La espera se hizo larga, pero cuando ya estaba enloqueciendo, vio a la joven Diana salir de él ascensor para luego dirigirse a recepción.
- *Señorita, lamento los altercados, prometo que no volverá a suceder solo..
- No se preocupe señorita Diana, su prometido nos ha pedido que la coloquemos como visita de él paciente Evans*.- La interrumpio la mujer dejándola sorprendida. ¿Él dijo que ella era su prometida*?* - Puede visitar a el señor las veces que desee. - *Esta solo asintió agradecido y muy pensativa camino a la salida de el lugar*.
Antes de poner si quiera un pie fuera, Sam la rebasó diciéndole que lo siguiera, cosa que ella hizo sin rechistar.
Al llegar a el estacionamiento de él hospital, pudo apreciar un hermoso Mercedes negro al cual Sam se dirigió.
- Anda, sube.- ordenó mientras abría la puerta de él acompañante y ella asentía subiendo al vehículo.
Luego de salir de aquel lugar, Sam se interrogó una y otra ves si era verdaderamente necesario preguntarle lo que rondaba por su cabeza y aunque quisiera negarlo, el asunto le daba bastante curiosidad.
-Dime algo.- habló rompiendo el silencio y llamando la atención de la joven.- ¿*Porque es que tomas el bus? he estado revisando los pagos del mes y el tuyo es más de lo que cualquiera de los otros empleados gana.
- No creo que el dinero sea la solución a todo*.- respondió ella suspirando mientras veía en dirección a la ventanilla.- *Tu puedes verlo, mi padrino no ha mejorado ni un poco pese a que ha pagado a los mejores médicos para que lo atendieran.
- Tienes razón en eso, pero creo que cobras lo suficiente para comprarte un carro y dejar de viajar en bus*. - respondió él y ella sonrió.
- ¿Para que quisiera comprarme un carro si no se conducirlo? - preguntó sorprendiendo a Sam.- Solo se llenaría de polvo y sería una pena.- Añadió. - *Aparte de eso, creo que no es tan malo viajar en bus, puedes apreciar la vista de la ciudad tranquilamente.
- Pues me temo que eso debe de terminar*.- habló Sam con seriedad.- *Si no sabes conducir puedo enseñarte o si lo prefieres podría contratarte un chófer para que te lleve a donde quiera, pero ir en bus no es algo que haría la esposa de un empresario.
- ¿Porque no*? - preguntó ella volteandose a verlo.- *En mi pensar la humildad lo es todo, no debes de creerte más que los demás solo por tener una porción más grande, pues él destino siempre está presto para cambiar nuestras vidas.
- Bien, quizás tengas razón en eso también pero aun así haremos las cosas a mi forma.
- Dijiste que cada quien haría su vida por separado, no sirve de nada que intervengas en la mía*.- respondió ella obteniendo un fuerte bufido por parte de él.
- Dije que cada quien viviría como si no conociera al otro, pero solo lo haríamos cuando estemos solos, no cuando todos puedan vernos, eso incluye rus viajes en bus.- respondió.- ¿*Acaso crees que las personas no pensaran en el porqué la mujer de él empresario Evans viaja en bus cuando que el anda en un Mercedes último modelo?
- Tal ves si, pero jamás me importo lo que los demás dijeran de mi*.- respondió ella ganándose una corta mirada por parte de él. - *Si fuera ese el caso debería de estar con terapia o casi al borde borde suicidio.
- Tan mal han hablado de ti*? - preguntó con sarcasmo.- *Ni que fueras tan importante como para creer que todos hablen a tus espaldas.
- El problema es que jamás lo hablaron a mis espaldas, siempre me lo dijeron en la cara*.- respondió ella volviendo su mirada a la ventanilla.- Desde que tenía 8 años, mi padrino se hizo responsable de mi al perder a mis padres. Pero eso no es suficiente como para creer de que sólo estoy a su lado para ayudarlo y devolverle el favor, todos creen que voy detrás de su dinero o que mantengo una aventura con él para obtener el control total de su empresa. -*respondió provocando que Sam apretara con fuerza el bolante. *Una cosa era que el creyera que ella estaba detrás de el dinero, otra era permitir a alguien decir que su futura esposa mantenía una aventura con su padre, quien pese a todo, siempre fue un hombre recto*.* - *En fin, por ello creo que no es importante lo que los demás piensen, basta con saber quien eres y que es lo que deseas.
- Esta bien, tu punto de vista es bueno pero aun así.. o aprendes a conducir o te contratare un chófer*.- finalizó dejándo totalmente rendida a Diana.
- Será como tu quieras. - respondió ella y el asintió.
Al llegar a la casa en la que ambos vivían, Diana se dirigió a su escritorio mientras que Sam iba por un baño.
Las horas iban pasando y ninguno se hablaba o decía algo. Estaban a corta distancia pero para ellos, el otro no existía allí dentro.
