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Mara y Maly siguieron su camino por la selva, mientras avanzaban era más hermosa la vista, árboles tropicales, rodeados por enredaderas llenas de flores, bella aves postradas en ellos y una brisa fresca.

Mara: Es hermosa la vista no crees?

Maly: Lo es, nunca me había adentrado tanto a la selva, ni me había alejado de la tribu.

Mara: Ni yo..

Maly: Desearía hacer esto siempre

Mara:. Si eso quieres yo creo que el Jefe te lo permitirá, bueno al menos te dejo traerme

Maly: Eso espero.

Una parte de Maly se alegraba que Kaly fuera la destina para ser jefa de su tribu, ella deseaba con todo su ser explorar y ser la jefa no lo permitiría, al menos no como ella lo desearía.

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Habían pasado más de 12 horas caminando, solo se habían detenido a descansar, tomar agua y comer algo, pero ahora el cielo se estaba oscureciendo, era hora de buscar donde dormir, la selva era engañosa de noche y más valía levantar el campamento antes que la noche cayera.

Decidieron descansar frente a un gran árbol, su tronco era lo suficientemente grande para que cuatro personas se recargarán en el, era muy alto y a su tronco les ofrecía no solo cobertura de los animales si no también del frío.

Mara se encargó de buscar agua mientras Maly montaban las trampas, cuando todo estuvo listo y Mara volvió decidieron encender la fogata, asaron un poco del pescado que Mara traía consigo y cenaron. Mara le contó a Maly que muchas veces los sueños eran pequeños tejidos de un futuro próximo, eran engañosos y muchas veces eran difíciles de descifrar aún para ella, le contó que antes de que Abed llegara a Himba ella ya sabía que Zuled se casaría con ella ya que la había visto en un sueño.

Esto sorprendió a Maly, como era posible, que Mara supieras eso con certeza, pero una duda la invadió entonces tal vez sus sueños también querían decirle algo, a caso el chico de sus sueños sería el cambia formas.

Con esta duda Maly se quedó completamente dormida y de nuevo como si fueron algo normal frente a sus ojos apareció un cielo azul, ahora estaba muy dentro de la selva, junto a ella una joven, era tan bella, tenía los ojos azules y el cabello dorado al igual que su túnica, no la reconoció, pero ella le dijo

"Pequeña mía es bueno volverte a ver, eres aún más hermosa de lo que antes fuiste, ahora sí lucharás para ser feliz?. Pero de nuevo asi como a Shiloh se deberá elegir y solo así se podrá encontrar la salvación o la destrucción de tu pueblo"

Dicho esto desapareció, dejando a Maly sola en esa inmensa selva, frente a ella apareció un pequeño conejo blanco el cual corrió cuando ella se acercó y tras el fue Maly, cuando estaba apunto de atraparlo se convirtió en una pantera que la tiró al piso y con su garra hizo un corte pequeño en su hombro, Maly la empujó y se convirtió en una ave que desapareció en los árboles.

A lo lejos se escuchó un sonido fuerte era como un gruñido o rugido Maly no lo pudo distinguir, así que avanzó e esa dirección, estaba apunto de ver el animal que producía ese sonido cuando Mara de nuevo la despertó.

Mara: Maly ya es hora despierta

Maly: Lo siento, siempre me quedo muy dormida, ya voy.

Maly se levantó y se encamino a quitar las trampas, cuando estaba por guardar sus cosas descubrió que tenía un corte en el hombro, era el mismo que en su sueño, pero como era posible que el corte de su sueño se hubiera hecho real, esto asustó a Maly pero luego pensó que era solo cincidencia así que ella y Mara siguieron su camino.

Quien hubiera de imaginar que de cercas una ave blanca las seguía, aveces como ave, otras como serpiente o rana, que importaba, siempre las veía, tal vez por ahora era lo conveniente, pero que buscaba.

Acaso el cambia formas encontró a Maly antes de que ellas lo buscará, y si a si era porque las seguía, era un ser engañoso, tal vez algo quería....

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