CAPÍTULO CUATRO: MIRADAS EXTRAÑAS.

TÍTULO: MIRADAS EXTRAÑAS.

Zack.

Al terminar de bañarme bajo a la sala, y mis padres ya me estaban esperando.

-- Hijo, apúrate, vamos a llegar tarde -- Dice mi madre, ella adora a Astrid y tiene apuro por qué nos casemos.

Salimos en mi auto, tardamos un poco en llegar, la familia de mi novia vive en lugar humilde, y obviamente queda alejado de nuestra residencia.

Al llegar, le abrí la puerta a mi madre y la ayudé a bajar, caminamos juntos hasta la entrada de la casa, mi padre hizo un gesto de desagrado, a él no le agrada Astrid, pero con tal de que me casé pronto, está dispuesto a aceptarla.

Mi padre fue el mejor líder de la mafia y siempre lo respetaron, él es un hombre sin sentimientos, cruel y despiadado. Cuándo se casó no fue por amor, él compró a mi madre, había un tipo que le debía dinero y cómo no lo tenía le pagó con mi madre, él quería tener varios hijos varones, pero mi madre tuvo un embarazo complicado y después de mí no logró volver a concebir.

-- Hijo llama.-- Mi madre me habla ansiosa, ella está feliz por mí y Astrid, dice que el amor es muy importante en una relación, lo que ella no sabe es qué yo no amo a mi novia, solo la elegí entré muchas por su belleza. Y también por darle gusto a mi padre, pero mi madre es muy ingenua, tanto así que mi padre la engaña en nuestra propia casa y ella ni lo nota.

Espero que Astrid sea igual qué mi madre. Sacudo mis pensamientos y llamó a la puerta, mi padre ya tiene mala cara, no le gusta esperar.

Abre una señora muy agradable, deduzco que es mi futura suegra.

-- Adelante, Astrid enseguida bajará.-- Dice la mujer y nos adentramos a la casa.

Nos acomodamos en la mesa, la comida ya estaba lista y servida, no es a lo que estamos acostumbrados, pero es aceptable. Minutos después aparece mi novia, bella como siempre.

Me levanto y corro la silla, ella se acomoda junto a mí y comenzamos a cenar.

Damos los primeros bocados y se oye la puerta abrirse e ingresa una chica, la observó de pies a cabeza mientras ella abraza a mi suegro, al parecer tenía una cuñada y no sabía.

Esto va a ser interesante y divertido. Ella es muy diferente a Astrid, su vestimenta, su actitud, creo va a ser un gran reto para mí.

-- Ella es Gea, mi hermana menor.

-- Gea, él es Zack, mi novio, y ellos sus padres.-- Dice Astrid y la chica nos saluda.

Ella tomó asiento junto a sus padres y la cena transcurrió en una absoluta tranquilidad. Al terminar la cena salí y fui hasta mi auto,  saqué un champán que había traído.

Suponía que la familia de mi novia no tendría uno.

Volví adentro y mientras caminaba descorche la botella.

-- Hoy es un día muy especial, vengo a pedir la mano de Astrid en matrimonio.--- Dije mirando a mis suegros.

Ellos asintieron felices y Astrid corrió a mis brazos, me dio un beso apasionado y luego brindamos.

-- Amor, has olvidado algo --- Dice la mujer en mis brazos.

-- No, no lo he olvidado.-- Digo con mi mejor sonrisa y sacó un anillo de diamantes del bolsillo de mi saco, se lo colocó en el dedo y le doy un beso en la frente.

Gea.

Después de saludar a mis padres tomé asiento junto a ellos, Astrid me presentó a cuyas personas estaban en nuestra casa. Su novio y sus suegros, yo no sabía qué mi hermana tenía novio, ella nunca me llamaba,  y mucho menos me cuenta sus cosas.

A veces creo que ella no me quiere, no es amigable conmigo, pareciera qué compite todo el tiempo y la verdad no sé por qué, ella es hermosa y a mí ni siquiera me miran.