El sonido del móvil distrajo a Sam de su trabajo y rápidamente lo tomó para revisarlo.
- Diana, ve a cambiarte.- habló mientras tecleaba en su móvil y ella volteaba a verlo.
- ¿*Precisamente para que?
- Cenaremos con mi madre en una hora y realmente espero que puedas lucir bien*.- respondió viéndola con firmeza.
Ella solo asintió para luego subir las escaleras y dirigirse a su habitación. Si él creía que era una mujer desaliñada que jamás tomó importancia a su imagen, pues se estaba equivocando.
Mientras ella se preparaba en su habitación, Sam decidió de cambiar su atuendo por algo más elegante, pues era un hombre que apreciaba más una cena cuando vestía con elegancia y finidad.
Al mirarse en el espejo luego de probarse varios trajes, sonrió satisfecho para luego salir y esperar a su prometida en la sala, siendo totalmente sorprendido al verla allí a la espera de su presencia.
- Estoy lista.- dijo poniéndose de pie y sorprendiendo a Sam, quien hasta el momento solo la había visto vestida de forma informal. Sus ojos se paseaban por todo el cuerpo de la mujer y admiraba la forma que aquel atuendo hacia lucir a su figura. *carraspeo su garganta.*
- Andando.- respondió para luego salir de la casa y dejar que Diana se ocupara de cerrar todo.
Una ves comenzaron el recorrido, Sam trató de mantenerse lo más tranquilo posible, pues su prometida logró dejarlo con la boca abierta con sólo un atuendo diferente al que usaba diariamente.
- Yo.. debo de admitir que sobrepasaste mis expectativas.- dijo rompiendo con el silencio.
- ¿De que hablas?
- Luces bien.- Añadió viendo como ella formaba una O con sus labios y luego asentía sin siquiera emocionarse un poco por el cumplido que acababa de darle. - ¿Solo así? ¿Asentiras sin decir un " Gracias"?
- Lo lamento, mis pensamientos están en otro lugar.- respondió ella.- Gracias por el cumplido.
- ¿En que estas pensando? - preguntó tratando de entablar una conversación, pues su futura esposa no era una persona a la que le gustará hablar mucho.
- Los exs socios de mi padrino enviaron una solicitud de reincorporación y.. no se con exactitud lo que él les respondería.- comentó dejando pensativo a Sam.
- En primera, no es momento de estar pensando en el trabajo, necesitas un poco de tiempo para ti.- respondió él.
- ¿Timpo como para que? - preguntó ella.
- Pues.. para hacer algo que te guste o.. no lo se. - respondió él. - Hacer esas cosas que les gusta a las mujeres, salir de compras, derrochar dinero o pasear por cualquier lugar turístico de la ciudad.
- Hago lo que me gusta, amo mi empleo y..
- Por favor.- la interrumpió. - Estudiaste eso a causa de que mi padre te lo pido, pero si vamos al caso.. creo que tus planes de seguro eran otros.
- No realmente.- Respondió.- Mi padrino solo me dio una sugerencia cuando le pregunte que podría estudiar. Él me dijo que debería de ser algo que a mi me guste, pero que si no tenía nada en mente.. la carrera de contaduria o administración de empresa era algo que el escogería sin dudar.
- ¿ Y porque lo escogiste? solo te dio una opinión.
- Por que me pareció algo interesante. - respondió. - No quería estarme un año entero para decidirme que estudiar, solo quería algo rápido para poder trabajar y pues.. mi padrino me ha ayudado mucho para para Pudiera obtener mi titulo antes de tiempo, con solo 25 años ya tengo ambos títulos y todo se lo debo a él. - finalizó y él asintió sin más.- Pero.. su tuviera que elegir hacer algo a demás de mi trabajo, eso seria pasar más tiempo con mi padrino.
- Ya veo.- añadió él y volvieron a quedar en silencio, algo que resultaba incómodo para Sam.- Creo que si mi padre tuviera que tomar una decisión con respecto a el asunto de sus exs socios.. optaría por decirles que no perdieran su tiempo, pues su oportunidad ya ha pasado.
- ¿Tu crees? - preguntó ella viendo por primera ves la hermosa sonrisa de Sam.
- No lo creo, estoy totalmente seguro de ello.- respondió con orgullo obteniendo el asentamiento de ella.
*Quizás no podamos ser un matrimonio como cualquiera, pero si podemos llevarnos bien como buenos amigos.*
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 63 Episodes
Comments
Rosario Zapata
😒😒😒😒 que comentario tan fastidioso
2024-08-16
1
Mahomé Campos
otra vez*
vez= ocasión
ves= ver, mirar u observar con detenimiento.
2024-04-10
1
Claudia Andrea Nievas Roa
mmm...me resulta interesante hasta ahora
2024-03-30
0