Prólogo

Maya

Mi vida siempre ha sido una feliz y agradable, exceptuando es terrible accidente donde perdí a mis amados padres. Cuando yo apenas tenía 12 años, ellos murieron en un terrible accidente de auto. Dejándome huérfana y al cuidado de las únicas personas que me quedaban en el mundo.

Mi tía por parte de madre, cuando todo esto pasó, me acogió en su casa sin siquiera pensarlo dos veces y me brindo el amor que una madre le brinda a sus hijos. Ella y mi tío nunca me hicieron sentir menos, siempre nos enseñaron a mi primo y a mí a querernos como hermanos. Y a respetar y a ayudar al prójimo.

Mi primo Marcos siempre estuvo ahí para mí, él se convirtió en mi confidente, mi tapadera y hasta en mi novio falso cuando era necesario. Y aunque nos llevábamos cuatro años de diferencia, eso no nos impidió ser muy unidos. Ya estando en primer año de preparatoria conocí a mi mejor amiga, casi como mi hermana. Laurent se convirtió en una parte fundamental de mi vida, ya que siempre pude contar con ella en todo momento.

Cuando ella me presento a su familia, todos fue muy diferente, ya que con ellos siempre me sentí como en casa. Juntas fuimos a la misma universidad, solo que ella tomó administración y yo diseño. Aunque actualmente soy modelo, aun así siempre fuimos las mismas amigas unidas y locas. Aunque yo más que ella.

De mi vida privada no hay mucho que contar, ya que aún no he encontrado el amor. !¡Oh eso es lo que pensaba¡! Siempre que he tenido la oportunidad he salido con chicos lindos y guapos, de esos que solo sirven para una noche. Pero no es algo que me satisfaga como mujer, ya que yo soy de las que le gustaría formar una familia.

Sin embargo en lo que eso sucede me puedo dedicar a cuidar y malcriar a mi sobrino ahijado.

Hace poco menos de un mes la vida de todos se vio afectada por la llegada de Santiago Vólkov. Él cuál al principio me caía como patada en los ovarios, pero con el paso de los días el muy idiota sexy se ganó mi confianza. Se preguntarán ¿En qué afecto esto en mi vida? Pues simple, me afecto el haber conocido a uno de sus hermanos, Darío Vólkov para ser exacta.

Cuando lo vi en aquella reunión en su mención, con su pantalón de vestir blanco ajustado y su camisa negra desabotonada, dejando ver parte de su fuerte pecho. Sentí que el aire me faltaba y los nervios me consumían.

Pero el muy imbécil solo me ignoro olímpicamente, cosa que trate de entender, ya que el objetivo de estar reunidos aquí, es para que Ángel conozca a su familia. No para estar ligando.

Él me pareció un hombre tierno y amoroso por como trataba al pequeño. Cosa que no me lo demostró en su debido momento. Pero bien dicen, "nunca digas nunca". Oh "de esa agua no beberé" porque el karma viene solo detrás y no espera para hacer que te arrepientas __________________________________

Maya

Darío

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