Me repugnas

La fiesta avanzo, aunque la pareja no se encontraba en el salón, los invitados ajenos a lo que sucedida en el piso superior comenzó a reunirse en el centro para bailar.

A un costado, sentadas en unas delicadas sillas, Débora y su hija Sara estaban observando los potenciales esposos para la más joven,

- ¿Qué dices de Luca Bernard? - Débora elevó la copa y disfruto de la bebida espumante que corría suavemente por su garganta.

-No, fue mi compañero en la prepa creo que sus gustos se dirigen en otra dirección- Ambas ríen y siguen buscando quien podría ser la victima con la billetera más apta para asegurar la vida cómoda de la morena

-Tal vez Dorian Brenan, es atractivo, su familia es dueña de la cadena de hoteles más prestigiosa del país y por lo que note no ha dejado de mirarte cariño- Débora sonrió en dirección del rubio y elevó su copa, Dorian imito el gesto con guiño pícaro

-Podría ser, pero lo hare más adelante, él tiene fama de mujeriego- afirmo la morena, mordió su labio seductoramente y observando al empresario hotelero.

-Shara debes aprovechar tu belleza, deja de ser tan quisquillosa, solo mantenlo feliz y el dinero será tuyo, que te puede importar que tenga una aquí o allá, mientras tú seas duela de todo-

-Mamá, no acepto r la esposa devota a quien su marido le pones los cuernos con cuanta zorra pasa.- Shara bebió de la copa molesta, si debía rebajarse y acostarse con un hombre por dinero lo menos que podía hacer este es respetarla.

-Como sabes que es cierto, tal vez solo hablan de envidian. - afirmó Débora buscando entre la gente a Ronald que se había perdido por varios minutos.

-Me lo dijo Bruno, y sabes que él tiene información de primera- Rio

-Ni que lo digas ¿aun sigue molesto?

-Por supuesto, sigue reclamando por no dejarlo ser el quien durmiera con mi hermanita- rio recordando su gran hazaña-. Pero que iba a saber que lo iban a golpear y robarle la oportunidad de su vida- se encogió de hombros y bebió.

Débora suspiro y no le dio importancia a lo que Shara dijo, ella recordaba esa historia y estaba más que orgullosa de su niña, lo único que maldecía era que su esposo a pesar de todos sus esfuerzos seguía teniéndola cerca- ¿Dónde estará tu padre? Miro curiosa

-Vamos mamá, déjalo respirar- bufo molesta

-Nunca, ese hombre es mio, y no tienes idea lo que tuve que hacer para tenerlo- sin más abandono a Shara a su suerte y camino entre la gente en busaca de Ronald.

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-Detente- Joshua bajo la escalera a gran velocidad siguiendo Fénix, pero esta parecía no tener intención detenerse

-Dije que te detengas o tendré que hablar con tu padre para que me explique porque mi futura esposa estaba a solas con un hombre.

fénix clavo sus pies en el último escalón y Joshua sonrió triunfal

Dios porque a mí, aguanta, solo debes tolerar sus idioteces hasta el divorcio-suspiro

-Así me gusta, obediente- enarco sus cejas y acomodo su desordenada ropa.

-¿Qué quiere? Fénix volteo y eso perfectos zafiros se clavaron en el rostro del Ceo parado un escalón arriba

-Puedes tutearme, pronto seremos esposos- la mirada orgullosa recorrió cada centímetro de la pelirroja, bajo el escalón que faltaba para tomar la cintura de pequeña y atraerla con fuerza a su cuerpo. Fenix entreabrió sus labios sorprendida

El contacto provoco un corriente que impacto en el torrente sanguíneo de ambos, y sus corazones comenzaron a golpear con fuerza

Joshua dirigió sus ojos a los labios perfectos y entreabiertos de la bella mujer en sus brazos e inocentemente mordió la cara interna de su boca.

Carajo es preciosa

-Lo que vistes en el despacho…

-No vi nada, irrumpió Fénix-

Joshua abrió los ojos sorprendido, cuando ella posiciono sus manos en el fuerte pecho y lo empujo para alejarse

-Sé que lo viste- sonrió pícaro- pero no estoy aquí para justificarme, tú no eres la mujer con quien deseo estar, por lo que no pretendas que te sea fiel, es más no generas absolutamente nada en mí. Me equivoco. Tomo la barbilla de ella y se acercó – me produces rechazo.

Las palabras salieron frías y con tanta sed dañar a Fénix trago saliva, y sus ojos se cristalizaron

-Solo aguanta, solo aguanta- se recordó mentalmente, el nudo en su estómago genero un profundo dolor, no esperaba ser amada por aquel hombre, quizás que no la viera como lo hacían las personas que deberían amarla, tal vez era mucho pedir, quién era para exigir más, si hasta su padre la vendió.

