Ambos se habían dormido por unos instantes, pero Naoki no toleraba el frio que sentía en aquel entonces, sus ropas húmedas le estaban enfriando el cuerpo y la reacción que esto producía le hacia sentirse gélido, sintió deseos de quitarse todos esos trapos y sentir calor, pero estaba cansado, algo mareado y lo peor de todo en la casa de una desconocida.
El celular sonó durante un buen rato, termino contestando de mala gana, cayo en cuenta que era su hermano Yuuki que le llamaba muy preocupado, luego de un intercambio de palabras el muchacho se había calmado y Naoki le había aclarado que volvería cuanto antes.
Cuando colgó volvió a dormir.
Leonell escuchó la conversación y se detuvo a prestarle atención al muchacho, que no dejaba de tiritar.
La vela se había consumido del todo y la luz aun no regresaba, se levantó y se dirigió al closet, con el encendedor comenzó a buscar un polerón que solía usar de pijama cuando le daba frio, era grande y le quedaría bien a Naoki, logro encontrarlo afortunadamente, avanzo hacia la cama y le despertó.
-vamos quítate eso húmedo y ponte esto-
- que dices?- dijo sorprendido y avergonzado- yo usar ropa de mujer ¿estás realmente loca?-
- nadie va a verte, esas tiritando y si sigues con esa ropa vas a enfermar, recuerda que debes correr en unas horas más-
Naoki sin pensarlo le tomó del brazo y le atrajo hacia si. Ella de un empujón quedo sobre la cama, muy cerca del muchacho.
- Escucha Rionel o como quiera que te llames.-
- Leonell…-
- Leonell- corrigió sin tomarle importancia- no correré grábatelo bien, no volveré a correr, nunca…nunca más.-
- Te esforzaste mucho para pagar la inscripción a ese campeonato, lo escuché de tu amigo…-ella le estaba entregando el polerón mientras el le soltaba el brazo.
Terminó aceptando la prenda, se quitó rápidamente la ropa que le cubría el torso y se puso el polerón, agradecía que estaba oscuro y que el ridículo se lo estaba ahorrando.
- Tienes razón trabaje muy duro para concursar en esa carrera…-
- ¿Porque no correrás entonces?, dijiste hace unas horas que la motocicleta había matado a tu…amigo?-
Hubo un eterno silencio entre ambos, Naoki con un tono melancólico se decidió a contar la historia:
- Habíamos quedado de juntarnos en una carretera no frecuentada a los pies de un cerro…yo corría junto a Satoshi…mi compañero de infancia…siempre compartimos los mismos gustos, era muy agradable conmigo…en ese momento, tanto él como yo, andábamos en nuestras motocicletas, íbamos a tener una carrera. Siempre competíamos por quien pisteaba mejor…en ese entonces, Satoshi había arreglado su motocicleta, y le había cambiado llantas; asique venía del taller. Yo deseaba a toda costa probar su nuevo Nitro…montamos las motocicletas respectivas, calentamos los motores y a Satoshi se le ocurrió la genial idea de intercambiar motos. El decía que podía ganarme incluso en mi motocicleta, que la suya me daría ventaja, acepté el reto e intercambiamos vehículos...- Tomó aliento un instante haciendo una pausa .
Leonell se cubrió con las mantas y se quedó escuchando atenta al muchacho, su voz estaba muy sentimental, podía sentir los recuerdos aflorar y el momento que Naoki estaba relatando, se estaba reviviendo en su interior. No quiso interferirle, es más, sintió que debía desahogarse.
- ...Ese día hacia un día formidable, no habían autos cerca y estábamos listos y ansiosos cada quien sobre la ronroneante pistera, como hacíamos siempre en cada carrera, dejábamos unos segundos para decir alguna tontería...su motocicleta era genial yo iba muy tranquilo, al comienzo íbamos parejos, la pista estaba libre, de pronto Satoshi me pasó y me gritó “tortuga!” él giró porque venía una curva... pero, advertí que la tomó demasiado rápido, le grité que bajara la velocidad, le hice señas, me estaba mirando por el espejo retrovisor…aceleré y me arriesgué a tomar esa curva a su velocidad:
-¡ Estás tomando mal la curva baja la velocidad tarado!- le grité, mientras me esforzaba por alcanzarle.
- Se trabó el cambio…- me respondió calmo, mientras movía el pie intentando pasar a cuarta.
-¡¡Frena, frena!!- le grité,
Sentía que el corazón me bombeaba a gran velocidad, disminuí la velocidad, esa curva me resultaba imposible tomarla. Si Satoshi paraba, la motocicleta saltaría lejos y tendría un gran accidente. Preferí seguirle intentando alcanzarlo, mantuvo la velocidad durante unos minutos y fue disminuyéndola, en ese momento estaba seguro que Satoshi frenaría y nos detendríamos.
