UN TRAIDOR INESPERADO

— ¿Se puede saber qué les está sucediendo? Les recuerdo que están delante de la casa de manada, un lugar respetado en dónde estoy yo - Su voz y su presencia era escalofriante - Si quieren darse demostraciones de sus cualidades Lobuna algo de lo que tú careces Siena tienen la base del entrenamiento

- Al momento en que el Alfa había expresado aquellas palabras Venus había dejado escapar un rugido sus ojos amarillos se intensificaron aún más y aquella mirada no le pertenecía a la Loba era una mirada completamente diferente en ese momento Venus era incapaz de ser sumisa ante KAM. — Detente - El lobo Alfa estaba un poco enojado el azul de sus ojos estaba siendo remplazado poco a poco por el color amarillo lo que indicaba que no solo estaba tomando el control a través del enlace mental también estaba por tomar el control absoluto del cuerpo logrando sacar toda su furia reprimida en el momento menos indicado.

— Venus entrega el control a Siena ahora no me hagas repetirlo después es tu obligación dirigirte a mi oficina— Con aquellas palabras Alfa Asher controló por completo a KAM - Y ustedes vayan a revisar que ha sucedido en nuestra ausencia— aquella orden fue dirigida al Beta y al Delta de la manada.

— Los trillizos habían sido obedientes, Balto y Maximiliano se dirigieron con dirección en dónde se encontraban los Guardias que se habían quedado de encargados de la manada y Siena se había tapado con algo y siguió los pasos del Alfa hasta su oficina - Siena joder pasa de una jodida vez - La pelirroja dejó escapar un profundo suspiro la voz de ese macho en todos sus estados de ánimo generaban un montón de emociones en el interior de la loba así que decidió adentrarse en la oficina.

— ¡Alfa! - Murmuró Siena manteniendo la cabeza agachada ante el hombre.

— Explícame de una vez a que estaban jugando - El Alfa la fulminaba con la mirada, de alguna u otra manera el Alfa sabía que la mirada que La loba le había dedicado no era la de una Loba, él sentía que la loba no iba a ser sumisa ante su Lobo.

— No estábamos haciendo nada malo, solamente estábamos bromeando.

— ¿Qué oculta tu Loba? - Alfa Asher la analizó seriamente.

— Ella no oculta nada ni siquiera cuando Edwin quiso tomarme a la fuerza se había puesto así— Siena se había callado de manera rápida al darse cuenta de lo que acaba de decir la loba, se había dado cuenta del primer error que había cometido - No me hizo nada - agregó rápidamente Siena.

— Siena - el Alfa negó con la cabeza— Me estás diciendo que extrañas al imbécil que quiso hacerte suya a la fuerza— Su voz era muy baja, pero a la vez aterradora.

— Otro error - murmuró Venus.

— Tu callada Loba - Siena la reprendió— si te hubieras puesto sumisa a él y no desafiar al Alfa con tu mirada de Tigresa Asesina no estaríamos aquí.

— Contéstame Siena - el Alfa había interrumpido la conversación entre Siena y su loba, el Alfa había adquirido una actitud que irradiaba peligro.

— Basta Alfa— Siena ya se había puesto en modo defensivo - No ha sucedido absolutamente nada y si extraño a Edwin no tiene nada que ver con usted - Siena estaba cabreando al Alfa y lo confirmó cuando se acercó a ella peligrosamente la loba por inercia había retrocedido.

— ¿Por qué retrocedes Siena o ya has perdido tu valentía? - el Alfa sonreía con maldad sus manos viajan hasta la cintura de ella logrando que la piel de ella se enchinara ante aquel tacto - Loba - susurró al oído de ella - no quieras engañarte o engañarme si soy el único que te da escalofríos y aun así sigues teniendo la valentía de desafiar mi autoridad y mi sabiduría Siena Landfor - El Alfa sonreía de una manera que desbarataba por completo las barreras de Siena— Sé perfectamente pequeña loba que tus palabras en el vehículo fueron para darme celos y te confieso que en el momento en que las llegaste a pronunciar has conseguido darme un poco de aquel sentimiento, pero posteriormente cuando escuché tu conversación con Kaylee entendí que tú eras mía y que la celosa eras tú estuviste celosa desde el momento en que me viste con ella la noche anterior es por esa razón que estabas triste— Siena se había quedado sin habla ante el Alfa, pero sabía que no podía ser así.

— Estás muy confiado - Respondió la loba.

— Por supuesto que lo estoy Siena y tú me lo confirmas cada vez que escuchas mi voz o cada vez que te miro con un simple roce de mis dedos en tu suave piel como ahora— mientras Alfa Asher hablaba sus ojos, su voz magnética y sus manos acariciaban a la loba - ¿Te das cuenta Siena? Son actos tan simples y tú ya estás bien puesta para mí, no puedes resistirte, no lo podrás nunca Siena Landfor— El Alfa una vez más había rozado sus labios con los de ella.