-No te preocupes, no espero nada de ti- desvió la mirada y una de sus manos acomodo el cabello que caí rebelde sobre su rostro, detrás de la oreja

-Joshua rio irónico – no me preocupo, repito, tu no me interesas, solo quiero que tengas claro, que si te afecta puedes pedir el divorcio o renunciar a este matrimonio me tiene sin cuidado-

Observo el rostro de Lizet cuando giro para verlo.

Los ojos grises se entrecerrando

Acaso la lastime, no, no seas estúpido, solo quiere el dinero.

Fénix respiro y solo asintió. Quiso alejarse, pero Joshua se lo impidió

-Iras a quejarte con mi abuelo, tan fácil te resignas- rio divertido

No llores …carajo porque me importa – maldijo cada pensamiento al verla con los ojos cristalinos.

-No- hablo orgullosa evitando derramar una lagrima, aunque lo único que deseaba era eso-  solo lloro por las cosas que me importan, tengo claro que solo le genero odio o tal vez le repugna mi presencia- volvió a respirar profundo, no quería seguir mostrando aquella debilidad que la cubrió esos últimos años-

Usted- lo vio a los ojos – no es el primero que siente eso, bienvenido a la lista, permiso- Sin más camino al salón, bajo la mirada desconcertada del empresario

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Thomas bebía, y sus ojos de águilas buscaban a Joshua, recorrió el salón y sonrió al ver la delicada figura de Fénix entrando al lugar.

Le hizo un gesto y este camino a él con una tímida sonrisa, él la vio preocupado, el semblante de aquella joven mujer no era la mismo.

-Señor Thomas, su casa es bella, me tome el atrevimiento de recorrerla- Fénix mostro una falsa sonrisa

-Es un placer que te guste, puedes venir a visitarme y disfrutar del jardín con un buen te- Thomas sonrió amable, esa joven le recodaba al que fue el amor de su vida.

-Me encantaría- la joven observó el lugar tratando de localizar a su padre para irse, esa noche fue suficientemente intensa para seguir allí, pero el destino le tenía otros planes.

-Mi nieto, ¿estaba contigo? - pregunto curioso aun sabiendo parte de lo sucedido.

-Bueno él… Fénix se puso nerviosa al instante que podía decir.

-Abuelo- Joshua interrumpió pegándose a Fénix que se alejó unos pasos generando molestia en el joven empresario.

-¿Josh dónde estabas?- la voz demandante del mayor helo los huesos del mas joven.

Él tenso su rostro y abrió la boca

-Estaba conmigo, me mostró la casa – Fénix desvió al mirada después de mentir , se sentía mal con aquel hombre tan amable, pero su hijo estaba primero y si eso significaba excusar al hombre que solo tenía palabras horribles para ella, lo haría sin dudar

- Si fuimos a la terraza- la miro galante elevo su ceja izquierda.

Fénix sintió su estómago retorcerse, ese hombre era hermoso, pero cada que abría la boca solo podía provocarle nauseas.

-Eso es bueno ahora vayan, deben bailar los invitados deben ver que están felices

-Como si fuera posible murmuro Joshua sin que lo oyera su abuelo, pero fénix sintió el golpe directo en sus oídos y solo negó impotente

-Vamos princesa, mostremos nuestro amor. Sus palabras irónicas generaron las crecientes ganas de Fénix de mandarlo al demonio, pero reprimió cada una de esas emociones y tomo la mano del empresario para dirigirse a la medio

-Thomas siguió a la pareja y luego frunció sus cejas al ver a Taylor salir acomodando el vestido, de un gesto logro que Patrick en segundo estuviera a su lado

-Quiero para mañana el contrato de esa mujer con la empresa, y asegúrate de mandarla lejos hasta que este termine,

-Señor el contrato finaliza este año, pero tiene varias campañas aquí- confirmo Patrick mientras sigue con la mirada a la rubia que va en busca de un trago

-Solo asegúrate que este lo más ocupada posible, la quiero lejos de Josh

-Como usted diga señor-Luego se retiro

Mientras esto ocurría, Joshua tomo de la pequeña cintura y la acerco a su pecho , su otra mano aseguro la pequeña de ella y comenzó a bailar lentamente  provocando la mirada de todos los invitados-

-Debes estar feliz, no- sus ojos se clavaron en aquella mujer que evitaba hacer contacto visual

-Feliz-  la observó detenidamente balanceándose - aprendí dolorosamente que la felicidad está sobrevalorada Señor Anderson

-Joshua tenso el rostro – me va a decir que esto no es lo que quería, dinero, poder, salvar su empresa, -curvos su labio y la vio desafiante-vamos, o va a decir que le gusto – se acero al oído- acaso ya se enamoró de mi- rio por lo alto

Fénix elevó su rostro quedando a pocos centímetros de él, Joshua trago saliva cuando su mirada se posó en aquellos labios como lo hizo desde que la vio- Tranquilo señor Anderson, mis gustos difieren mucho de lo que usted pueda ofrecerme.

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