Recuerdos del ayer.

Pasado....

- Héctor vamos corre!- gritaba una dulce y encantadora niña de dos coletas

- Espera Itzel!- hector coria detrás de ella muy veloz para poderla alcanzar.

Ambos niños corrían  y reían en la escuela secundaria, mientras los demás niños los miraban con indiferencia.

- ¿Hoy vendrás a mi casa verdad?- preguntó el niño muy emocionado.

- Claro que sí Héctor, le pedí permiso a mi mamá y dijo que si!- dijo la nino con mucha alegría amaba pasar tiempo en casa de héctor ya que se olvidaba de sus problemas en su casa.

- Genial hoy es cumpleaños de Carl papá le quiso celebrar en casa pero su mamá no lo deja que vea a papá!-

- ¿Tu y él son muy unidos verdad!?- preguntó la joven.

- Si es el único amigo que tengo y aparte es mi hermano mayor.!-

- ¿Y qué hay de mi? - Ella le da un sope en la cabeza.

- Tu no eres mi amiga, eres mi novia ¿que no!?-

- Héctor jajaja se me olvidó que éramos novios- Dice riendo y bromeando con el.

- Jajaja si será mejor que seamos amigos aún eres una niña!-

- jajaja y tú solo eres  mayor que yo por 3 años no eres un adulto que digamos!-

- Soy gordo, nunca tendré novia!-

- Jajaja, eres muy lindo Héctor.-

Tanto las horas como las clases pasan en la secundaria.

- ¡Lista vamos a mi casa!- Le dice Héctor.

Ambos salen de la escuela y Carl como siempre espera a Héctor en la salida.

- ¡Vamos gordito dame tu mochila!- Le dice Carl.

- Feliz cumpleaños Carl- Le dice la niña dándole un abrazo.

- Gracias, Itzel pero no cuenta si no me das un regalo-

- No seas tan malo con ella carl-

- Pues si te tengo un regalo, mira un chocolate- La niña le estira un Hershey 's en barra.

- Gracias- El abre el chocolate y lo divide en tres - Les compartiré mi regalo ¿Y tú a dónde vas?- Le dice al ver qué la niña camina a la par con ellos.

- Olvide decirte que ella irá a la casa-

- A que bien-

- ¿Te quedarás hermano?¿Siempre si te dejó tu mamá? papá quiere celebrarte.-

- Mi mamá no pero mi abuelo sí, así que hoy pasaré el día con ustedes- Carl pasa los brazos por el hombro de ambos niños.

- Si, ¿Carl comeremos pastel, nos darán dulces y quebraremos piñatas?-Dice la pequeña niña con una sonrisa.

- Jajajaja Itzel, ¿cuántos años crees que tengo? acabo de cumplir 17 soy más de otros juegos ahora-

- Ya estás grande yo cumplo 13 en dos meses-

- Aún eres una bebé- Dice Carl sobándole la cabeza.

- Carlos Eduardo deja a mi novia en paz- Le dice Héctor.

- Jajaja es Carl Edward idiota-

- Jajajaja no me importa-

Ambos empiezan a corretearse.

Carl le da un sope a Héctor.

- Alcanzarme gordito!-

- Jajaja y se supone que yo soy la bebé!- Dice la niña la cuál se sienta en una de las múltiples bancas que tiene la calle - Ya dejen de correr tengo hambre!-

- ¡Entraré a comprar algo ustedes esperen aquí!- Héctor entra a un autoservicio.

Carl se sienta aún lado de Itzel.

- Gracias por el chocolate!-

- De nada, oye el está feliz!-

- Si lo está-

- Creí que no te agradaba Carl-

- Han pues empiezas a agradarme, podemos ser amigos si quieres!-

- Si, si quiero ser tu amiga!- Dice ella con una enorme sonrisa.

- Entonces ya somos amigos, ¿no traes otro dulce?-

- Si ten, una paleta-

- Hay gracias, y dame de tu agua tengo sed-

- Eres muy mandón!-

- Jajaja no, bueno un poco, oye me prestas tu celular para hacer una llamada-

- Si ten-

El toma el celular y marca

- Hola madre, no llegaré a casa hoy estaré con mi hermano...

Ok adiós!- La mamá no contestó así que dejó un mensaje en el buzón de voz.

- ¿Tu mamá Carl?-

- Si no le digas a Héctor que le marque, la verdad es que no me dieron permiso de estar con mi papá pero de todos modos les aviso para que no se preocupen -

- Ha ok no diré nada-

- Tienes pintura en la cara por cierto.-

- ¿Ha que, como,  cuando!?-

- Tus dedos están manchados -

Ella saca una servilleta de su mochila

- haber yo lo hago!- Carl le quita la servilleta y empieza a limpiar la cara de la niña. - Listo, ¿tú y Héctor aún son novios?-

- La verdad es que no lo sé yo creo que si!-

- Ho...-

- Ya traje pan y yogurt- viene Héctor y se sienta en medio de los dos. - Para ti y para ti-

- Bueno a seguir con nuestro camino!- Ella se atrasa por qué le hablan por teléfono mientras que  Héctor y Carl avanzan

-¿Hermano te gusta mi novia? he!- Le dice Héctor.

