Tomando un café

Ahí nos encontrábamos las dos, la amante y la esposa.

Lisa hablaba español con su acento gringo que sonaba un poco chistoso.

Pero sus preguntas fueron directas.

Eres tú la mujer con quien me engaña mi esposo? Preguntó furiosa pero guardando la compostura.

Quedé sin palabras por unos segundos y le dije que no.

No quería enfrascarme en una discusión que podría salirse de las manos.

Mentirosa! En su bruto español expresó.

La mire fijamente, y le dije :

Qué quieres saber?

Todo! La verdad.

Yo no podía arriesgarme a un escándalo, así que la invite a calmarse y a contarle parte de la historia sin llegarle a confirmar que su marido me había hecho gemir como una loca. Pará mal de Alonso le conté que teníamos una hija en común de la cual nunca se había hecho cargo y que ahora su buen esposo se había acercado a mí solo por eso, ya que se sentía culpable ahora que había tenido un bebé con ella.

Pero ella insistia, en que la engañaba y que ya no era el mismo.

Ese no es mi asunto, ya te dije lo que querías saber, tengo que retirarme pues viajo mañana de regreso a mi país, le dije.

Porque viniste a New York?

Como que porque, es solo un viaje de turista, nada más, le dije.

Yo no soy tonta!

Por supuesto que no, pero no puedo seguir acá, adiós.

Me pare y me retiré, apure mi paso para desaparecer lo más rápido posible de allí.

Llegué a la habitación, llene el jacuzzi el cual no había utilizado, necesitaba relajarme, aun me temblaban las piernas.

Estaba logrando relajarme cuando alguien aparece en frente de mí, era Alonso con una cara que me dio miedo.

Rápidamente me pare y me envolvi con la toalla.

Que te pasa porque entraste sin avisar, me asustaste, le dije.

Porque fuiste a mi casa ayer?

Jajaja tu crees que fue intencionalmente lo de tu casa.

Solo fue una maldita coincidencia, si Leo me hubiera dicho que ivamos a tu casa, jamás lo hubiese hecho.

Yo no estoy para niñerias, le dije molesta.

El se pasaba sus manos por su pelo y guardo silencio por mucho rato.

Lamento haber desconfiado de ti, pero entiéndeme te metiste en casa de mi familia.

Queeeee! Le grite con rabia.

Ahora te importa, tu familia, no seas hipócrita, y sale de aquí que tengo que terminar de arreglar mi maleta.

Se paseaba como león enjaulado mientras yo empacaba y ordenaba mis cosas.

Ahora que vamos a hacer? Me pregunta.

Nada, absolutamente nada, sigue con tu familia feliz y yo con la mía.

No puedo hacerlo! Me grita

Que? No puedes le digo.

Dejarte ir! No está vez, estoy atado a una vida de mierda y tu lo sabes.

Yo veo a un hombre exitoso con una familia perfecta! Le aclaro.

Sin aviso alguno se acerca y me besa bruscamente, lo empujó y le digo que esto se acabó, que ya nos sacamos las ganas y yo debo regresar a mi vida.

Me promete que volverá por mi y que lamenta lo sucedido.

Le pido que se retire y se va en silencio.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***