Los Celos.

Narra Kathleen.

Anoche me costó consiliar el sueño después de atender a la pequeña Lucciana, esa niña es tan bella que solo provoca abrazarla y consentirla a cada instante . Después de cambiarla , darle mimos y dormirla la acosté en su cunita y me dispuse a marcharme , justo en ese momento me topé de frente con Maximiliano << está bestia me acelera el corazón de una manera inexplicable>>. Quedé sorprendida cuando esos bellos ojos grises me miraron pero esta vez sin ira , sin odio y sin malicia , en sus ojos había un brillo distinto, un brillo de agradecimiento y sí, eso fue lo que paso, de sus lindos y tentadores labios solo salió un tierno, "Gracias" , el cual solo respondí asintiendo con la cabeza y me marché a mi habitación.

Esta mañana al despertar decidí salir de esta habitación que ya me tiene ahogada y decidí bajar a la cocina a ayudar a las mujeres a preparar algo y ver como sigue la pequeña Lucciana.

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Narra Maximiliano.

Despertar con mi niña entre mis brazos es mantener viva esa pequeña parte de mí que aún no se ha convertido en Bestia , es que mi niña lo es todo para mí, por ella daria mi vida si hiciera falta.

Me levanto de la cama con mi Principessa sonriendo y bajo directamente a la cocina para buscar a nana y entregarle a mi niña, llegando a la cocina me encuentro a todas las mujeres de la casa reunidas cotillando entre ellas y no me parece extraño porque desde que tengo uso de razón así son todas mis mañanas lo único diferente aquí es que mi bruja está allí y no puedo negar que la cabrona está buenísima y sonriendo se ve bellísima.

Cuando llamo a nana para que reciba a mi niña me tenso un poco porque quien me la recibe es mi bruja y siento un cosquilleo por todo el cuerpo, solo fruncí el ceño, en el momento que me la recibe entro en un trance hipnótico mirándola como trata a mi niña haciendo que vuelva aparecer mi deseo de tenerla , llegan mis hermanos sacándome del trance e inmediatamente me voy a mi habitación.

Salí de casa junto a mis hermanos a solucionar el problema con el abogado de los Salazar. Esta familia no me agrada mucho debido a que siempre han tenido problemas con la mafia Europea pero no puedo negar que cuando se trata de mercancía buena y fresca ellos son los mejores.

Llegamos al club y nos dirigimos a la oficina donde al entrar me encuentro a una Sara desnuda abierta de piernas en mi escritorio, tengo que aceptar que la chica es una diosa , con pasos lentos me voy acercando y cuando ya la tengo cerca a mi cuerpo la tomo por el cuello trayendo la hacia mí la beso salvajemente y ella corresponde cada beso, la levanto y la inclinó en mi escritorio y sin pedir permiso me adentro en ella con rudeza, ella suelta un gemido que me enciende mucho más , le doy una estocada fuerte haciéndola gemir como loca , sigo dándole estocadas cada vez más fuerte y rápidas ,la agarró del cabello y le jalo la cabeza hacia atrás, cuando ya estoy listo para correrme la hago arrodillar, ella me mira y sonríe toda sumisa , se levanta e intenta darme un beso el cual rechazo y le digo que se marche, ella solo me mira decepcionada, asiente con la cabeza, recoge su ropa y se va de mi oficina.

Bajo al sótano con mis hermanos y mis primos para hablar con los informantes en la finca de los Salazar. Hemos descubierto que los bastardos desean nuestras rutas y dejar de ser narcos para ser mafiosos pero lo que ellos no saben es que así no se trabaja aquí, los clanes de las mafias son heredadas por familias, no es porque solo lo desean y ya lo tendrán .

Mis hermanos no consiguieron ninguna información valiosa por los momentos, yo ya no me puedo encargar porque estos hijos de perras maratón a los informantes << luego dicen que el desquiciado soy yo >>, así trabajan ellos , sin paciencia, yo no gozo de mucha pero utilizando mis métodos siempre consigo respuestas , pero en esta ocasión tendremos que esperar a conseguir información por otros medios.

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Narra Kathleen.

Llegué a la cocina y estaban todas las féminas de la familia Fiorelli reunidas allí , después de ayudar a preparar el desayuno y de reír escuchandolas discutir por cuál de los actores turcos es mas lindo y está más bueno llegó Maximiliano con la niña buscando a nana, pero como nana estaba ocupada yo le recibí a la pequeña Lucciana para que él se pudiera alistar ya que había escuchado a los hermanos Fiorellis decir que saldrían temprano para ir a atender unos asuntos de carácter urgente, al recibirle a la niña pude notar que mi presencia lo hizo tensar lo que me alegro un poco al saber que lo incómodo con mi presencia, luego de darme a la pequeña se marchó .

