Esperanza.

Narra Luccía.

Maximiliano siempre fue un niño amoroso, creció y se volvió muy protector con sus hermanos pero más con la pequeña isabelletta, nunca le tolero que ningún hombre gritara o maltratara a una mujer. Pero ese niño cariñoso, amoroso y caballeroso me lo quitaron hace ya más de dies años cuando esa Maldita mujer, Carlota, lo engañara de muchas formas y como si no fuera poco intento vender a su hija, desde ese día se volvió más frío con las mujeres fuera de esta familia y aunque a veces es cariñoso con nosotras me preocupa el que siempre este enojado, se ha vuelto un hombre frío, distante, orgulloso e irritante pero lo que intentó hacer hoy rebasó la copa de mi paciencia con él.

Hace unos dias trajeron a una joven a la casa , pensé que era la asquerosa de Sara, la puta que tiene Maximiliano en el club, pero cuando le pregunté a mis otros hijos me dijeron que era una joven que le robaba el sueño y la tranquilidad a mi Maximiliano, no lo podía creer porque desde hace tiempo que no veía a mi hijo inquieto por una mujer . Le lleve la comida a la joven una vez y mis esperanzas se hicieron presente cuando la escuché discutir con Maximiliano <>, es que nunca ninguna mujer lo había rechazado y mucho menos había tenido el valor de enfrentarlo, pero ella lo hizo y esa actitud fue la que me golpeó la puerta de la esperanza porque mi hijo en el fondo solo necesita el amor de una buena mujer y la seguridad de que no le fallaran, de que su amor solo sea para él , sentir que le pertenece a alguien y que ese alguien solo le pertenece a él.

Después de lo sucedido hace unos momentos, todos nos reunimos en el comedor para cenar como lo había planeado. Envié a isabelletta por la chica para que bajará a cenar con nosotros y así poder trabajar en la búsqueda de ese amor que en el fondo tanto anhela mi hijo.

Estando todos sentados vemos bajar a Isabelletta con la joven cabi bajas y algo tímida ante la presencia de mi familia, su cara se sonrojo al mirarnos a todos allí sentados pero al ver a Maximiliano en la mesa le dedico una mirada de querer arrancarles los huevos y mi hijo le devolvió la mirada de la misma forma , me atrevería a decir que se gustan aunque se odien.

La joven llego e Isabelletta le indico que se sentara junto a ella quedando cerca de mi querida nieta Lucciana, la cual ya se había quedado dormida después de tanto llorar , su mirada curiosa se deposita en Lucciana quien al ver a la niña la hace mirarnos a todos en busca de saber quiénes son los padres de la niña.

Luccía : —la miró con cariño y le sonrió — Buenas noches cariño , ¿te encuentras mejor ?

Kathleen : — Ella sonríe y afirma con la cabeza — Buenas noches señora Lucía, sí mucho mejor muchas gracias.

Luccía : — le devuelvo el gesto — Que bueno mi niña y cuéntanos ¿de dónde eres? ¿a qué te dedicas?

Kathleen : — se sonroja y se acomoda en la silla — Soy de Venezuela pero ya tengo 5 años aquí , soy maestra de preescolar y de niños especiales... llegué aquí a los 18 y pues me encantó este país y decidí quedarme — hizo una pausa dirigiendo su mirada a Maximiliano — aunque pensándolo bien, me hubiera ido al polo norte sí hubiera tenido una idea del infierno que me esperaba aquí — mire a mi hijo y este tenía el ceño fruncido y una cara de querer matarla —.

Luccía : — sonreí y mire a mi esposo quien no paraba de hacerme seña para que no siguiera con lo que estaba tratando de hacer — ooh , que bueno querida , bueno tampoco digas eso porque entonces yo no hubiera tenido la oportunidad de conocerte... eres una jovencita muy hermosa , ya entiendo porque mis hijos —dirigí mi mirada a los tres — desean tanto irse de vacaciones a Latinoamérica — Sonreí guiñándole un ojo —.

