"... no dormí en toda la noche".

Natalia todavía sin poder dormir en toda la noche y no fue el hombre misterioso quien le robo el sueño, sino Emanuel.

Por la mañana salió para la cocina tenía un poco de sed ya cosiente de que podía toparce con Emanuel, rezo para que no estuviera en la cocina, camino muy despacio inspeccionando la cocina y había alguien ahí, se podía ver una espalda, era Fernando aliviada entro a la cocina.

—Buenos días —saludo de inmediato, Fernando se volteo a ella.

—Como amaneciste—respondió

—Buenos días —se escucho una tercera voz.

Natalia busco de donde venía, Emanuel estaba apoyado junto a una ventana con una taza de café, leia el periódico y la miraba muy seguro de si mismo, Natalia se paralizó con los ojos muy grandes.

—Buenos días —volio a decir Natalia.

Fernando le alcanzo una taza de café, lo recibió tropezando en un taburete de la isla de la cocina, casi tirando el café, una enorme gota de sudor resbalaba de su cabeza.

—Todo bien?—.Pregunto Fernando.

—si...

Repondio Natalia sentandoce en el taburete que la hizo tropezar, al hacerlo se hizo una cortina de cabello en su cara tapando de su vista a Emanuel que fue un gran alivio para ella.

—Ya me voy a trabajar —dijo Fernando le dio un beso en la cabeza a Natalia.

—Hasta luego papá.

Lo despidió y Fernando se fue.

Un ambiente muy incomodo rondeaba en la cocina por unos minutos, hasta que Emanuel se movió se sento frente a Natalia.

—¿Como estuvo la fiesta de ayer?—.Le preguntó apoyando los codos en la isla.

—Que?—.Respondio Natalia.

—Aquí dice que fue una fiesta inolvidable.

Le empujo el periódico, en la portada estaba una fotografía de ella bailando con aquel hombre misterioso, ahí fue que se acordó de él.

—Es cierto, fue inolvidable.

Respondió al ver la fotografía recordando aquella velada. Olvido por un segundo que Emanuel estaba ahí.

—"Inolvidable".

Repitió pensativo y se rio de una forma burlona, se levanto camino a la puerta de la cocina y hablo otra vez también con un tono burlon.

—Por cierto ayer estuviste llorando? Cuando llegue.

Natalia se volteo a él, que parecía que no lo esperaba ya que la miro asombrado.

—Lo hiciste a propósito? —.Le contesto fuerte Natalia.

—Que? Por supuesto que no —aseguró.

—Entonces no te burles nos asustamos mucho —le reprocho.

—Para mi fue un poco comico.

Respondio altanero dándose la vuelta saliendo de la cocina.

—No es divertido preocupar a las personas —le grito de ahí sentada, muy molesta.

Emma bajaba a la cocina y vio a Emanuel salir muy sonriente, escucho un poco de lo que Natalia le gritaba.

—Buenos días —le dijo Natalia.

—Querida buenos días —respondió —que paso?.

Le pregunto.

—Parece que Emanuel nos hizo preocupar a propósito anoche —.Le contó un poco enojada.

—Pero que muchacho.

Protesto y tomo asiento frente a Natalia noto el periódico y lo levanto muy rápido, así como lo levanto cambio la exprecion de su rostro y miro a Natalia con recelo.

—Quien es él —le pregunto con un tono seco.

—No lo se —hablo con la verdad.

—No lo se? —.La imito —Natalia por que no quieres decirme quien es.

No le creyo.

—Te digo la verdad no le pregunte —.Le dijo tratando de convencerla, pero Emma no le creía.

—Entiendo que no quieras decirme...

Se victimizo.

—Emma te digo la verda...

—Lo vio?! —.Grito —dime lo vio?!.

—Quien?.

Le pregunto Natalia un poco asustada.

—Quien más, quien más —se desepero, Nataila la miro confundida.

—Emanuel!, Emanuel!.

Se quedaba sin aire.

—Si, él fue quien me lo mostró —dijo sin mirarle Natalia.

—Oh... no mi pobre hijo como estará sufriendo — dijo Emma pero recordó que Emanuel salió con una deslumbrante sonrisa. Se quedo ahí pensativa levantó el periódico lo leyo.

—No se quien es me siento extraña jamas fue mi intención...

Le explicaba Natalia pero Emma leía y releia el periódico.