- Claro que no!, solo es una niña!-

- Si ¿y tú un adulto?, solo son 4 años de diferencia -

- No te entiendo Héctor ella es tu novia deberías de cuidarla mejor!-

- La quiero mucho así que si la cuido, pero solo digo lo que se ve a la vista, a ti te gusta ella-

- Ya te dije que no, deja de decir estupideces!-

- Ok está bien!-

Después de un rato llegan a la casa.

Ponen música y parten pastel, el papá de Héctor y Carl es muy amable.

La fiesta termina y ayudan a limpiar

- Carl podrías llevar esto al almacén que está atrás! y tu niña ayúdale- Dice la mamá de Héctor.

- Si, está bien puedo solo!- Dice Carl quitando de las manos las cosas que la mamá de Héctor puso en las manos de la niña.

- Déjame ayudarte!- Itzel toma algunas cosas entre sus manos y ambos caminan hasta el almacén.

- Oye espera Carl vas muy rápido y no veo nada!-

El almacén está hasta el final de la casa Linin así que es un lugar apartado y sin iluminación.  Y la noche no ayuda mucho para los pasos torpes de la niña.

- Eres muy lenta niña, camina más rápido!-

- Carl no puedo esto pesa!-

Carl se detiene.

- Gracias por espérame!-

- Eres muy terca dije que podía solo no te necesito, dame eso!- Le quita las cosas de la mano. - Regresa a la casa-

- No, iré contigo te iluminaré con la lámpara de mi celular podrías caer traes muchas cosas y no has de ver bien-

- Está bien, no puedo contra ti eres muy terca!-

- ¿Porque me odiabas cuando te conocí?- Dice la joven para sacar plática.

- ¿Enserio quieres saber?-

- Si-

- No te odio a ti, de hecho creo que me caes bien, odio a tu familia!-

- ¿Por que que te hicieron?-

- Es una larga historia!, y no quiero hablar de eso, me hace enojar así que no me quiero enojar ahora-

Ambos llegan al almacén el pone las cosas y libera el seguro.

Es una palanca que tienes que jalar hacia arriba.

Ambos entran y dejan las cosas hay adentro.

Cuando están por salir la puerta se cierra dejándolos encerrados.

El seguro bajo.

- ¿Está cerrado Carl?-

- Si, hay que buscar otra salida!-

- Le marcaré a Héctor-

Ella le marca a Héctor más el no contesta la llamada.

- No contesta ¿y ahora?-

Carl se deja caer al suelo.

- Tendremos que esperar a que vengan por nosotros- Dice el.

- ¿Y si gritamos?-

- Estás loca nadie escuchará los gritos este lugar tienen aislante de sonido!-

- ¿Cómo sabes?-

- Héctor y yo ya nos habíamos quedado encerrados aquí una vez, ¡duramos todo un día!-

- ¿Duraremos mucho aquí?- Dice la joven dejándose caer aun lado de él.

- No lo creo eres Itzel Mo jamás te dejarían en un lugar como este-

- ¿Eso crees?-

- Jaja Héctor vendrá por ti, siempre te ayuda!-

- Carl, tengo hambre!-

- ¿Hablas enserio?-

El saca de su pantalón el pedazo de un chocolate.

- Gracias, espera ese era mi regalo. -

- Si, no me gustan los chocolates- Miente él lo guardaba por qué quería disfrutarlo es el único regalo que le había dado la niña que le gustaba.

- Toma- Ella parte en dos el chocolate y ambos comen.

- Hace frío, buscaré con que taparnos- Dice él poniéndose en pie.

- Espera voy contigo!-

Él le extiende la mano para ayudarla a parar.

- Trata de marcar a Héctor!-

Ella toma su celular

- Carl, la batería murió, mira-

- ¡¡Brillante!!-

- ¿Estás molesto?, Carl busquemos con que arroparnos tengo mucho frío.-

- Vamos-

Empiezan a buscar entre las cosas del almacén y no logran encontrar nada, más que una vieja cobija de bebé.

- Ten tápate!-

- ¿Y tú?-

- No te preocupes por mí, y ya baja de hay!-

Le dice Carl al ver que ella está en la cima de muchas cosas.

- CARL!-

- ¿Que pasa?-

- Me estoy resbalando ayuda!-

Ella resbala y cae encima de Carl.

