cap: 11 lo siento.

Miguel logró cerrar el trato con los españoles, eso le trajo gran ingreso a la organización, pensó que maneras persuadir a su padre, pero él estaba firme en su condición, era eso u olvidarse de ser el líder de la mafia, de los 4 hijos de David, miguel fue el único interesado en el negocio, David sabía del gran potencial que tenía su hijo para manejar los negocios, pero por alguna razón oculta él quería alejar a esa mujer de su hijo.

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MIGUEL.

Llevo cerca de un mes sin poder dormir, mi padre sigue firme en su decisión, no quiero hacer las cosas apresuradamente, no quiero lastimar a Emilia, y mucho a camelia que ha estado a mi lado a pesar de todo. Mientras tomaba una decisión, me aleje de Emilia, no quería seguir alimentando sus esperanzas.

Después de tanto reflexionar, tome la decisión, de hacer caso a mi padre, puedo por lo menos hasta que me dé poder ya después de eso, dejaré a Emilia, pero y me pueda perdonar. La Aprecio mucho, pero no tengo otra opción. Ahora tengo que hablar con camelia espero y entienda.

(Al teléfono)

_ princesa, donde te encuentras.

_ hola lindo, estoy por salir de clase.

_ puedes llevar al apartamento.

_ claro salgo para allá.

_ te espero.

Estaba ansioso de lo difícil que ser camelia, pero esto lo hago por nosotros también. Ella no tardó en llegar.

_ Hola amor. Para qué me necesitabas.

_ linda necesito hablar algo importante.

_ están graves, estás pálido.

_ amor, quiero que tomes todo con calma. Quiero que sepa que te amo, y que todo lo hago por los dos.

_ miguel me estás asustando.

_ mi padre se niega a entregarme el poder.

, pero si cumpliste con el acuerdo.

Ahora tiene otra condición.

_ cuál.

_ debo comprometerme con Emilia.

_ primero la mato.

_ que estás diciendo, estás loca, Emilia es la más inocente en todo esto.

_ entonces estás de acuerdo.

La tomé por los hombros, necesita que me escuchara.

_ amor por favor escúchame, confía en mí. Te prometo que apenas mi padre me entregue el poder la dejaré.

_ Nota creo. Me dejarás lo sé.

_ eso nunca, eres mi vida. Esto lo hago por nosotros.

_ tengo miedo miguel, miedo a perderte.

_ amor nosotros seguiremos como si nada, prometo, nunca tocar a Emilia. Nos veremos todos los días, te aré el amor todas las noches, por favor confía en mí.

_ confiaré en ti.

*****

Después de esa discusión tan acalorada, miguel le hizo el amor a su amada, tenía planeado esa misma noche salir a una cita a Emilia y pedirle que fuera su novia, no se sentía muy bien con el asunto, pero era la única opción, no sería por unos pocos meses, que podía salir mal.

Emilia ya sabía una perfección como manejar las empresas a la familia, para ella era tan fácil, aunque al principio el miedo le ganaba, ahora tenía el conocimiento y la seguridad, para hacerlo por si sola.

EMILIA.

Tenía un mes sin ver a miguel, solamente conversábamos por teléfono cuando nos quedaba algo de tiempo. Ahora que mi hermano me ha entregado el poder para manejar la sucursal de Rusia, mi tiempo es limitado.

Eran cerca de las 5 de la tarde cuando recibí la llamada de miguel, invitándome a cenar, me emocioné

tanto, tenía que lucir espectacular. Busque rápidamente en mi armario algo hermoso, él pasaría por mí a las 7, tenía que hacerlo bien pero rápido. Busque un lindo vestido rojo, pegado a mi cuerpo, que llegaba un poco de bajo de las rodillas. El maquillaje era ligero, pero lindo quería verme linda pero natural a la vez. Al terminar me vi al espejo.

Un recuerdo fugaz llegó a mi cabeza. Era yo con un vestido rojo, sentada en una mesa cenando a la luz de las velas. El rostro del hombre, no era muy claro.

(recuerdo)

_ estas nerviosas linda.

_ un poco.

_ si quieres podemos dejarlo para cuando te sientas lista.

