué queden claras las cosas entre tú y yo - Dijo Catalina con decisión

-Yo no dije que estaba de acuerdo en terminar Catalina, eres mi novia y quería que nos casáramos, pero te atreviste a irte a un hotel con un desconocido sin importarte que nunca quisiste acostarte conmigo - Le reclamó Julio

Catalina bajó el rostro sintiéndose  avergonzada porque era cierto que ella nunca quiso acostarse con Julio, pero esto  era debido a su forma tan agresiva de abordar la intimidad, lo que le causaba tanto temor y no la hacía sentir cómoda para entregarse a él.

-Lo siento mucho por eso Julio, pero tú  jamás insinuantes que me propondrías  matrimonio

-¿Entonces no quieres casarte conmigo? - Preguntó Julio asombrado

-Julio, si me hubieras propuesto matrimonio te habría dicho que NO, porque aún no me siento lista para casarme - Respondió catalina con frialdad

Julio se daba cuenta de que esta conversación no iba en la dirección que él quería, además le molestaba la actitud tan insolente y malcriada de parte de Catalina

-Catalina, he decidido perdonarte, que te parece si olvidamos todo lo ocurrido, ahora estamos a mano, yo te engañé y tú hiciste lo mismo,  incluyendo que le entregaste tu virginidad a un desconocido

Catalina se sintió muy frustrada porque esta conversación con Julio no iba a terminar bien, porque ella no iba a regresar con él, por el contrario, con todo lo que le estaba diciendo, más la convencía de que esta era la mejor decisión

-No voy a regresar contigo Julio y entiéndelo por favor, ya se perdió el respeto entre ambos, esta relación es

necesario terminarla y no seguir haciéndonos daño - Dijo Catalina

-No estoy de acuerdo Catalina, yo aún te quiero - Respondió Julio conteniendo la ira

-No es mi problema si estás de acuerdo o no porque esta es mi decisión, a pesar de que aún te quiero no soy tan tonta para continuar con una relación que va a terminar siendo muy mala para mí en el futuro.

Julio no conocía esta faceta de Catalina, aunque sabía que ella siempre expresaba sus opiniones sin importarle como se sentían las demás personas al respecto, solo que con Julio ella jamás había sido prepotente.

-Catalina siempre pensé que eras una mujer decente, pero resultaste toda una zorra.

Julio se llenó de ira porque no consiguió lo que quería de ella, además de que pudo observar detenidamente a Catalina y lucía muy diferente, incluso se hizo un cambio de look que la hacía verse más atractiva.

-Julio no te voy a permitir que me insultes, después de todo lo que has hecho, así que esta conversación termina en este momento - Le advirtió Catalina

Catalina se levantó de la mesa muy molesta debido a sus ofensivas palabras  y se fue sin esperar a que llegarán sus bebidas.

- A donde crees que vas esta conversación aún no ha terminado - Gritó Julio

Luego del asombro inicial porque ella actuó de forma tan decisiva, Julio se fue tras ella, tuvo que caminar muy de prisa para poder alcanzarla, y estaba tan enojado que  la sujetó con mucha fuerza del brazo.

-¡No te atrevas a dejarme hablando solo Catalina!- Dijo Julio con mucha ira

-¡Suéltame Julio!!!, ¿Acaso te volviste loco?, todos nos están mirando - Respondió Catalina

-No me importa quienes están viendo, te atreviste a faltarme el respeto y ¿crees que se va a quedar así?

-Suéltame Julio, porque me estás lastimando - Respondió

Julio y Catalina continuaban discutiendo mientras varias personas  a su alrededor observaban el enfrentamiento aunque no se atrevían a intervenir en el altercado, Catalina se esforzaba por soltar su brazo de su fuerte agarre,  sin darse cuenta de que se estaba dirigiendo hacia el borde de las escaleras del centro comercial  y que cada vez que intentaba soltarse se acercaba más a este, ella seguía luchando para que Julio entrara en razón, y antes de darse cuenta   perdió el equilibrio,  y se cayó por las escaleras,  aunque  trataba  de sujetarse de los pasamanos, seguía descendiendo con rapidez, ya esperaba recibir un fuerte golpe porque no podía detener su caída, cuando sintió que alguien la sujetaba y la cubría con su cuerpo para ayudarla, no obstante debido a la inercia ambos cayeron al suelo  dándose un fuerte golpe contra el piso, ella sintió mucho miedo y dolor, cuando se desmayó debido a la impresión.

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