CAPÍTULO 1

CAPÍTULO 1 – STELLA

En una semana es nuestro cumpleaños, así es… el de mis hermanos gemelos y el mío, nací el mismo día que ellos pero nuestra diferencia de edad es de 5 años.

Hola, mi nena hermosa – saluda mi padre en cuanto ingreso al comedor – ¿Lista para dirigir los clubs?

Si, papá – respondo – No creo que sea difícil de manejarlos. Además Edmond me ayudará, no necesitas preocuparte

Me gustaría que solo te enfocarás en el modelaje – menciona mi padre y veo que mi madre permanece en silencio – Los club’s suelen tener peleas y conflictos pero como insistias tanto…

Papá, ¿Cuándo se irán de viaje? – ingresa Anton y mi padre frunce el ceño – Mocoso, ¿nos estás botando? Ni sueñes que te dejaré sin vigilancia

Oh papá, solo fue una broma – dice Anton y se sienta, Arman hace lo mismo mientras lee su iPad

No hay pistas de ese hombre – habla Arman hacia mi madre – Conozco esa mirada. No se preocupen y sigan con su plan de viajar. Nosotros nos encargaremos de cuidar de esta pequeña revoltosa

¡Oye! ¿a quién dices revoltosa? – cuestiono indignada y Anton me mira con malicia – Si sigues con ese comportamiento infantil se lo diré a Edmond

¡No me vengas con amenazas! – refuto – O le diré a Tanya sobre lo que hiciste ayer – veo que palidece y con los movimientos de mis labios le digo "Jaque Mate" haciéndolo enfurecer

No puedo creer que pelees de esa forma con tu hermana – mi padre se queja – Eres el mayor pero con tu actitud pareces el menor

Amor, desayuna que debemos realizar muchas cosas – mi madre le interrumpe para que no continúe sermoneando a mi hermano

Mi mami es la mejor – Anton le manda un beso volador, sacando una sonrisa a mi madre

"Mi mami" – me burlo – Pareces bebé cuando hablas así

Los tres son mis bebés – interviene mi madre con una sonrisa y me quedo callada

Terminamos de desayunar tranquilamente. Salgo hacia el campo de entrenamiento con una lonch llena de comida y ahí lo veo… siempre entrenando

¡Hola Ed! – le saludo con timidez – No fuiste a desayunar con nosotros ¿Porque?

Hola peque – responde – Tuve que evaluar a los nuevos hombres

Ten – le entrego la lonch, él me mira sorprendido y lo acepta – ¡Gracias!

Es ahora o nunca – pienso, tomo una bocanada de aire y suelto el aire de golpe

¿Qué sucede? – cuestiona Edmond – Te veo nerviosa

Yo… – intento decir, veo a mi alrededor y para mi suerte no hay nadie cerca – ¡Edmond, me gustas!

¡¿Ah?! – cuestiona incrédulo, mientras que yo muero de nervios – Dije.. Que me gustas y mucho

¿Desde….– intenta decir y respondo – Desde hace años… tal vez desde que éramos niños

Pero… ¿Cómo? ¿Por qué? – cuestiona y estaba por responder cuando la voz de mi padre se escucha – Edmon, ¿Como fue con los nuevos? ¿Cuáles fueron los resultados?

Oh.. Señor Licciardi, la mayoría está en muy buena forma – responde – Solo un par necesitan un poco más de entrenamiento

Perfecto, encargarte de ellos – dice mi padre – Por cierto, deja las formalidades conmigo. Tal vez en el futuro seamos familia – termina por decir mientras se va, ocasionando que me sonroje

Ehh Señorita Stella – dice y se lo que viene después, una punzada en mi corazón me lo advierte – Agradezco que tenga esos sentimientos por mí pero…

Está bien – le interrumpo e intento hablar de forma calmada – No necesitas decir nada más, comprendo a la perfección – me giro y antes de irme vuelvo a hablar – Por favor, no te saltes el desayuno y come todo lo que hay

Subo fingiendo tranquilidad hasta mi habitación y cuando cierro la puerta comienzo a llorar lo más bajo que puedo ya que mi madre tiene un oído muy agudo

...Tock Tock...

