capítulo 7.

Me despedí de todos cordialmente, y salí antes de que se les ocurriera invitarme a comer.

Me cae tan mal que todos los empresarios que conozco terminen una reunión con esa frase.

Caminaba por el pasillo cuando me tope con ...

Estéfano: si ya terminaste ¿podemos ir a comer?.

Justo lo que les decía hace un momento.

--Lo siento señor Ocampo pero yo no como, hago la dieta de solo desayuno y agua.

Estéfano: desayunemos mañana.

-- Desayuno a las 7 de la mañana.

Estéfano: te veo en tu casa a esa hora. _ salió sin recibir mi respuesta.

Pero que sujeto tan persistente, solo espero que después del desayuno desaparezca de mi vida y olvide de la estúpida idea de casarse conmigo.

7 de la mañana del día siguiente.

La verdad no desayuno a esa hora, incluso pensé que no llegaría.

Hasta que María fue por mi al gimnasio y me avisó que "mi cita" estaba aquí.

¿Mi cita?, esto no es una cita.

Llegué al comedor, Estéfano me miró sorprendido, supongo que es porque traigo puesta ropa deportiva, estoy sudada y sin maquillaje.

Estéfano: Buenos días Natalia tan hermosa como siempre.

¿Me pregunto si seguirá pensando lo mismo después de verme comer?.

No respondí nada, me senté y le pedí a María que sirviera el desayuno.

Devoré todo lo que ella puso en mi plato, incluso me serví más.

Todo era parte de mi plan para alejarlo de mi, un hombre como el está acostumbrado a ver a las chicas con lindos vestido, maquillaje bien perfumadas y a la hora de comer solo sea fruta y ensalada.

Yo le pedí a María que preparara pizza, pechuga empanizada, arroz, café, jugo de naranja y un poco de fruta.

Comí todo eso delante de él con la intención de desagradar.

Mi plan no puede fallar.

...Narra Estéfano....

Es la primera vez que una chica me deja plantado.

Fui a buscarla para pedirle una explicación, primero no me quiso recibir, cuando entre a su oficina no se tomó la molestia de despegar sus ojos de los papeles que estaba revisando y sin culpa alguna dijo que mis flores terminaron en la basura.

Eso me molestó mucho, y más aún cuando dijo que si era todo saliera.

No me gusta la forma en que me trata, ninguna mujer por muy buena que sea la familia de dónde proviene puede tratarme de esa manera.

No me rendí fácilmente, y al final conseguí que desayunara conmigo.

Fue una experiencia totalmente nueva, nunca había tenido una cita a las 7 de la mañana, tampoco he compartido la mesa con una mujer llena de sudor, sin maquillaje y que come como ella lo hizo.

Normalmente si llego a casa de una chica sin avisar y visten de esa manera salen corriendo a bañarse y arreglarse.

Pero Natalia se quedo tal cual estaba importando poco su apariencia.

No me desagrado, me gusta que sea segura de si misma y no le importe verse impecable delante de mi.

Después del desayuno me acompaño a la salida.

...— ¿Dónde debería ser nuestra próxima cita?....

— No habrá próxima cita, hasta luego. — Me cerró la puerta en la cara. Eso me causó gracia. No me rechazan muy seguido. Es bueno cambiar la rutina.

Salí de ahí directo a mi oficina, llevaba casi dos horas trabajando y no avanzaba con mis pendientes. Así que decidí visitar a la chica que ocupa mis pensamientos.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***