Ella sonríe y Maximiliano la mira, pero está vez con una mirada distinta , con una mirada de alegría de esas que dicen que les fascinó lo que vio y es que la niña se ve muy linda cuando sonríe. Mi marido empieza a hablar de lo bonito de Latinoamérica y de lo agradable que fue estar en Venezuela. Pero lo que más nos sorprendió de ella fue que todo el tiempo que estuvimos hablando lo hicimos en italiano, pues ella sabía nuestro idioma, algo que hizo que mi hijo sonriera de lado al verla reír con las ocurrencias de sus hermanos y su padre.

La cena transcurría muy tranquila y agradable, de pronto mi querida nieta empezó a llorar nuevamente. Allí note algo lindo y fue que cuando la niña comenzó a llorar ella que estaba cerca de la niña la agarró sin pensarlo , su instinto hizo que no dudará y que solo la agarrara , Maximiliano le dio una mirada celosa y fulminante mientras ella hizo caso omiso de sus miradas y de su presencia , nonna se levanto para cargar a la niña pero ella le dijo que está bien.

Kathleen : —Ella se levantó con la niña en brazos y la miraba con ternura — Una pregunta ¿ qué le pasa? Se que lleva días llorando —formuló sin mirarnos —.

Luccía : — la mire preocupada — no sabemos, la llevamos al padiatra y el idiota nos dijo que no tiene nada que seguro son los dientes que le están por salir o puede ser la etapa del apego de la madre.

Kathleen : — me dio una mirada confundida — ¿la etapa del apego de la madre? Pero será idiota... ¿ Y en donde está la mamá? — dirigió su mirada hacia mí y yo hacia Maximiliano, ella lo noto y dirigió la mirada a él — disculpen no tienen porque responder... Lo siento.

Maximiliano : — él la miró serio — muerta... Muy muerta, solo me tiene a mí y es más que suficiente para ella.

Kathleen : —ella lo miró con tristeza y arrullo a la niña junto a su pecho, la niña dejó de llorar y solo sollozaba —yo no tengo hijos pero sé que todo niño necesita una madre porque hasta los más idiotas tienen derecho a una... podría subir a su habitación y tratar calmarla, como dije no soy madre, ni mucho menos pediatra pero tengo algo de experiencia — mi hijo me mira con cara de pocos amigos y yo le dije que sí —.

Ella se fue a la habitación con nana e Isabelletta , nosotros nos quedamos en el comedor esperando a que ellas llegarán o llamarán para saber si la bebé estaba bien, pasaron unos minutos y de repente vemos a Isabelletta bajar las escaleras riendo y tapando su nariz buscando una bolsa para la basura y algo de aromatizante. Los gritos y llanto de la niña cesaron y al rato las tres bajaron las escaleras, Kathleen con mi pequeña Lucciana encima, nana e Isabelletta venían riendo a carcajadas mientras Kathleen hablaba con mi niña y está reía con ternura , la cara de mi hijo cambio de semblante al mirar a su niña reír con esa joven tan extraña para ella, pero eso solo le dio una alegría a mi querido hijo dónde lo demostró con una sonrisa sincera y picarona .

Luccía : — las mire sorprendida y curiosa a la vez — ajá y usted dos de que se ríen, a ver cuéntennos para que nos riamos todos — mire a Isabelletta y a Nonna —.

Isabelletta : — reía y miraba a Kathleen con agrado — Mamá es que nosotras llevamos cinco días enloqueciendo porque no sabíamos que tenía la pequeña Lucciana y resulta que solo no podía hacer popo bien —reí tiernamente—.

Kathleen : — Ella beso a Lucciana en la mejilla y me miró — La niña solo hizo popo hace 2 días según me cuenta nana, pero no hizo lo normal por lo tanto solo tenía cólicos y dolor de barriga, le introduje un supositorio — abrazo a mi nieta y le pidió perdón dejándole un beso en la cabeza — y bueno el desastre allí arriba no fue nada normal — sonreía avergonzada— pero ya esta tranquila ahora solo hay que darle de comer y averiguar que es lo que la pone dura y le provoca los cólicos — miró a la niña con una mirada tierna pero preocupada —.

Eso me lleno de emoción y no pude evitar abrazarla delante de todos, un gesto que hizo que todos se me quedarán viendo como si fuera una extraña. No me importó sus miradas ya que ella correspondió el abrazo aún y con mi pequeña nieta en sus brazos.Pero lo que más me gustó fue ver la tierna mirada de mi hijo en su rostro.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***