— Que alguien me explique como este macho puede describir todo lo que sentimos cuándo estamos cerca de él y no me salgas con la estúpida respuesta de que tal vez sea porque Asher DuPont es el Alfa más sabio - Venus volvió a opinar. Siena se mantuvo en silencio, ella sabía que la opinión de su Loba era la correcta mientras intentaba de sobreponerse de la descarga reciente de la cercanía del Alfa.

— Bueno Siena, no es hora de meternos en los juegos de la seducción, quiero saber que guarda tu Loba, pero ya estás advertida la próxima vez que hagan el intento de experimentar sus destrezas Lobunas, háganlo en el salón de entrenamiento y asegúrense de que nadie los vea porque ni siquiera en las sombras se debe de confiar Siena. — ¿Ocurre algo? - Pregunto la loba.

— No, simplemente prefiero que tus entrenamientos intensificados sean conmigo y que nadie lo vea de lo contrario Todos pueden saber tus puntos débiles y eso es algo que nosotros debemos dejar de ver ellos no tienen por qué descubrir tus verdaderos puntos débiles serás el blanco a atacar innumerables de veces Siena eres descendencia de Vampiros - El Alfa se había alejado de Siena, pero la loba ya entendía lo que él quiere que entienda los enemigos deben de ver lo que ellos quieran y no su verdadero rostro - Puedes tomarte la tarde libre y salir con tu amiga nada más no tarden y tampoco dudes en informarme de todos los sucesos raros que ocurran a tu alrededor— El hombre había tomado asiento y la loba se había despedido saliendo de la oficina.

— Nadie imaginaba que Alfa Asher tenía ciertas dudas que debía de aclarar y que así cómo él tiene sus secretos, él no tenía dudas de que la loba de Siena también tenía un secreto, pero lo más importante era su protección, así que había utilizado el enlace mental con 3 de sus guardias más peligrosos- Cuiden a la loba, pero denle su espacio— fue la orden dada por el Alfa a través del enlace mental.

— Siena iba en busca de Safari y no había hecho mucha falta buscarla, puesto que en la entrada de la casa Lucían, Caleb y Safari la habían interceptado —¡Safari! - Siena se quejó, puesto que su amiga se había lanzado en sus brazos.

— Me estás ofendiendo el Alfa pesa más que yo y no escucho que te quejes - Safari prácticamente lo había expresado con diversión logrando que Caleb y Lucían también sonrieran.

— Baja la voz no seas chismosa - Siena se quejó.

— Mejor vamos a dar una vuelta - Caleb decidió cortar aquella conversación.

— Mañana habrá una fiesta de Clamor a la Luna muy tradicional, así que vamos de compras - Balto y Maximiliano habían salido de los arbustos.

— ¿Que es clamor a la Luna? - Preguntó Safari - En Luna de Oro nunca hemos escuchado hablar de eso.

— Aquí no es Luna de Oro, es Fuego de Luna y tenemos muchas tradiciones ocultas y una de ellas es el Clamor a la Luna para que los lobos que han perdido a su pareja encuentren a unas de segunda oportunidad - Siena y Safari sonrieron emocionadas ante aquella idea - Nosotros provenimos de la Academia de Licántropos y allí el Alfa había creado nuevas tradiciones - sentenció Balto Landfor.

— Es emocionante aquello— Expuso Siena - Pero ¿No será peligroso? Digo como estamos siendo cazados - Siena hizo un puchero mientras seguían avanzando.

— No te preocupes, el Alfa también estará así que no te pasará nada— Agrego Balto, los hermanos se habían visto en la obligación de detenerse junto a alguien.

— Safari, deberías de secarte las babas por Balto— La burla de Lucían hizo que Caleb y Siena se rieran a carcajadas hasta que sintieron una nueva presencia extraña, aunque estaban en su Territorio y era de día los jóvenes se habían puesto serios - Supongo que es mejor volver a la casa de la manada - Expresó Lucían y así lo hicieron una vez adentro cada uno había ido por su lado.

— Nos vigilan Siena - Murmuró Venus. — No te irás con tus amigos al Clamor, te irás conmigo - Alfa Asher se encontraba a espaldas de Siena y acababa de hacer lo que la loba más odia y era que le impongan autoridad, pero no podía hacer nada, él era el Alfa y ella lo debía de obedecer.

— Tanto el Alfa como la Loba y los demás miembros de la manada no se imaginaban que el enemigo los vigilaba tanto de día y de noche.

— Que el traidor estaba dentro de la manada que comparte con ellos y que conoce cada punto y problema de la manada y que el día menos pensado aquel en quién han depositado su confianza les va a dar una puñalada por la espalda y aquel es un traidor inesperado.