El Maldito Griego. (Saga, Mujeres Empoderadas II)

Sevilla maravilla

Embarcamos en el avión rumbo a Sevilla, me recuesto un rato con Luca, mi cansancio me agota, nos quedamos dormidos los dos en la cama y cuando despierto veo esto.

La sonrisa más bonita de mi Lucca, es que lo adoro. El es el que me da fuerzas para levantarme todos los días y aunque no lo haya parido lo he criado y cuidado desde la barriga de su mamá hasta hoy que cumple 6 meses. Estoy enamorada de mi niño.

Me levanto, lo cojo en brazos y lo llevo a la zona de asientos. Me siento con él en brazos y cuando vamos a aterrizar lo ponen en una silla especial para el con sus cinturones.

Aterrizamos y salimos al aeropuerto de San Pablo, de allí nos recoge un land cruiser y nos llevan a nuestra casa en la Macarena, un barrio precioso de Sevilla, es una casa de dos plantas no muy grande pero es preciosa y pintoresca, al menos para mí.

Es preciosa y por dentro es espectacular, no quería vivír en la mansión que me dejó Máximo y me compré ésta, además esta tiene azotea con zona chilau. Es preciosa.

Está en pleno centro y me coge muy bien para la empresa que está en la cartuja, puedo ir paseando y en coche o en bús. Da igual me coge muy cerca, también tengo cerca guarderías, zonas escolares, médicos y hospitales.

Aunque yo tengo una mutua privada. Pero me dice Claudia que la seguridad social española es buenísima y que los médicos también lo son. Como yo no soy de alardear, me apuntaré a la seguridad social (pagando mis impuestos, porsupuesto) e iré allí.

Le digo a Claudia que me coja cita con el médico, creo que la anemia a vuelto con fuerza, y tengo que pensar en Lucca, si me pasara algo que sería de él.

* Señor a tiene cita para las siete, le digo al chófer que la lleve?

* Está muy lejos?

* Para nada, está a unos 100 metros.

* Entonces iré caminando.

* Pero llévese a uno de los guardaespaldas.

* Lo haré, pero para no perderme.

El centro de salud es muy grande y muy tranquilo, me atienden enseguida, después de preguntarme la doctora varias cosas y decirle que sufro de anemia me manda unos análisis urgentes, debo ir al hospital virgen del Rocío a hacérmelas, viene el chófer me recoge y me lleva allí con los papeles que me dio, me hacen la analítica y me dicen que me vaya que ya me llamará la médica. Me voy a mi casa y antes de llegar me llama la médica y me dice que me pase por allí otra vez, ya son las 8:30 y estoy agotada, pero como está cerca de casa voy en un momento. (vaya día movidito)

Llegó a la consulta llamo a la puerta y me dice que pase.

* Señora Ariadne, siéntese por favor.

Ya tengo los resultados de sus análisis.

* Bien dígame, es algo malo?

* En absoluto, tiene anemia, no es malo, pero tampoco bueno, si dejamos de tratar la anemia en su estado puede desembocar en una leucemia, así que debe tomar hierro, alimentos ricos en hierro y unas vitaminas prenatales.

* Vitaminas prenatales?

* Sí, está usted embarazada, no lo sabía?

* No, yo....

Me quedé en shock, no sabía cómo reaccionar, esto no se lo perdono. Ni siquiera usó Condón.

Y si tengo una ets? Dios mio ayúdame.

* Necesito que me haga las pruebas pertinentes de las ets. (enfermedades de transmisión sexual).

* No se preocupe, se las hicimos y todo está bien. Le voy a dar la cita para que la revise un obstetra y le diga de cuanto está y como va el embarazo.