Tengo 26 años y nunca tuve novio, no di mi primer beso, y mucho menos conozco lo qué son las relaciones sexuales. Lo poco qué sé, es lo qué escuché hablar a mi hermana, ya qué en varias ocasiones escuché sus conversaciones sin querer.

Cuándo terminó la cena el novio de mi hermana salió de la casa y volvió a entrar con una botella de champán, esté la descorcho y pidió la mano de Astrid, mis padres estaban felices y yo también, me gusta ver a mi familia alegre. Ella recibió un anillo hermoso, son una pareja perfecta.

No puedo evitar pensar en el día qué me toqué a mí, mi mayor sueño es casarme de blanco y caminar del brazo de mi padre hacia el altar.

(Dejó de soñar despierta)

Comienzo a levantar la mesa, estoy exhausta por el viaje, pero mi madre ya está un poco mayor y necesita ayuda.

Lleve los platos sucios a la cocina y los estaba lavando cuando de pronto entró al prometido de Astrid.

Este dejo la botella vacía en el cesto de basura y antes de qué volviera a salir, sentí cómo me miraba muy extraño.

---¿Necesita algo?.-- Preguntó en voz baja, no soy de hablar mucho y menos con extraños.

-- No linda, gracias.-- Dijo esté y salió. Termino de limpiar y vuelvo al comedor.

--¿Y cuándo es la fecha del matrimonio? Preguntó mi padre.

-- Dentro de 6 meses, pero en unos días comenzaremos a buscar una casa--- Dijo mi cuñado sonriendo. Yo ya estaba muy cansada, pedí permiso y me fui a descansar.

Entro a mi habitación, ya no aguantaba más el cansancio que traía en encima y mañana temprano tendría qué salir en busca de empleo.

Entré al baño y me quité la ropa, abrí la ducha y me metí debajo del agua.

Zack.

Estamos en el comedor charlando y la hermana de Astrid sé levanta y comienza a limpiar la mesa, luego sé va para la cocina. Tomo la botella vacía y simuló qué solo voy a tirarla al cesto, entró dejó la botella y miró a la chica, al parecer no es bella como su hermana, tiene poca gracia, o quizás sé esconde detrás de esa ropa poco femenina.

Al parecer ella nota mi mirada sobre ella y me pregunta sí necesito algo, le contestó que no, y salgo.

Hay algo en ella qué me causa curiosidad, su timidez, su forma de actuar tan inocente, aún no estoy seguro, pero voy a averiguarlo.

Sacudí mis pensamientos, no creo qué sea una mujer pura, si es más joven que Astrid, pero no creo qué sea inocente al límite de ser una chica con bastante edad y virgen, ello sería imposible en estas épocas.

Ella vuelve al comedor y mientras nosotros hablamos de la fecha del matrimonio y de la casa, está pide permiso y sé va.

Esta mujer me causa cada vez más curiosidad, es una verdadera encrucijada para mí.

Espero un momento y preguntó dónde está el baño, mi suegra me da las instrucciones y voy hacia él, o eso aparento hacer.

La casa es pequeña, solo tiene una planta, pero el pasillo donde sé encuentra el baño está fuera de vista, nadie me verá.

Llegó hasta la puerta de este y a unos metros más, oigo un canto, al parecer a mi cuñada le gusta cantar. Me acercó a la habitación y abro solo un poco la puerta, mis ojos brillan al ver a la pelirroja dejar caer la toalla, su cabello mojado reposa sobre sus pechos y su cuerpo desnudo es una obra maestra.

¿Por qué mierda no la conocí primero a ella?.-- Pensé, la excitación recorre mi cuerpo, mi miembro reacciona de inmediato y siento la molestia en mis pantalones.

Cierro la puerta despacio e intentó acomodar mi pantalón lo más que puedo y está vez si voy al baño. Hago un descargo aliviando mi erección y salgo.

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