Rose

Dhalia no supo cuánto tiempo lloro, pero pronto se puso de pie

— esto no está bien quien soy yo, me levante de una familia con favoritismo hacia el hombre y logre un ascenso, en los negocios soy despiadada y en esta vida no será la excepción.

Dhalia abrió la puerta de la habitación y salió al pasillo, un enorme pasillo con alfombra roja y grandes ventanales entró en su vista, Dhalia empezó a caminar por el enorme pasillo y cuando pasó por una ventana todo su cuerpo se congeló, Dhalia corrió hacia la ventana y vio su rostro, en la ventana la figura de una adolescente de catorce años apareció, su cabello negro azabache era lizo hasta su cintura, sus ojos violeta eran brillantes y penetrantes podría hacer que cualquiera perdiera el aliento ya sea por miedo o por admiración, unos pequeños labios rojos como cerezas y una nariz pequeña y delicada, los rasgos de la adolescente se podría decir que era encantadoramente  hermosa, podría ser comparada con una ninfa o un hada del lago, eso si tan solo esa gran quemadura en el lado izquierda de su pequeño rostro no arruinara su belleza.

— hay esto va de mal en peor donde está mi bello rostro, Carajo olvidé que el bastardo del padre en un ataque de ira porque su madre supuestamente mató al hijo de la amante quemo el rostro de la niña, bastardo merecía morir de una peor manera.

Dhalia corrió de nuevo a su habitación y miró la máscara que estaba en el pequeño escritorio, la máscara era de medio rostro y de color plateado.

Dhalia se puso la máscara y volvió a salir camino por el largo pasillo hasta la habitación de su madre

Una hermosa mujer de cabello rosa que llegaba a su cintura  y ojos violetas era atendida por cinco doncellas, le estaban poniendo el corsé Dhalia frunció el ceño y entró en la habitación.

— mamá estás bien con ese corsé

Las doncellas al escuchar la voz de su joven señorita se inclinaron y saludaron

— saludos, joven señorita

— querida Dhalia ven donde mama

Dhalia miró a la mujer y corrió hasta donde estaba ella y volvió a repetir lo que dijo

— mamá no te molesta el corsé

La mujer sonríe y toca la cabeza de su hija

– claro que molesta, pero una mujer siempre busca la belleza y está no es fácil de encontrar, además Dhalia por qué estás todavía en pijama

— porque no me gusta el corsé es mejor estar libre.

Dhalia giro y su camisón se levantó mostrando sus pantorrillas la marquesa frunció el ceño

— Dhalia no lo vuelvas hacer eso es falta de decoro

Dhalia se sentó en la cama de su madre y la vio arreglarse

'por qué me regaña, según la trama las mujeres en este mundo ya no están tan sujetas a lo de ser virgen y mucho menos en mostrar un poco de piel'

— mama eres muy conservadora

— claro que soy conservadora, además no creas que no sé en lo que estás pensando joven cita te la pasas leyendo libros de yo no sé donde y eso te está dañando la mente y aunque la mujer ya puede mostrar un poco de piel eso no significa que tú puedas hacerlo entendido

— entendido

' jajajá si solo supieras como se vestían en mi mundo te daría un infarto'

— bien ve a vestirte tu hermano llegará pronto con el invitado, y por favor no espante a este pretendiente como los otros, porque no entiendes que quiero que estés comprometida y tengas una familia yo...

Dhalia continuo escuchando las palabras de la marquesa, antes de que ella obtuviera este cuerpo, la verdadera anfitriona discutió con su madre, su madre trajo varios pretendientes, pero ella los echo sin duda, ya que estaban ahí solo por el prestigio de su familia, además ella se veía así misma como un monstruo.

— da... Dhalia

Dhalia fue sacada de sus pensamientos y miró a su madre

— entendiste lo que te dije

Dhalia frunció el ceño tratando de recordar

— entendiste

Repite su madre

— entendido madre, no provocaré problemas

La marquesa suspiró y continuo vistiendo sé.

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