No vimos venir que por ese lugar estaba la famosa curva del diablo, es pronunciada y peligrosa... se le descontroló la moto y no logró tomar bien la maldita curva, pasó cuesta abajo con la motocicleta…
Yo…no podía creer que eso estuviese sucediendo, me detuve, corrí y advertí que había caído unos 10 o 15 metros, marqué desesperado el móvil, pedí una ambulancia y bajé, no se como lo hice…bajé. La pistera había saltado lejos y Satoshi estaba tirado mas allá sobre piedras y tierra.
Mi mente pensaba miles de cosas, ¡Ese habría sido mi destino si yo hubiese usado la motocicleta!
Intenté auxiliar a Satoshi, estaba sangrando y su respiración era escasa, me miro y tomó mi mano con fuerza…yo lloraba de desesperación, le dije que pronto llegaría la ambulancia, que se quedara quieto…
El desgraciado me sonrió y me dijo “ *todo va a estar bien, no llores*” cerró los ojos, yo le hablaba, le gritaba y le decía que no se rinda, no se cuanto tiempo pasó, se que dos paramédicos, me sacaron a la fuerza le pusieron un collar cervical y lo montaron sobre una camilla, me sacaron de ahí, me revisaron en la ambulancia, tenía varios cortes y rasjuñones producto de haber bajado por el cerro... observé como llegó un helicóptero y lo sacaron rumbo al hospital…Estaba en shock, me llevaron al hospital, me pusieron suero y luego me dieron el alta. Al instante llegó su familia, ellos lloraban y se abrazaban entre sí - ha muerto Naoki...Satoshi ha...-
Yo…no podía…no podía creer que esto…estuviese ocurriendo…- bajó la vista mientras sentía deseos de haber hecho algo para salvarle, se sentía frustrado y el haber recordado el accidente, le había traído el mismo dolor de aquel entonces.
-entiendo perfectamente como te sientes…- dijo Leonell luego de pensar demasiado bien si tocar el tema.
-lo dudo, si hubieses estado ahí sabrías de lo que hablo…-
-yo…vi como murieron…mis padres…-
Aquello llamó poderosamente la atención del muchacho, pudo observar como la tristeza que portaba, se compartía en esa mujer. Se sintió avergonzado de su egoísmo…Pero a la vez sintió curiosidad de saber de que forma había presenciado tal catástrofe. Luego de un leve silencio, levantó la vista, era curioso, pero no era primera vez que podía ver a la perfección encontrándose a oscuras, observó a Leonell, ella le miraba firme mientras apretaba con fuerzas uno de los cojines. Se decidió a preguntar: -¿ Cómo fue?...-
-¿Te interesa escucharme? O solo lo haces por cortesía…? No toco este tema…me duele mucho conversarlo…por ende si no te interesa...-
- ¡Me interesa!- interrumpió- me interesa, porque siento que no estoy sufriendo solo…-
- Bien…te contaré…Habíamos salido de paseo en auto, mi hermanito Edward, yo…mamá y papá…éramos una familia feliz y algo adinerada, yo estaba estudiando japonés en el instituto de ingles-japonés de mi ciudad…mi padre trabajaba para una importante compañía y se había enterado que estaban haciendo lavado de dinero dentro de la empresa, comenzó a recibir exhortaciones de dinero para guardar silencio, pero el se negó…Luego eran amenazas de muerte, se trataba de una suma muy grande de dinero…
Nosotros no sabíamos obviamente de esta situación, mi padre no nos había contado…lo supe luego… durante los funerales…
Aquella vez salimos todos de paseo, decidimos pasar a un servicentro a comprar algunas galletas y bebidas para el viaje, cuando nos sentamos todos en el auto…yo me olvidé del celular en la mesita de los hot-dog por lo cual me devolví a buscarlo, cuando salí mi padre hizo andar el vehículo y una explosión gigante me lanzó contra los vidrios del local…El automóvil estalló…se prendió completamente…mi familia falleció en el acto.- su voz comenzó a quebrarse, unas lágrimas se asomaron por sus ojos.
Naoki se le acercó y le abrazó, ella se sorprendió mucho por aquella reacción.
- Tú…-
- ...Te menosprecié, discúlpame…-
- No quiero tu lástima, estoy bien...-
- No es por eso…solo que me hubiese gustado…recibir un abrazo, por eso te lo doy yo a ti.-
Ella guardó silencio y disfrutó del abrazo, al cabo de unos minutos se relajó y sintió el cansancio del día aflorar en su cuerpo. Se soltaron sin decir nada, ambos se acomodaron en la suave cama y se dispusieron a dormir.
- Gracias Naoki-kun-
- Buenas noches-
- Oyasumi nassai-
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 124 Episodes
Comments
Pelao
satoshi habría sobrevivido si se lanzaba de la moto, habría quedado machacado pero no muerto :( aunque posiblemente Naoki podría haberlo atropellado o incluso tmb haber sufrido un accidente, y Leonell....nada que hacer, muy horrible debe haber sido aquel accidente
2023-06-22
1
clauditah
que heavy la historia de ambos 😢
2022-09-02
7