capitulo 5

A lo lejos pude ver qué Adolfo había llegado con esa mujer, la cual ni siquiera se su nombre no me tomé la molestia en preguntar cómo se llamaba, Adolfo la traía así dónde me encontraba, no podía dejar de mirarla su cuerpo era muy delgado se le podían distinguir unas ligeras curvas, su piel era muy pálida su cabello castaño largo y sus ojos tenían un hermoso azul como el cielo entre más se acercaba más fuerte era ese olor a café con vainilla; tome todas mis fuerzas para controlarme sentía que estaba viendo a la mujer más hermosa del mundo.

Cuando la tuve un frente a mí, ví en su mirada inocencia no parecía uno de los depredadores más fuertes al contrario tenía miedo, me concentré en el latido de su corazón y su respiración entonces confirme lo que Malena me dijo mi luna es un vampiro, tanto como la respiración y los latidos del corazón de un vampiro son mucho más lentos que apenas se pueden distinguir todos en la manada estaban mirándonos se había corrido el rumor de que ella era mi luna; tantos años esperándola solo para llevarme la decepción jamás permitiré que una mujer de otra especie se convierte en la luna de esta manada.

-¿Cuál es tu nombre?- le pregunto sin dejar de verla, tarda en responderme no sé si será por el miedo.

-Me llamo Violeta Castillo, señor yo no e hecho nada malo-

-Eso ya lo se, muy bien terminemos con esto rápido-

-¡Que quiere decir con eso señor me va a matar !-

-Poniendo a mi manada como testigo yo Gabriel Puente no te acepto como mi pareja, mi esposa ni como la luna de esta manada a ti Violeta Castillo-

Violeta

Que demonios acaba de pasar, primero me trajeron a este lugar, después no dejo de ver a este hombre que está enfrente de mi el cual parece que está tallado por los mismísimos ángeles sabía que algunos lobos eran guapos, lo recorrí desde la cabeza a los pies su cabello castaño claro, unos ojos verdes seco unos labios carnosos se me antojaban clavarles mis colmillos y un cuerpo bien formado como solía decir mi abuela ahí no me caigo.

Me sacó de mis pensamientos cuando pregunto mi nombre, lo que me saco de onda fue lo que dijo después al parecer este hombre me estaba rechazando y yo no sabía ¿por qué? observé para todos lados ya que los presentes me miraban incluso aquella mujer con la que discutí en la mañana mi miraba burlándose, Adolfo que se encontraba alado mío me hacerco a el preguntándole discretamente.

-Me puede decir que está pasado- me miró algo sorprendido pero no tenía idea de sus costumbres y menos entendía por qué un hombre que jamás había visto me estaba rechazando.

-Nuestro Alfa la está rechazando como su pareja y nuestra luna- maldita sea debí haber leído más ese libro esperen un minuto ese idiota me está rechazando ¿por qué no soy linda o por qué soy un vampiro que?, se valla a la mierda ni crea que le voy a dar el gusto de verme triste lo que tiene de bonito lo tiene de imbécil.

-Bueno señor eso significa que me puedo ir- se lo dije en un todo como si no me importara lo que me acababa de decir, pero quería golpearle esa hermosa cara hijo de put#, lo que no entendía era porqué me molestaba si ni siquiera lo conozco como no me respondió nada lo tome como un si, me dió la vuela preguntándole a Adolfo el camino de regreso al pueblo el me dijo que me llevaría de regreso, ni siquiera volte a verlo, solo espero y nunca volverlo a ver lo que me incomodaba era la mirada de todos.

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