—"... nadie supo reconocer a aquel hombre"

Leyó Emma en un susurro, salio de la cocina pensativa mientras que Natalia la llamaba.

Muy confundia Natalia termino su café y subió a su habitación se tiro de cara a su cama y pensaba seriamente regresar a su casa dormitaba un poco.

Y la despertó un grito de Emma que sacudió la casa, salio corriendo.

—Emma?. La llamo.

—Estoy bien.

Respondio de algun lugar de la casa, Natalia pensó que le hablo desde su dormitorio.

—Podemos hablar?.

—Ahora no es buen momento querida —.Le contesto.

Natalia se quedo con ansias, regreso a su cuarto y se durmió.

***

—Natalia despierta.

Ahí estaba Emma que le daba suaves sacudondes para despertarla.

—No puedes dormir todo el día te vas a enfermar.

Natalia se levantó se froto la cara quitándose el sueño.

—Emma tengo que decirte algo —le dijo medio dormida.

—He?.

La miró confundia.

—Escucha... Emma creo que debería regresar.

—Que?, no sabes lo que dices creo que sigues dormida ve a bañarte —.Se fue.

Natalia obedeció y salio a la terraza que daba al mar, vio a Emma con Emanuel caminando en la playa y desde ahí Emma le saludo con la mano. Bajo a la cocina y en la mesa del comedor habían papeles y fotografías esparcidas.

—"Lista de invitados".

Natalia los reviso esparciendo más los papeles "...que es esto?", se preguntaba muy extrañada entonces se escucho que Emma y Emanuel entraban a la casa.

—Que es eso...

Le hablo desde la cocina, Emma corrió donde ella y rápidamente intento ordenar y ocultar lo que había en la mesa.

—Nada nada... solo unos papeles que tengo que ordenar.

Dijo muy nerviosa Emanuel llego después miro asombrado a su madre y no le tomo importancia a lo que había en la mesa.

—Mamá me voy a la pasantia, volveré tarde no me esperes.

Alzando su mochila de la isla de la cocina, miro a Natalia a los ojos por un rato era tan guapo e intimidante que Natalia se ruborizaba.

—Esta bien que te vaya muy bien.

Le hablo Emma desde el comedor salvando a Natalia ya que al oirla Emanuel rompió el contacto visual y se fue.

—Se fue? —.Pregunto Emma después de unos segundos.

—Ah, creo que si —respondio Natalia

recuperándose de los nervios.

—Lo estuve buscando —le contó Emma mientras revolvía los papeles en la mesa —pero no encuntro nada, nadie lo reconoció, busque la lista de invitados.

Término de hablar pensativa.

—Nada? —. Se asusto Natalia —Entonces era un fantasma?.

—No seas tonta.

Se burlo pero Natalia creía en esas cosas y palidecio.

—Emma debió ser un fantasma porque lo que me paso con él —trago saliva —no era normal.

—Hablas enserio? —.La miro muy interesada —que paso fuera de lo normal?.

Natalia completamente palida.

—Todo, todo jamas me había pasado algo así —le temblanba la voz, Emma le hizo sentar.

—Puedes ser más especifica?—.La presionó.

—Todo, Emma todo él, sus manos, su olor, ¡Dios!, su voz —entró un poco en pánico y se tapo la boca — Emma bese un fantasma.

Natalia estaba asustada y Emma ya no podía aguantarse la risa.

—Emma no es gracioso—.Se enojo Natalia.

—Ok, pero ¿como puedes crees en esas cosas?.

Dijo esforzándose para relajar su rostro.

—Pero es posible...

—Claro que no, tranquilízate —.Le dijo Emma.

—Ok —Suspiro.

—Si no fue un fantasma entonces quién era...

—Bueno ay dos posibles—.Dijo rapido Emma.

—Por qué no lo dijiste primero.

—No estoy segura, no puedo probar si es él por eso tendrías que verlos para reconocerlo. Dijo buscando en las fotografías.

El corazón de Natalia enloquecía con un retorcimiento en el estomago se empezaba a agitar, trago saliva y dijo.

—Entonces cuales son —hablo tratando de controlar sus ansias.

Emma tenía las fotografías en las manos pegadas en el pecho.

—Estas lista?.

—Si.

Dijo rapido y le quito las fotografías a uno lo descarto de inmediato, ya que tenía la barbilla partida, pero eso no quería decir que no fuera guapo, el otro tenía un potencial de ser del cincuenta por ciento, era de piel clara ojos grandes todo un galán.

