Cumplir la promesa

...RODRIGO...

Visite a Eva, talvez sea estupido, pero quize olvidarme de Ana por un momento, no me acoste con ella, simplemente queria hablar con ella, cosas de su vida, la escuche sin ningun problema, necesitaba despejarme un poco.

Llegue a casa cerca de la anochecer, estube un momento en el despacho y subi a ver a mi tía.

-Hola tía ¿cómo estas?-- entro a la habitación

-Hola Rodrigo, casi te encuentras con Ana

-¿Estuvo aquí?-- pregunto sorprendido

-Si, estuvo hace un momento pero ya se fue, hablamos un poco

-No quiero verla, no la soporto

-No te preocupes, ya no la volveras a ver-- menciona

-¿De qué hablas tía?

-Ana se casara esta misma noche con Carlos

-¿Qué?-- sorprendido

-Si, ella me dijo que lo hacia solo para que te des cuenta de que ella, no es lo que tu piensas-- seria-- y que con ese acto, tu puedas quedarte con todo la fortuna Ferrándiz, creo que eso demuestra que ella no es ninguna interesada como dices tú, y ahora-- se acomoda en la cama-- disculpame, pero quisiera descansar

-Esta bien, buenas noches tía-- salgo de la habitación y voy al despacho

Pienso, ya llevo unas horas creo, estoy desesperado.

-Ana, no te puedes casar, me amas, ¿donde estaras? de verdad llegaste a tanto, hasta de ¿casarte por despecho? ¿o por rabia?, dios!!!!!-- me enojo conmigo mismo por pensar en ella de esa forma, yo la desprecio-- dios, porque pienso tanto en ella, ¿porque?

He dado vueltas y vueltas en el despacho, no quiero imaginar a Ana en los brazos de Carlos, se casaron y ahora él la disfruta de haberla transformado en su esposa. Maldita sea!!!!!!

Despues de unas horas en el despacho, decido subir a la habitación de mi tia totalmente resignado, espero que sea muy feliz alado de Carlos.

-Voy a cumplir la promesa, me voy a casar con su sobrino-- escucho justo cuando voy entrando a la habitación, es ella, esta aquí, no se ha casado, eso me llena de tanta felicidad pero debo ocultarlo

-Rodrigo, pasa pasa, mira quien llego

-Ya veo tía-- la observo-- tía, ¿necesitas algo?-- trato de no verla

-No, nada Rodrigo, gracias, creo que deben hablar

-Si, bueno, Ana me acompañas al despacho, porfavor-- la miro directo a los ojos

-Esta bien, vamos-- mira a mi tia-- buenas noches doña Martha

-Adios hija

Vamos al despacho, ella me sigue, de verdad que me alegro que no se haya casado con Carlos, no quiero verla alado de nadie, ella se va a casar conmigo, eso lo escuche muy claro, asique solo para demostrarle que no caere tan fácil, me hare en poco de rogar, despues de un fracaso, no quisiera otro planton en pleno altar y menos por parte de ella, no lo soportaria. Aquí vamos Rodrigo, es hora de que demuestres de que estas echo y veremos tambie si tu querida Ana tambien es muy dura como lo demuestra, le demostrare que un Ferrándiz no tiene compasión de nada ni de nadie.

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