- jajaja, Itzel qué forma de bajar!- Ella tiene la cabeza en el pecho de Carl y empieza a sonreír.

- Si, eso es bajar con estilo-

- Ya bájate pesas-

Ambos se acomodan sentados en el suelo ella se tapa con la cobijita mientras él muere de frío.

Ella se acerca más a él, recuesta su cabeza en los hombros y le comparte de la cobijita.

- Gracias!-

- Carl, ¿como es tu familia?, solo conozco a tu papá -

- Bueno mi madre hace todo lo que mi abuelo dice él la obligó a casarse con otro hombre para adquirir más poder, pero mi madre es más digamos de las mujeres que no se dejan duraron casados solo un mes, aún no sé cómo le hizo, hubieras visto a mi abuelo, enfureció , tienen un carácter muy fuerte es muy colérico cualquier cosa lo hace estallar.

- Ho ¿Que más?-

- Una vez lo hice enojar y me encerró en el sótano, dijo que eso me daría una lección- Él agacha la mirada. - No quiero ser como el-

- No lo seres tú eres buena persona!-

- No niña no lo soy, Cómo puedo ser buena persona si envidio a mi propio hermano, aunque no me guste creo que estoy siguiendo los mismos pasos de mi abuelo, soy muy controlador y no me gusta compartir lo que es mío y la envidia que siento por mi hermano, el lo tiene todo, todo lo que siempre he querido, amor de una familia, solo ve su mamá lo cuida mucho y papá siempre le cumple sus caprichos, mientras yo solo recibo sobras ya que mi madre nunca me deja estar con él, tiene una linda novia aparte jaja-

- Carl, tu padre te ama mucho!

- Pongamos su amor por mi y su amor por Héctor, supongamos que sí Héctor y yo estamos por caer de un acantilado ¿a quien crees que salvaría?-

- ¡Yo te salvaría a ti!- Dice la niña viéndolo a los ojos.

- No te arrastraría a mi enfermo!, donde solo hay oscuridad, se lo que me espera en el futuro, así que creo que soltaría la mano de mi padre y dejaría que salve a Héctor!-

- ¿Es tan malo lo que te espera?-

- Si, cuando mi abuelo muera heredare la compañía familiar, y no solo eso me dejara mi abuelo estoy seguro que me está arrastrando poco a poco con él, no lo soporto no quiero eso, quiero ser libre de poder decidir mi propio destino, no quiero la empresa, no yo quiero vivir una vida tranquila en el campo!-

- Quizá no sea tan malo!-

- No tienes idea, además tu y yo no deberíamos de ser amigos!-

- ¿Por que me agradas Carl?-

- Niña tonta, se que si somos amigos mi familia no lo permitiría-

- Podemos ser amigos a escondidas!-

- Ok-

Ambos se quedan en silencio, sus ojos se conectan y están apunto de darse un beso cuando escuchan que alguien empieza abrir la puerta.

- ¡Vamos!- Dice Carl jalandola de la mano para ayudarla a parar.

- Hija- Grita la señora.

- Mamá- la niña sale corriendo soltando la mano de Carl, mientras Carl siente vacío donde antes estaba la mano de la niña.

- Tu qué te pasa estúpido chamaco, te crees muy listo para encerrarte con mi hija, ¿que le querías hacer?- Le grita el papá de la niña.

- Nada, solo platicábamos, fue un accidente la puerta se cerró!-

- Aparte conteston!- El hombre golpea a Carl a mano extendidas en la cara.

- Que sea la última vez que me pone una mano encima señor Mo!-

- ¡Me estás amenazando mocoso!- El señor levanta la mano de nuevo para golpearlo.

- Papá ya déjalo!- Gritó la niña.

Carl sostiene en el aire la mano del señor.

- Señor Mo, no permitiré que me ponga una mano encima de nuevo - Carl arroja hacia abajo la mano del señor y sale del almacén.

- Carl- La niña sale corriendo detrás de él.

- ¿Qué? Tu y yo jamás deberíamos de habernos conocido, no quiero que seamos amigos y aléjate de mí- Le dice Carl retomando su camino.

Ellos no volvieron a dirigirse la palabra hasta dos semanas después que fue el día en que el intendente trató de abusar de ella y él la salvó.

La joven despierta de su sueño, su ropa está desgarrada y Edward ya no está en la cama torturándola, más el dolor que siente en sus caderas la hace recordar lo que Edward le hizo toda la tarde.

Fue en ese momento que recordó que el mayordomo Luis le había contado que Edward era hijo de Rebeca Li y el señor Linin padre de Héctor.

Ella se sentó en la cama y no paró de llorar se preguntaba cómo ese niño se convirtió en lo que es ahora, se tiró de nuevo en la cama y lloró amargamente no sabe cuántas horas fueron más ella se quedó dormida de cansancio.

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