Las dos se quedaron mirando la foto.

—Vamos!! —dijo Emma alzando su cartera.

—A donde —.Pregunto confundida.

—A verlo en persona claro—hablo de lo más normal.

—Enserio?.

Emma era muy alocada aveces asustaba a Natalia. Se fueron a buscarlo.

Cuando lo vieron en persona en la calle lo siguieron como espías, ya muy cerca, pero Natalia se desepciono, no era él, se pudo muy triste y se preguntó con un gran suspiro "donde estas".

—No es él...

—Como que no —dijo Emma susrrando, bajando las gagas de sol hasta la punta de la nariz.

—Primero él era un poco más alto...

—Él es alto —dijo apuntando al hombre que siguieron, susurrando un poco alto.

—No, era más alto —se callo y pensó, se le ilumino y continuó —ya sé, alto así como Emanuel.

Le explico. Emma trago saliva con dificultad y se sereno.

—Oh... entiendo.

—Además sus piernas no son tan largas no están bien... ya sabes fuertes —le convencia aun mirando al hombre.

—Así como de Emanuel? —.Pregunto Emma con picardia.

—Eso! Ya me estas entendiendo.

—Si que bien —respondio esperando algo de Natalia.

—Dios Emma si fue un fantasma —dijo completamente decepcionada dejándose caer apoyada en le pared.

—Uf... Natalia.

Hablo Emma mucho más despecionada.

Cuando estában volviendo a casa en el auto Emma le preguntó.

—Cuanto? quieres encontrarlo.

—Mucho —respondio sin pensarlo —Que?.

Se cuestionó ella misma.

—Cariño lo encontrarás—le dijo frotándole el brazo.

—No se lo que me pasa, no se que haría si lo encontrara, si se despeciona cuando me vea sin el vestido o el antifaz?.

—Eso no será así te lo prometo —algo escondía Emma.

Natalia le miró con mucho amor. Hasta.

—Un segundo Emma por que me ayudas a buscarlo, tu estabas enojada conmigo por ese hombre —la miro muy fijo.

—Aah. No lo mal entiendas.

Respondió Emma muy nerviosa.

—Me estas ocultando algo, lo se dime de una vez. Insisto.

—Cariño lo vas ha encontrar lo tienes que encontrar.

—No estamos hablando de eso.

—Ok ok ok te lo diré.

Quiso contarle la verdad pero no pudo se le quedó trancado en la carganta y se atoro, tuvo que orillar el coche.

—Estas bien?.

Se preocupó Natalia, pero Emma ya estaba mejor.

—Escucha cariño yo te quiero mucho y deverdad quiero que seas feliz por eso te ayudo —le dijo acaricandole la cara.

—Pero, pero Emanuel? —.Pregunto un poco avergonzada sin mírale.

—No te preocupes, él estará bien.

Ya no hablaron el resto del camino mientras Natalia pensaba, "tal vez es mejor dejarlo de lado a Emanuel es muy joven pero ¿por que me duele en solo pensarlo?", se le prendió el foco "¿por que tengo que elegir a uno?" Su corazón se alivio, " en algún momento todo se aclarar no tengo que preocuparme ahora".

Llegaron directo a cenar, comieron y decidieron ver una película, cuando se disponían a ver un teléfono sonó era de Emma, contestó y se fue a la cocina.

Resulta que la madre de Emma se había puesto delicada y pedia verla, en ese mismo momento fue, no le dio detalles solo le dijo que le avise a Emanuel lo de su abuela.

Natalia estaba sola en la lujosa casa de la playa, decidió continuar con los planes y en media película se durmió.

Emanuel llego muy tarde, el televisor estaba encendido y pasaban lo créditos de una pelicula pero no había nadie, camino a donde el televisor buscando con la mirada el control y vio a Natalia durmiendo se quedo petrificado su corazón golpeaba su pecho muy fuerte, se puso frente a ella, le miraba cada centímetro de su delicado rostro, tenía que aprovechar verla ya que con ella despierta era un poco difícil.

Aun así Emanuel no estaba satisfecho, aquellos ojos...

Natalia se movio tal ves despertaría pero solo fue eso, lo que lo llevo a pensar que tal vez no tendría otra oportunidad se acerco y la beso en los labios, un tierno beso que los estremeció.

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