capítulo 16- sonrisa

Tras unos días de tener que vivir bajo el mismo techo que Viktor, se ha acostumbrado a su presencia, además de que, por el momento a decidido dejar que todo fluya con normalidad, si Viktor y Zaria se enamoran en algún futuro, ella no intervendrá, pero si eso no sucede, tendrá que casarse con él, lo que tampoco es tan malo, es un chico amable al menos con ella y hasta ahora se han entendido bien; ese día, el Duque finalmente regreso a casa, aunque solo había vuelto por cosas importantes que tenía que llevarse, claro que tiene que hablar con ellos primero.

- ¿que? ¿El emperador se fue del país? ¿Pero que esta pensando mi primo? ¿Padre estarás bien?

- si, no te preocupes, aunque debo volver a la capital debido a eso, no podemos dejar que Petrov encuentre el sello real.

- entiendo, pero padre, por favor si se vuelve peligroso, mejor regrese.

Dasha ya se había parado cerca de su padre y le abraza, aunque ella no sea la verdadera, le preocupa que el Duque este en peligro, porque ella sabe perfectamente lo que se siente no tener una familia y ahora que al menos tiene un padre, no quiere perderlo. El Duque le corresponde el abrazado, dando una ligera palmada en su espalda.

- estaré bien. Alteza, lamento pedirle esto, pero por favor, quédese más tiempo.

- no se preocupe Duque, no necesita disculparse, yo protegeré a la princesa.

- se lo agradezco alteza.

Al menos sabe que su hija esta bajo el cuidado de alguien que si puede protegerla, conoció a los emperadores de oceánica y sabe de lo que son capaces, lo que significa que su hijo no es diferente y pese a su corta edad, confía en que puede cuidar de Dasha. Ese día el Duque se quedo para cenar y partió al amanecer; Dasha había salido al jardín, a caminar, pero le costaba mucho moverse en la nieve, además de que así, no puede ni practicar su cabalgata.

- no debería salir princesa, podría herirse.

- estoy bien, no iré lejos. Más que eso ¿por qué no se hunde?

Dasha mira los pies de Viktor y él esta perfectamente parado sobre la nieve.

- eso es porque estoy usando un poco de magia. Escuche que usted también era talentosa.

- ¿eh? Por supuesto que si, pero eso es algo que no se hacer, pero si quisiera derretiria toda la nieve de la mansión.

- eso requiere mucha magia ¿de verdad podrá hacerlo?

Dasha desvía la mirada frunciendo los labios, ese príncipe es bastante molesto, así que recoge nieve en sus manos y se lo lanza a la cara de Viktor, los guardias que estaban cerca, siendo los que siempre van con Viktor se quedan asombrados por lo que hizo Dasha, el chico se quita la nieve de la cara y sonríe.

- veo que paso a su fase agresiva.

Viktor se inclina a buscar nieve, así que Dasha trata de correr para alejarse pero termina cayendo entre nieve, ante esto Viktor corre para ayudarla a levantarse, Dasha puede sentir la fria nieve en su cara, sacudiendo esta rápidamente, mientras escucha como Viktor se ríe de ella.

- no me hable!

Como puede se marcha para entrar nuevamente a la casa, que vergüenza, haberse caído así ante todos esos guardias y encima de todo, Viktor se burlaba de ella. Lila le da una toalla para que se limpie y le ayuda a cambiarse el abrigo, mientras le dice que debe tener más cuidado o podrían atrapar un resfrío, Viktor entra y le coloca una capa antes de que se ponga el otro abrigo.

- la capa tiene un hechizo, la ayudara a poder caminar en la nieve.

- ¿de verdad? ¿Se puede hacer eso?

Dasha observa la capa, pero no ve que tenga nada en especial, pero le emociona eso de que sea mágica.

- si, se puede, cuando salga llévela.

- gracias alteza, cuidare bien de ella.

Dasha muestra una sonrisa, una que Viktor puede notar, es realmente sincera, ahora se alegra de haberle regalado algo así, incluso pareció gustarle más que los diamantes que le dio en su cumpleaños.

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