capítulo 2- molestias

Para Kenia fue un rotundo fracaso sus planes, pues ella quería hacer sentir mal a Yue, para poder manipularla, pero todo le había salido mal, Yue actuó tranquila en todo momento como si realmente no le importará. Por otro lado, Yue había llegado a casa, ahí, David la estaba esperando, pero, junto a él, estaba Nina, justo como en la novela, David lleva a Nina con la intención de que se lleve bien con Yue pero ella ya volvía furiosa de la fiesta, que terminó por golpearla, que chica tan tonta, el hombre nisiquiera valía la pena, si bien es guapo, es tonto. Yue se acerca mostrando una sonrisa y hace una reverencia ante David, pero a Nina nisiquiera la mira a ver.

- lord Jensen, no esperaba su visita.

- lamento venir tan repentinamente, pero quería presentarle a...

- Nina Joly, es muy famosa por ganarse al príncipe, aunque sea de bajo estatus.

- lady Yue, no diga esas cosas, usted apenas esta por encima de su estatus.

- lo se, nunca dije que yo fuese superior a ella.

- no se preocupe, lord David, ella tiene razón, pero, supongo que tuve suerte de ser amada por el príncipe.

La chica muestra una linda sonrisa, ante ello, David sonríe al observarla.

- ¿y se puede saber el porque la ha traído a mi casa?

- creí que ambas podrían ser amigas, lady Nina es una gran persona.

- claro, tan grandiosa que la halaga mi prometido, me imagino que habilidades ha de tener.

David y Nina por supuesto entienden perfectamente a lo que Yue se refiere, David se pasa delante de Nina mostrándose enojado.

- no se atreva a insinuar cosas como esas.

- ¿me equivocó? Algo ha de hacer bien, ya que mi prometido acude corriendo a ella cuando necesita de su ayuda, no puede cumplir con sus deberes en el palacio, pero si puede tener bien complacidos a los hombres.

- Yue Becker, le prohíbo decir algo así nuevamente y pida una disculpa.

Nina se mantiene con las manos en el pecho y encogida de hombros por las palabras de Yue, era bastante obvió que nisiquiera puede hablar por ella misma, solo sabe escudarse tras los hombres.

- entonces le prohíbo traiga nuevamente a esa clase de chica a mi casa, la mansión de mi padre es una casa decente.

Dicho esto, Yue les pasa de largo para entrar a la casa. Pero desde la ventana se puede ver como Nina comienza a sollozar mientras David la consuela, que mujer tan patética, depender solo de los hombres que la rodean es demasiado absurdo.

- que descarado es lord Jensen. Usted es mil veces más hermosa que esa chica.

- lo se Ana y por eso yo, merezco algo mejor que ese hombre, patético y tonto.

- mi lady...

Ana no puede creer lo que escuchaba, pues era bien sabido que Yue adoraba a David. Yue se recuesta en un sofá dejando salir un largo suspiro, ya se imagina que David irá a quejarse con su padre, porque le faltó al respeto a la futura princesa heredera, es tan molesto tener que lidiar con todo eso, pero, todo sea por mantenerse con vida y para lograrlo, debe romper su compromiso con David, para alejarse definitivamente de todos esos problemas futuros.

- Ana, creo que deberíamos ir a dar un paseo, escuche que en el condado del Archiduque Shadow, hay un festival.

- si, es un festival por obtener buenas cosechas. ¡ah! Mi lady ¿no me diga que quiere ir a ese condado?

- si, quiero divertirme y alejarme unos días de esta vida.

- pero mi lady ¿cree que su padre le de permiso?

- no lo se, pero, bien dicen que más vale pedir perdón que pedir permiso.

Yue se levanta sacando una maleta de debajo de cama y empieza a buscar ropa en el closet, incluso le dice a Ana que vaya a empacar, porque saldrán mañana temprano, antes que su padre regrese.

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