Adiós a todos

Mía.

Di la media vuelta, después que Josué me abrazara, era el último abrazo que recibiría de parte de el, ya que nunca me amo, por eso era tan frío si solo me daba gotas de amor, mientras que a la otra mujer rebosaba le vaso de amor y ternura, yo pensé que el amor era así, no sabía nada de aquel tema si nunca había tenido un novio, pero ya no puedo decir nada solo decir adiós, espero que el sea muy feliz porque yo lo haré junto a nuestro hijo, más bien solo mi hijo.

Mía entro a su vehículo, Juan la está esperando por lo mucho que quería detener las lágrimas, no pudo así que la dejo salir, Juan que la miraba por el espejo retrovisor siento pena por ella, no entendía porque Josué hizo tal barbaridad con ella, burlándose de su amor, si ella era una niña, alegre, buena y sobretodo feliz, ahora su hermoso rostro está lleno de tristeza.

Mientras tanto, Josué quedó pensando en aquel lugar solitario, tenía un nudo atravesado en la garganta que podía salir, y corazón se hacía pequeño como si alguien lo apretara desde el interior.

Josué---: ¿Porque me siento como un miserable? si debería estar feliz, mañana me casare con la mujer que amo, pero no entiendo porque quiero llorar con esta despedida. Mía solo te deseo que encuentres el amor, y que seas feliz muy feliz.

Josué se quedó un rato más, en aquel lugar, pensando como habría sido si el se hubiera enamorado de Mía y su hijo, ¡talvez fuera feliz!, después de unas horas el salió de aquel lugar, llego hasta la playa camino pensando en su vida.

Al día siguiente, el se preparaba para su boda pero no se sentía tan feliz como lo imagino.

Fidelina---: Estas, guapo hijo mío.

Josué---: Gracias madre.

Fidelina---: Porque estás triste, si te vas a casar con la mujer que amas.

Josué---: No lo sé madre, y no entiendo porque estoy así, si yo amo a Mariana.

Josué ingreso a su habitación, le faltaba perfumarse, mientras que su madre lo analizaba.

Josué---: Nos vamos madre.

Fidelina---: Claro hijo, voy por mi bolso.

Josué---: Te espero afuera.

Fidelina---: Yo se porque estás así hijo, te has enamorado de Mía pero no te has dado cuenta(decía Fidelina para si misma).

Josué espero, a Mariana y minutos después de unos minutos llegó junto con su hermana, entraron antes el juez, mientras que Mía ingresaba por otra puerta, por un documento para viajar a Toronto, ella espero por media hora hasta que recibió el documento, pero cuando se retiraba, vio una pareja de recién casado dónde todos les deseaban los buenos deseos, gritándole ¡beso,beso! ellos se besaron pero Mía sintió que se moría, trago grueso, Fidelina que se percato de la presencia de Mía, y salió tras ella.

Fidelina---: Hija espera.

Mía----: ¡Señora!

Fidelina---: ¡Lo siento hija!

Mía----: No se preocupe señora. yo entiendo, dentro de dos horas viajaré, y no volveré, solo espero que Josué sea feliz.

Fidelina---: Eres una buena chica, lastima que mi hijo no se dió cuenta de eso.

Mía abrazo a Fidelina en señal de despedida, luego ingreso a su auto y se fue mientras que Fidelina lamentaba que su hijo no se haya dado cuenta que está enamorado de Mía.

En la sala de recepción, todos bailaban y daban buenos deseos a los novios pero a Josué lo invadió un fuerte dolor de cabeza, y se retiro a un lugar solitario donde no escuchaba mucho ruido.

Joaquín---: Estas aquí, ¿porque no estás con tu esposa?.

Josué---: Sabes, Joaquín yo debería estar feliz al fin me case con la mujer que amo, pero no me siento bien ¡no sé que me pasa!

Joaquín---: ¿No te entiendo amigo!

Josué---: Ni yo.

Joaquín---: Anda, vamos a la fiesta es hora de que vayas con tu amada, a la gran noche de bodas, talvez eso te relaje.

Josué---: Tienes razón.

Mientras ellos eran despedido, para su gran noche de boda. En el aeropuerto, Mía se despedían de todos, ella no pensaba volver, lo único que quería era llegar a Toronto y desaparecer para siempre.

Ella miro con nostalgia, a sus padres y se fue, lo último que dijo fue ¡Adiós a todos!, da la media vuelta y se va, sus padres sintieron dolor a las palabras de su hija, ella lo había dicho con tanta nostalgia, que solo vieron la última silueta de su pequeña bebé.

En la avión, ella miro por última vez a la ciudad que la vio nacer, cuando la avión despegaba, los mejores recuerdos llegaron a su mente y las lágrimas salieron llenos de nostalgia.

Mía----: ¡Adiós a todos!, adiós mamá, papá Josué, no volveré, nunca sabrán de mi.

Ella iba perdida en sus pensamiento, cuando el piloto anuncia que por problema técnico tendría que aterrizar por emergencia en El Salvador, todos los pasajeros, bajaron para tomar un respiro en el aeropuerto.

Mientras Mía esperaba recibe una llamada de su madrina, ella la llamo para disculparse no pudo asistir a su boda.

📲 Hija lo siento, se me hizo difícil viajar.

📱No te preocupes madrina, ojalá pueda visitarte un día.

📲Serás bienvenida, mi reina, y mi hermano como está.

📱Bien madrina, mi papá está bien.

📲Cuando decidas venir serás bienvenida, te enviaré la dirección cuando puedas visítame.

📱Claro madrina.

Mía colgó, se preparaba, para ingresar de nuevo a la avión, pero una idea le llegó a la mente, no irá a Toronto, cambiaría su pasaje para España, pero al acercarse a la ventanilla, no le le cambiaron el boleto pero ella, compro uno con destino a España.

Después de veinte minutos, ella tomo el avión con destino a España, mientras viajaba ella sonreía, sus padres no la encontrarán, y sobretodo no volverá a saber más de Josué, criará a su hijo sola, porque a partir de ese momento es una madre soltera, dispuesta a luchar y salir adelante sin nadie, más bien sin ningún hombre, su hijo no sabrá quién es su padre ni el padre sabrá de la existencia su hijo.

Mía estaba decidida, al llegar a España su vida cambiaría para siempre.

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