La noche

...Capitulo 1...

(Narra Louis)

—Louis Tomlinson, queda arrestado por el asesinato en primer grado de la señorita, Valentina Montilla, tiene derecho a un abogado, si no puede pagarlo se le asignará uno del estado, tiene derecho a permanecer en silencio, todo lo que diga puede ser usado en su contra —ahí empezó el verdadero desastre en mi vida.

Algunas horas antes...

Hoy la niña más hermosa del mundo cumple 15 años y es hermoso acompañarla en este día tan especial, quizás pensarán son dos niños para ser novios, pero nos respetamos bastante, siempre vamos a comer, al cine y a la casa del árbol detrás de su casa.

Prometimos que luego de partir su bizcocho esta noche iríamos allí, pero sus primos que estaban en la fiesta no la dejaron ir, así que fui yo solo a buscar su regalo que lo tenía escondido ahí para que sea sorpresa; todo se encuentra tan oscuro que es casi imposible ver, enciendo la linterna de mi teléfono para alumbrar mi camino, cuando estoy terminando de subir, escucho unos pasos detrás de mí, pensé que era Lorena que había decidido seguirme, pero no. Era Valentina una amiga en común, ella tenía toda la intención de subir, así que me dispuse a ayudarla, pero cuando estaba a punto de subir sus pies se enredaron en el vestido y sus manos resbalaron de las mías y cayó en picada al suelo.

Alumbro hacia abajo con mi teléfono y sobre su cabeza había un gran charco de sangre, no puedo explicar el desastre en que se convirtió esa noche, pero desde ese día cambio para siempre y puedo decir que a pesar de haber sido un incidente, eso me costó parte de mi vida. La voz de mi padre hace eco llamándome y bajo rápidamente, su cara es totalmente de asombro y confusión, lleva sus manos hasta el pulso de ella, toma el teléfono y llama a emergencias, el papá de Lorena que también se incorporó al incidente, escuché como hablando por teléfono le dijo a su esposa que entrara a Lore a la casa y por nada del mundo la dejara salir. El incidente de esa noche, me costó ver a Lorena por última vez desde la parte trasera de un auto.

Tres años después de estar en una correccional para menores, pagando por un delito que no cometí, robándose parte de mi vida y mi adolescencia, salí de ese lugar que me convirtió en un hombre muy diferente al que llego, cuando entre ahí era solo un niño lleno de temores, a mi padre no le valieron influencias y mucho menos dinero y es claro, el padre de valentina era uno de los mejores jueces que habían, arreglaron todo a su conveniencia, dijeron que la empuje para que cayera y pues no habían testigo, la única era ella y murió minutos después de la caída. Cuando salí de ese espantoso lugar, mi padre me esperaba en la salida, me dio un fuerte abrazo y empezamos a conducir.

Una hora después estábamos llegando al condominio donde vivíamos, sentí una opresión en el pecho conforme el coche avanzaba, me faltaba la respiración al recordar, todo se veía completamente diferente, el portón de mi casa se abrió y ahí estaba mi madre, me abrazó, lloraba y daba gracias a Dios de que estuviese ahí con ella. luego de hablar con ellos subí a la recamara y todo se encontraba exactamente como lo deje, eso me lleno de satisfacción, no me gusta que toquen mis cosas.

Observo el balcón del que muchas veces solía llamar a Lorena y me dedico a mirar hacia su casa, todo se ve completamente solo, pero el portón de su casa se empieza a abrir y lo primero que enfocan mis ojos es una larga cabellera anaranjada salir de un coche gris e inmediatamente supe de quien se trataba.

La llame por su nombre, sentía tanta emoción de verla, pero a la vez tanto miedo de que pensaría de mí o que le habían dicho, la quiero, es uno de esos amores que no necesita contacto piel con piel, sino más bien esos que se internan en el alma, en el corazón y la mente y te hacen perder la cordura; se gira y comienza a buscar desde donde proviene el llamado, así que vuelvo a gritarle y sus ojos inmediatamente se dirigen hacia mi balcón, su mirada es de confusión, así que bajo lo más rápido que puedo y llego hasta su casa.

Su mirada es neutra, pero puedo notar un ápice de emoción en ellos, le doy un abrazo al cual ella corresponde y hablamos un rato y por lo que dice sé que le mintieron acerca de todo y sé que cree que la abandone a pesar de haberle prometido nunca dejarla.

Ha sido duro ver en lo que se ha convertido, verla agarrada del brazo de una chica y que a su lado no esté yo, pero yo he hecho lo mismo no puedo reclamar. Desde que regrese todo este tiempo me la he pasado molestándola, haciéndonos bromas pesadas y gritando que no nos toleramos, pero a quien engaño si es mi debilidad.

Sin embargo, en la actualidad estoy con un chico, fue algo que experimente en la correccional ¿Qué lo quiero? Sí, pero no es un sentimiento comparado al lugar que ella ocupa en mi corazón. La vida enseña que se debe vivir, aunque se esté muriendo por dentro.

El día de hoy será un día revolucionario en el instituto, haremos la despedida de mi novio ya que en una semana se irá a los estados unidos a estudiar medicina; todo el instituto está invitado a excepción de Lorena y Claudia, que es su novia, no es el dúo que más soporté en mi vida para ser completamente sincero, es común encontrarlas besuqueándose en cada rincón.

Estuve todo el día en la plaza buscando el mejor traje, aunque para ser sinceros no es tan necesario porque cuando inicia la fiesta, todo se va por un tubo. Fui a casa de los padres de Camilo, mi novio, para arreglarme allá, nos tardamos menos de dos horas y nos dirigimos al club donde se efectuará la fiesta.

Al llegar me tomo el primer shot de tequila al ver mis archienemigas muy entretenidas en la barra con el bartender.

—¿Qué hacen aquí coladas? —pregunte.

—No estamos de coladas, esto es un club y aquí entra quien quiere —responde Claudia con una sonrisa pícara en el rostro.

Con toda la furia del mundo me retiro no sin antes levantarle el dedo medio.

—¿Se puede saber por qué rayos ellas están aquí? —le pregunto a Camilo.

—No te alteres amor y solo disfruta.

En eso se están formando todos para el juego del que más tome y luego de muchos, pero muchos shots, como finalistas quedamos Lorena y yo.

Luego de algunos cincuenta shots y obviamente el ganador ser yo, solo recuerdo haber chocado mi boca con la de alguien, más tarde golpes y mi nariz golpeada por unos fuertes puños.

[•••]

—En mi vida vuelvo a tomar, lo juro por mis pantuflas de Bob esponja —lo primero que veo al abrir mis ojos es a Camilo al pie de la cama con cara de muerto resucitado.

Me levanto como mi hermosa resaca me lo permitió y me dirijo hacia mi novio para saludarlo.

—Eres tan descarado Louis Tomlinson, luego de todo lo que me hiciste anoche tiene el descaro de querer saludarme, no te lo permito.

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