02. Mi vecino

Viki estaba sorprendida de la propuesta que le hizo Rodrigo, ella era muy estricta con su pensamiento de serle fiel y respetar a su marido pero después de lo que él le había hecho hoy, no podía pensar que todavía sentía amor por ella.

Me parece bien! - dijo Viki asentando con la cabeza. - Creo que podemos pasar un buen rato juntos.

Rodrigo abrió la puerta de su departamento y con la mano le indicó la entrada. - Señorita, adelante...

Viki no estaba segura de estar en lo correcto pero se sentía cómoda con Rodrigo y sabía que Daniel no volvería hasta muy tarde, de hecho le dijo que no lo esperara despierta, así que no habrá problema con eso, ni siquiera lo esperará en casa.

-¿Qué quieres tomar?.

-Una cerveza está bien por mi.

-Cerveza será entonces!. Y bien, cuéntame. ¿Cómo va tu proyecto del edificio Magnus?.

Viki era la mujer que cualquier hombre desearía tener, independiente, hermosa, inteligente y leal. Era una arquitecta muy reconocida y prestigiosa de la ciudad, sus trabajos realmente eran únicos y muy bien pagados.

Viki bebió un sorbo y recordó. - El edificio! Bien, todo marcha excelente. Dame un minuto que recordé que tengo que enviar un e-mail importante.

-Claro, yo buscaré alguna buena película para ver.

Se suponía que debía buscar una película pero cada vez que la veía, él solo se detenía a ver lo bien que le quedaba esa blusa escotada y la falda negra hasta la cintura. Sus ojos grandes y verdes eran atrapantes y combinaban perfecto con su boca de labios carnosos y su pelo negro hasta la cadera.

Viki alsó la mirada. - Listo. ¿Y, alguna peli buena?.

La verdad soy muy malo eligiendo películas, siempre me termino durmiendo antes de encontrar alguna interesante.

Viki reía. - Tranquilo, yo solo elijo una sin pensarlo tanto y pocas veces es buena o bien cuando tengo sueño elijo alguna que ya he visto, entonces no me da pena si me duermo antes que termine.

Rodrigo seguía sin poder dejar de mirarla, ella se veía tan hermosa y tenía una mirada tan triste que le daban ganas de abrazarla. - ¿Te parece si seguimos tu estrategia y elegimos alguna que ya hemos visto?.

Viki se sentía atraída por su vecino, pero también quería saber un poco más de su vida, si bien eran amigos sólo se conocían hacía 6 meses. -Si! o solo podemos beber y charlar, por mi está bien así.

-Acabas de dar una mejor opción sin dudas! ¿De qué quieres hablar?.

Viki sabía perfectamente lo que quería preguntar. - No sé, cuéntame ¿cómo va tu relación con Leila?.

Rodrigo cambió la cara instantáneamente. - Es complicado, al principio nos llevábamos bien y ella era distinta. Ahora solo peleamos todo el tiempo, se le ha puesto por costumbre insultarme o tratarme mal delante de sus amigos y ya la verdad estoy cansado de pasar malos ratos.

Viki pensaba como alguien podía tratarlo mal, él era de las pocas personas que se preocupan por los demás. - Rodrigo yo no quiero meter púa pero ¿porqué dejas que te trate mal? Eso te hace daño, no porque eres hombre debes aguantar lo que ella haga o diga.

A Rodrigo no le importaba Leila, él estaba con ella para no ir a los brazos de Viki a pedirle por favor que se quede con él. - Lo sé, pero estoy pensando en terminar la relación porque ya no la amo, todo lo que ella hace ha acabado con mis sentimientos. ¿Y tú? ¿Porqué dejas que tu marido te humille?.

Viki recordó las ganas que tenía de ser mamá. - Yo me casé con Daniel muy enamorada y ahora estoy tratando de quedar embarazada, estoy deseando ser madre. Ya tengo 34 años y no me queda mucho tiempo, pero Daniel no se ha ocupado de eso ni un poco, sinceramente creo que no le interesa ser padre y estoy pensando en pedirle hacer un análisis para saber si alguno de los dos tiene algún tipo de problema para que se logre.

A Rodrigo con cada palabra se le retorcía un poco más el corazón. - ¿Para qué quieres a ese hombre como el padre de tu hijo si ni siquiera recuerda un aniversario contigo?.Discúlpame no quiero ser grosero, pero sinceramente no creo que él merezca ni un poco de tu amor, mucho menos el de un niño.

Viki se desmoronó, pero sabía que Rodrigo no se equivocaba. - No lo sé, en el fondo sé que él no merece nada de mi, quizá es miedo a quedarme sola, como te dije tengo 34 años y el tiempo corre.

-Nunca podrías quedar sola, eres hermosa, independiente y leal. Cualquier hombre desearía estar contigo!.

-Gracias por tus palabras, tú también necesitas alguien que te ame y te trate como mereces. Ahora, creo debemos elegir una película pronto porque sino terminaremos llorando como dos tarados.

Rodrigo secó una lagrima en la mejilla de Viki y sonriendo contestó. - Elegiremos una película pero el primero que se quede dormido pierde!

Viki sonrió y aceptó el trato.

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