Segunda ronda.

En la mañana cuando bajamos del camión, mire una avioneta blanca con las letras de McLarn.

- ¡mirá está belleza!, gritaba Axel.

Después llegó otro avioneta.

- Firmé aquí joven.

- Pero solo pedimos una.

- El señor mando dos y no creo que sea muy amable regresar uno de ellos.

- Gracias, hablaré con el después.

Mientras Axel le marcaba a Paul, acariciaba las avionetas son hermosas.

- Son como las de mamá.

- Si le especifique como las quería.

- Son geniales.

- Déjame revisar el motor y todo lo demás para que puedas subirte.

Dimos un par de vueltas, para probar los aviones.

- ya es hora de bajar, decía Axel

- si, cambio y fuera.

Nos colocamos los uniformes, mi hermano daba los últimos chequeos a la avioneta.

- ¡Te gustaron!, decía Paul bajando de su limosina.

- Si están muy lindas.

- Espero hoy me impresiones, besaba mi mano mirándome con lujuria.

- No creo, pero trataré de no arruinar tu avión.

Paul se subió a su auto.

- ¿Estás coqueteando con el?

- Claro que no.

- Pues parece, oye el tipo es casado.

¿Es casado?, el muy cabron me está tirando el rollo. Típico de los hombres con poder creen que pueden tener lo que quieren, pensaba

- No te preocupes, no me interesa en nada, será mejor darnos prisa.

Alex y yo compramos uniformes nuevos con nuestro logo el me presumía su uniforme.

- ¡Te miras muy guapo hermanito!

- Gracias tu te miras igual.

- Mientras Axel nos registraba, Will se acercó con su princesa.

- ¡Mira sus uniformes son horribles!, gritaba la princesa.

- Si lo son cariño.

- No sé cómo dejaron que la mierda compitiera, solo deberían darle lugar a los dueños de equipos que apoyan al comité.

Yo los ignore, la verdad no quería iniciar una discusión se que ella me provoca para que me suspendan, me impresiona como la tipa cree que es más inteligente que yo.

- Listo ya quedó, decía Axel.

- Hola Axel, decía Will.

- Hola padre.

Tomé mi gafete y salí de ahí rápido.

Ambos subimos a nuestros aviones y los colocamos en la meta de salida.

- ¿Estás lista?, decía Axel por los auriculares.

- ¡Lista hermanito!, es hora de divertirnos.

Comenzó la competencia, para pasar a la siguiente ronda se tiene que llegar los dos jugadores del mismo equipo a la meta, los primeros 6 equipos competirán en la siguiente ronda de eliminación.

Sentía la adrenalina en mis venas, aceleré la avioneta era genial, comencé a mover entre los demás, en poco tiempo ya estaba en segundo lugar

- No te apresures, tómalo con calma, decía Axel.

- ¿En qué puesto vas?

- Soy el cuarto te estoy siguiendo el paso.

- Muy bien, podemos mantenernos a si y usar la técnica 8 del vuelo .

Jamás pensé que mi hermano y yo competiriamos juntos, siempre fue nuestro sueño estar juntos como equipo.

- Mamá soñaba con mirar a sus dos hijos en los cielos, sentí una opresión en el pecho y mis lágrimas caían.

- ¿Que sucede?, decía Axel, ¿estás llorando?

- Algo así

- ¿Vamos, concéntrate hermanita!

- Si lo siento.

- Ya casi llegamos a la meta solo faltan 100 kilómetros.

- Entiendo. Los del equipo naranja acaban de tomar la delantera.

- Tranquila solo sigue el ritmo.

- No voy a dejar que esa estúpida entre primero que yo.

- ¡Por favor, concéntrate con la técnica de mamá!

- ¡Ok, ok!.

- ¿Estás lista?

- Si lo estoy.

- ¡Ahora!

Ambos bajamos cerca del suelo y aceleramos hacia el cielo, después bajamos a una velocidad impresionante para entrar a la meta.

- ¡Uju!, gritaba. ¡Mira como giro, esto es una puta locura!.

