capítulo 11

Leer todo lo que tuvo que pasar me hizo sentir muy mal, así que decidí aprovechar la escuela, encender mis neuronas, y ser una buena hija.

...Regreso a clases....

Hoy es el primer día de mi tercer año de secundaria, hoy seré una buena alumna, supérate a Yair y pondré atención a clases.

...6 meses después....

Hoy hay reunión de padres y maestros, estoy un poco nerviosa, aquí siempre me destacan por ser la alumna más problemática de toda la escuela.

Últimamente me he portado bien, los profesores parecen sorprendidos, me preguntan si no me cambiaron por otra, si estoy hipnotizada o si soy la gemela de Natalia, no se la creen, ni yo me la creo pero bueno.

La reunión empieza, y para mí sorpresa hablaron muy bien de mi, incluso felicitaron a mamá por corregirme a tiempo.

Jajaja la pobre está más sorprendida que yo.

La junta termino y antes de irme a mi casa fui a mi casillero para tomar unos libros.

En el camino de vuelta me tropecé con mi amor imposible, digo mi ex amor imposible.

¿A quien quiero engañar? si todavía me gusta muchísimo.

Mis libros se cayeron al piso, el se disculpo, me ayudó a recogerlos y me sonrió.

Siempre tan lindo.

Natalia ¿en qué quedamos?, tienes que superar a Yair.

Yair: ya tiene mucho que no te veo en las gradas.

Pensé que con tantas chicas lindas animándole no iba a notar mi ausencia.

-- He estado ocupada. _ y sin más me fui.

...Fin de año....

No me la creo, anunciaron mi nombre para que pase a recoger un diploma.

Mi mamá tiene una cara de felicidad que no puede con ella, creo que está orgullosa de mi.

Me levanté todos me miraban, y como no estoy acostumbrada a ser el centro de atención y mucho menos a estos zapatos de tacón termine tropezando.

Pero antes de que cayera e hiciera el ridículo Yair tomo mi mano con fuerza.

Ay no, de todos lo que pasaron a recoger diploma ¿tenía que ser el?.

Me paro derecha y me suelto de su agarré, le doy la mano al último profesor y bajo antes de que todos se den cuenta de que estoy más roja que un tomate 🍅.

La única que se dió cuenta fue mi madre y tuve que contarle todo. Primero se rió y después me entendió.

...Preparatoria....

Mi madre insistió en que estudiara en una escuela privada, yo me negué pero al no poder convencerla termine aceptando.

Solicite una beca pero por no echarle ganas a a primero y segundo de secundaria me la negaron.

El primer año me la pasé estudiando como loca, de vez en cuando veo Yair, no compartimos muchas clases y cuando estoy a punto de taparlo en el pasillo me alejo inmediatamente, no debo hacerme ilusiones con el y mucho menos distraerme de mi propósito.

...Segundo de preparatoria....

Conseguí la bendita beca. Todo esfuerzo tiene recompensa.

Para celebrar mi logro mi mamá me regaló un vestido hermoso y me llevo a un restaurante muy lujoso.

Me senté, mi madre salió para tomar una llamada.

Empecé a ver para todos lados y en una mesa un poco alejada estaba Yair besando a su novia que parece una modelo famosa.

Me sentí un poco triste pero da igual siempre supe que el nunca se iba a fijar en mi.

Mi mamá regreso con dos hombres, un chico de unos 18 y un señor de más o menos 39 años.

El señor me escanea con la mirada y dice:

Eres idéntica a mi madre.

-- ¿Su madre? mamá ¿quien es este señor?.

Ernesto: soy Ernesto Alcocer, tu padre.

-- No se equivoque, usted solo es el donante de esperma no mi padre.

Ernesto: veo que sacó tu carácter _ dice mientras observa a mi mamá.

Eber: mi hermana es muy linda.

-- ¿Hermana?.

Eber: Hola, soy Eber Alcocer tu medio hermano _ me abraza. - No sabes cuántas ganas tenía de conocer a mi hermanita.

-- ¿Tu hermanita?.

Eber: tengo 19 años y tú 17 así que eres mi hermanita.

Eso quiere decir que este señor ya tenía un hijo con otra cuando enamoró a mi mamá.

Mamá: hija tu padre y yo vamos a casarnos.

¿Que? ¿se va a casar con el idiota que le pidió me abortara?. Mi madre se veía tan feliz que no dije nada.

Después de ese día mi vida cambio, nos mudamos a España, Aprendí a hablar inglés, francés, alemán y chino.

Estudie administración de empresas, mamá se casó con Ernesto y el me dió su apellido, me encariñé mucho con Eber, el es un gran hermano, me trata muy bien lo quiero demasiado.

La relación con mi padre no era la mejor pero poco a poco iba mejorando y nunca peleamos por nada.

...Fin del Flashback....

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