Blanca

Cuando llegue a su departamento estaba tan nerviosa, me sudaban las manos, toque el timbre ahí estaba el tal lindo, salude y me sonrió y con esos ojitos chinitos que hermoso se veía, me hizo pasar estaba que me temblaba todo, pero primero me tapó los ojos, pasé y camine unos cuantos pasos, el me tenía abrazada por la espalda y cuando nos detuvimos me quito la mano de mis ojos y era hermoso era una mesa decorada para dos personas en el suelo habían dos corazones con pétalos de rosa era tan hermoso, mi corazón saltaba de felicidad al ver lo que había hecho para mí, nos besamos, fue un beso chiquito pero cómo lo amaba, nos sentamos a comer ya estaba en la mesa todo listo, platicamos de todo un poco, nuestras miradas nunca dejaban de verse es que yo lo miraba y era hipnótico no podía dejar de mirarlo más con esos ojos chinitos que me vuelven loca y esa sonrisa que me desarma.

La cena estuvo de lo más deliciosa, no creo q lo haya preparado pero si así fue estuvo buenaza, reímos demasiado, lo bueno de estar y conversar con él es que nunca terminamos de hablar siempre tenemos tema de conversación hasta de tonterías hablamos, terminamos y quise ayudarlo a levantar la mesa pero no me dejó, me dijo que yo estaba de invitada y no podía hacer nada, y bueno me senté a esperarlo, cuando terminó que no fue mucho tiempo q pasó, me llevó a otro espacio, yo pensé que era solo la cena pero no! se notaba el esmero y amor que le había puesto a esta cena, era un espacio como si estuviéramos acampando dentro de casa, con sus cojines, luces, fotos mias sola y juntos aunque no teníamos muchas juntos, pero estaban hermosas, un vinito y dos copas se veía que había pensado en cada detalle, si mi corazón saltaba de alegría con la cena con esto se me quería salir de mi pecho, no sabía que mi sonrisa podía ser tan grande.

Conversamos otro poco y se levantó me trajo

un cupcake con una vela y me canto feliz cumpleaños, era mi primer cumpleaños que sentía recibir otro tipo de amor, sople y creo q me embarre por q me dijo te ensuciaste y me beso lamiendo mi cara, con sus besos era tan bueno que con eso, mi piel se puso de gallina.

Nos fuimos besando hasta que me miro y creo que quería que le diera permiso para seguir y yo quería, si quería y lo deseaba, quería que no solo sea el primero, quería que me haga suya y sentirme uno con él, y se lo dije aunque estaba nerviosa él fue muy delicado conmigo, sentí volar, sentí estar con él en las estrellas, era un placer único y que más hacerlo con la persona que amo, me entregue a él sin restricción, no puedo negar que me dolió un poco al principio, pero luego fue todo maravilloso, no sabía que se podía amar más todavía, sus brazos eran tan reconfortantes, podía sentir su amor en cada caricia que me daba en cada beso que nos dábamos dejábamos el alma, nuestros cuerpos hacían de las suyas por sí solos, le entregue lo más valioso que tenía para mí al hombre que amo, mi virginidad y el me dio su amor.

Me regalo una pulsera hermosa que creo que nunca me la quitaré ni para bañarme, pero la magia aveces acaba y tenia que irme a mi casa si no mi mamá otro día no me dejaba salir y se senteraba era peor para mi, me llevo por que insistió, por que yo quería irme sola no quería que alguien nos vaya a ver todavía no era tiempo de decirle a mi mamá, creo q mas era mi miedo a no saber como afrontar las cosas, pero ya veremos que pasa.

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