_ amor este es el momento indicado y como lo había soñado.

_ entonces déjate llevar.

Por su rostro bajo una lágrima, se sorprendió, pero la limpié con rapidez. Tenía que dejar mi pasado atrás para poder centrarme en mi futuro, lo único que quiero de mi pasado es atrapar al culpable de la muerte de mi padre.

Sacudí mi cabeza, para sacar esos pensamientos. Mi madre tocó la puerta.

_ pase.

_ Hola princesa, pero mira que linda estas.

_ te parece madre.

_ si mi niña, estas preciosas, de seguro miguel quedara encantado.

_ eso espero mami, estoy tan nerviosa.

_ relájate y date prisa, él llegó y te está esperando abajo.

_ ok deséame suerte.

_ no es necesario mi princesa, sé que te irá muy bien.

Me despedí de mi madre, bajé, sentía que mis piernas temblaban, era como un déjà vu, miguel lucía un lindo traje gris, no llevaba corbata su camisa negra estaba un poco abierta dejando apreciar un poco su sexi pecho.

_ buenas noches, miguel.

_ buenas noches, princesa estás hermosa.

_ gracias, tú también estás muy guapo, como siempre.

_ gracias, podemos irnos.

_ claro vamos.

Me subí a su coche, claro siendo seguido por los hombres de mi abuelo. Llegamos a un lujoso restaurante. Él, tenía reservada una mesa alejada, un poco del público, cenaríamos a la luz de las velas.

MIGUEL.

Después hacer el amor casi toda la tarde con camelia, me alisté y fui por Emilia, me sentí culpable por lo que iba a ser, pero ver a Emilia con ese sexi vestido rojo, me hizo olvidar por un momento, el motivo por el que lo hacía, no hay duda alguna que Emilia es una mujer hermosa, su cuerpo es algo con lo que cualquier hombre soñaría, la aprecio detalladamente mientras baja la escalera, empecé sentí un poco de incomodidad en mi pantalón, siempre evité ver a Emilia como mujer, pero hoy era imposible, deseaba tanto besar esos lindos labios.

La llevé a un exclusivo restaurante, me sentí molesto al ver que todo hombre en ese lugar, la devoraban con la mirada, por suerte pedí la mesa a alejada. Deseaba disfrutar de ese momento con ella.

_ te gusta el sitio.

_ si me encanta. Es muy romántico.

_ esa es la idea, quiero que disfrutes de este momento, porque espero que vengan muchos más.

_ yo estaría encantada.

_ Emilia quiero pedirte formalmente que salgas conmigo.

¿_ Quieres que sea tu novia?

_ si eso es exactamente lo que quiero.

_ estás seguro de eso, miguel, no quiero que tomes una decisión apresurada por mi tío David.

_ no es así Emilia, estoy seguro de lo que estoy haciendo.

_ pues ya que estás seguro, acepto ser tu novia.

En ese momento me deje llevar, me acerque a ella y robe sus labios, fue un beso suave, sus labios, eran tan dulces que no quería soltarlos. Sentí una erección así que decidí, alejarme.

_ me alegra que hallas aceptado.

_ yo también estoy feliz.

_ preciosa si no te molesta iré un momento al baño.

_ ve tranquilo.

Me levanté y fui rábido, sentí que mi pene dolía, llegué al baño, pero al entrar fui sorprendido por camelia.

_ camelia, que haces aquí.

_ parece que no estás nada feliz de verme, interrumpo algo.

 _ tú sabes perfectamente a que vine.

_ si eso pude ver, se nota que no estás disfrutando nada la cena, aunque tu pantalón dice lo contrario.

Por Dios había olvidado, a que iba al baño. Camelia se veía superenojada, no se me ocurrió más nada para calmar su furia, que tomar, la subí al lavamanos y penetrarla de una sola estocada, era la primera vez que le hacía el amor pensando en otra mujer.

Deseaba tanto estar dentro de Emilia, que no dure nada en venirme.

_ princesa espérame en el apartamento te prometo no demorar.

_ te estaré esperando.

Contesto ella mientras se acomodaba el vestido.

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