Escucho que tocan y me limpio rápidamente los ojos

Puedes pasar, mamá – le digo y la puerta se abre

Mmm ¿mi pequeña, necesita un abrazo? – pregunta y asiento, ella se acerca y cuando me acuna en su pecho las lágrimas regresan de nuevo

No me pregunta nada, en silencio me da su apoyo maternal y cuando saque todo me separo de ella

Mamá, ¿amaste a papá desde el principio? – cuestiono y ella hace una expresión pensativa – No, creía que él era un malhumorado y un poco arrogante

¿Así que malhumorado y arrogante? – ingresa mi padre cruzado de brazos

Si, pero él siguió insistiendo hasta que solo lo veía a él – responde mi madre

Me costó mucho llamar la atención de tu madre y a pesar de todas las dificultades que pasamos no hay ni un solo día que me arrepienta – contesta mi padre ocasionando una sonrisa en mi madre

Amor, podrías dejarnos solas….. – le pide y él asiente – Por favor, no vayas a tomar represalias con Edmond

A veces creo que me lees la mente – contesta y sale de mi habitación

¿Qué harás? – cuestiona y respondo – Seguiré intentando… Pero esta vez lo haré de forma diferente

Estoy sospechando lo que harás – dice mi mamá – No hagas algo que puedas arrepentirte, mi amor

Lo tendré en cuenta mamá – respondo, decidida por lo que haré……

...CON EDMOND...

Ahh, se que me arrepentiré toda la vida pero era lo mejor – digo para mí mismo y en eso veo a Anton

¿Y Stella? Creí que estaría pegada a tí – pregunta y no respondo

¿La rechazaste? – cuestiona Arman apareciendo de la nada, ocasionando un susto en su gemelo – ¡¡Cabrón!! ¡Podrías hacer algo de ruido cuando te acerques! Casi me da un infarto… y ¿cómo es eso ... .que la rechazaste?

¡¡Edmond!! – dice el papá de Stella con severidad – Tú…

¿No le dijo mamá que no tomara represalias? – cuestiona Arman ocasionando un silencio en su padre

Los veré en la noche – se despide el señor Licciardi – No olviden de cuidar a su hermana

Vamos, debemos recoger la mercadería que tío Darren envío – dice Arman y lo sigo

Llegamos al lugar y comenzamos a revisar la mercadería, lo subimos a los camiones

El trabajo me tendrá distraído – hablo para mí mismo, veo a Arman solo y me acerco – ¿No estás molesto?

¿Por qué lo estaría? – cuestiona con seriedad, me mira y sonríe – Edmond… tu y Anton son mis mejores amigos. Por lo tanto no puedo obligarte a que correspondas los sentimientos de mi hermana

Y si… – dudo y me cuestiono internamente si debo ser sincero o no

¡Hombres, a moverse! – grita Katrina llamando nuestra atención – Estoy haciendo todo el trabajo mientras ustedes solo conversan

Mujer, no seas tan desesperada – le respondo – Aún estamos a tiempo

Quiero terminar antes, debo hacer unas cosas – refuta y termino con el trabajo

...…………………………………………….....

Somos unos tontos – menciona Katrina haciéndome salir de mis pensamientos, ella nota mi distracción y se ríe – ¡Lo sabía! Estás enamorado de Stella pero… ¿Porque la rechazaste?

¿Cómo lo sabes? – cuestiono y responde – Valentina me llamó. Dijo que Stella estaba triste y pidió que me apresurara para llevarla a que se distraiga – se queda un momento en silencio y vuelve a hablar – Tú… tienes la oportunidad de estar con la persona que amas ya que ella corresponde tus sentimientos pero, mírame a mí…. el hombre que amo está con otra mujer

Kat, yo… – intento decir pero me interrumpe – Ed… No dudes, solo déjate llevar por lo que quiere tu corazón

Deberías hacer lo mismo – respondo y ella niega – Él solo tiene ojos para ella. A mí solo me vé como una pequeña hermanita a la que debe cuidar.

Llegamos a la mansión y bajamos el cargamento hacia las bodegas.

Con esa ropa no dejas concentrar a mis hombres – Anton se acerca hacia nosotros

Es cómodo y tus hombres deben aprender a lidiar con cualquier distracción y continuar su trabajo como si nada – contesta Kat y sonrío por su valentía, se gira hacia mí y me susurra – No dudes y haz lo que tu corazón te pide. Iré a calmar el desastre que ocasionaste

No le digas nada. Se lo diré cuando tenga la confianza – le susurro y nos separamos

¿Ustedes eran tan cercanos en el pasado? – cuestiona Anton y puedo notar un poco de celos en su tono

Hablemos luego, tengo que hablar de trabajo con tu hermano – me marcho de ahí

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