La joven Isabelletta llegó a mi habitación levantándome de la cama y metiéndome al baño diciéndome que necesitaban salir y querían que las acompañará y no aceptarían un no como respuesta y sin más nada que hacer me levanté , duche y aliste , colocándome un vestido rosa vieja de seda con mangas tres cuartas ajustado hasta la cintura y acampanado de la cintura para abajo , recogí mi cabello rizado en una coleta alborotando mi cabello para que quedara más abundante y unas zapatillas de brillantes, — sí, lo sé, no es muy elegante pero así soy, sencilla , básica—. Salgo de mi habitación encontrándome con una Isabelletta dando gritos diciéndome lo linda que estaba , reí con ella porque es que es una chica muy escándalosa ,ya entiendo porque dicen que los italianos son los latinos de Europa ,salimos de casa y afuera nos esperaba una camioneta para llevarnos al club donde trabaja Maximiliano.

Dentro nos esperaba la señora Luccía y la señora Isabella que al verme empezaron a elogiarme y yo con vergüenza agradeciendo sus elogios, la señora Luccía me iba diciendo que al llegar al club por nada del mundo me acercara a una tal Sara ,que para ser sincera no puedo entender cómo ellas siendo unas mujeres tan cariñosas y amorosas puedan odiar tanto a una persona.

Llegamos al club e inmediatamente Isabelletta baja corriendo a los brazos de sus hermanos Luccas y Massimo quienes nos estaban esperando en la entrada , yo caminé ojeando el lugar y dando sonrisas educadas a los empleados con los que me topaba y estos saludaban , me llamó la atención una mujer rubia boloutosa que estaba en la barra la cual me miraba como si quisiera matarme , las señoras se sentaron en una mesa alejadas del resto a esperar a Maximiliano para llevarlo con ellas a comprar unas cosas para la pequeña Lucciana.

Yo me acerco a la barra y le pido una botella de agua al bartender el cual sonríe y asiente con la cabeza , me tense al sentir la mirada y la actitud con la que esa mujer se me acercó dándome el agua:

Sara : así que eres tú la puta que duerme bajo el mismo techo que mi hombre —arqueando una ceja—.

Kathleen : —sentí una ira inmensa al escuchar todo eso pero sonreí con malicia — Disculpa y ¿ tú eres?... —hago un gesto como recordando quien era— aah debes de ser la mascota rabiosa de la que me informaron no acercarme.

Sara : —esta me miró con odio y se acerco más a mí — soy la mujer de Maximiliano así que dime, zorra, ¿ qué diablos haces viviendo bajo el mismo techo que mi hombre?

Kathleen : —la miró y sonrió de lado — ah con que es tu hombre... ahora entiendo porque es una bestia con las mujeres , es que por encima se te nota la falta de amor propio y de sobra la vida alegre, no te juzgo créeme, pero si él fuera tu hombre querida , entonces no estuvieras aquí vendiéndole felicidad a otros trogloditas ya que un hombre que ama y valora a una mujer no deja que otros ni se la miren y este creo que no es tu caso — sonreí con ironía—.

Ella se acerca amenazante y con un cuchillo en mano mirándome fijamente a los ojos.

Sara : —se pega a mí señalandome con el cuchillo —podría matarte aquí ahora mismo por perra y altanera pero no quiero tener que limpiar, pero cuida tu boquita y como me hablas maldita perra porque créeme que esta me las pagarás , vete y deja a mi hombre en paz no te lo volveré a decir... así que ahora levanta tu maldito y asqueroso trasero y sal del club antes de que la ira me consuma.

Kathleen : —Sonreí irónicamente acercándome más a ella— Querida no te temo pero ni siquiera un poco y tus amenazas tendrán que esperar porque ya tengo muchas antes de las tuyas y para tu información no soy yo la que está con tu hombre... no me puedo ir porque ese que dices que es tu hombre es el que no me deja ir , así que si tanto te molesta que yo viva con él entonces habla con esa Bestia y dile que me deje ir y yo con gusto y placer me marcharé, así quedará solito para tí y te podrá llevar a su casa.

Tirándole un guiño intenté alejarme cuando de repente sentí su agarre en uno de mis brazos , en fracciones de segundos me soltó y me abofeteó gritándome que Maximiliano era su hombre, las señoras Fiorellis llegaron a mi lado mirando con ira a esa desgraciada loca, yo estaba furiosa pero no quise alterarme por respeto a las mujeres y porque yo nunca me rebajaría a pelear por un hombre.

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