Axel se reía. Pase por encima de la tonta de Priscila, entre primero a la meta y Axel entro en cuarto.

- ¡Bien hecho hermanita!, gritaba Axel por el auricular.

Bajamos a la pista, el público nos aplaudía y gritaba.

- ¡Bien hecho!, por eso eres mi favorita, decía Axel abrazandome y alzandome del suelo.

- ¡Ya bajame nos ven!

- Que tiene, que sepan que la chica loca tiene un hermano que la ama.

- Ok.

- ¡Felicidades!, decían los demás participantes.

- Gracias, sonreía Axel, yo estaba sería, la verdad no quería celebrar hasta que ganará este campeonato.

Mire como Priscila golpeaba la avioneta y gritaba como loca.

No pude evitar sonreír, me encantó ver su cara cuando le quite el primer lugar.

- Mira nadamas, eso me pasa por confiado, decia Simon. ¡Felicidades Dayana!

- Gracias Simón.

- La próxima no te la dejaré fácil.

- Eso espero.

- ¡Vaya hermana estás loca!, esos giros son arriesgados que no tienes miedo a morir.

- ¡No!, dije sonriendo.

- Soy Cyndy Guens del equipo Thompson.

- Soy Dayana del equipo McLarn.

- No tuvimos tiempo de conocernos pero brincar al vacío para calificar va pasar a la historia.

- Gracias, te presento a mi hermano.

- Axel. Si tú hermano y yo ya nos conocemos.

Axel babeaba por Cyndy.

Cyndy

- Pensé que no te vería de nuevo.

- Calificamos también, ¿espero verte en la fiesta?, decía Cyndy caminando sensual hacia los del comité.

- ¡Ahí estaremos!, gritó Axel.

- ¿Te la cogiste?

- No claro que no.

- Vamos tienes esa mirada de tonto.

- Solo charlamos y terminamos revolcando nuestros cuerpos en su sofá. Pero no me la cogí.

Caminábamos abrazados, el jurado estaba entregando los pases a la gran fiesta a los ganadores, la fecha y hora de la siguiente carrera.

- ¡Felicidades!, decía molesta la tonta de Priscila.

- Gracias, contesto mi hermano. Yo la ignore.

- Vamos hermanita, no me vas a dar las gracias, que grosera, se nota que tu madre era una vulgar sin educación que no supo educarte a es verdad no tuviste mamá , ¿vivías en la calle!, gritaba burlándose de mí.

Me acerque y Axel me abrazo.

- ¡Tranquila por favor!.

- ¡Que me vas hacer mugrosa, atrévete!, gritaba.

- ¡Ya cállate Priscila!, gritó Will.

- ¡Que!, ahora defiendes a esa bastarda, te recuerdo que no es tu hija solo la hija del amante de tu ex.

Yo estába roja del coraje y forcejeaba con Axel para irme encima de su estúpida cara.

- ¡Vámonos ya!.

- ¡La voy a matar!

- Cállate y camina.

Cuando llegue al autobús, Axel me encerró destruí todo

- ¡hija de p....! gritaba como loca.

Claro que la odio, cuando cumplí 15 años recibí un regalo de Will era ropa llena de escremento, con una nota que decía felicidades bastarda, te desea la verdadera hija de Will.

Después a mis 17 mi tía me llevo a cenar a un lindo restaurante, era algo caro y para mí suerte me tope a Will y sus princesas, ella cumplía años dos días antes que yo, así que papá le regaló su primer auto y lo hicieron público.

Le pedí a mi tía que nos fuéramos, ella me dejó en la puerta del restaurante mientras pagaba la cuenta.

Mientras estaba mirando a la calle, ella y su madre arrojaron desechos de comida encima de mi, mientras se reían de mí, no supe cómo y tomé una silla para golpearlas, solo pude rozarle la cara a su madre, por qué Will me detuvo.

Me demandaron, estuve medio año en un reformatorio de menores.

Will me saco por qué Axel se lo pidió.

El tiene mucha influencia en el gobierno, después me enteré que el fue el que pidió que me encerraran para que yo aprendiera mi lección.

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