Cap. 4 El viaje

Habían pasado ya varios años, los cachorros de alfa habían crecido mucho, Zaid Malek, se convirtió en un joven muy agradable y tierno, es muy alto y de espalda ancha, los músculos de su pecho y espalda están bien tonificados, esto debido a que le gusta practicar natación, sus piernas son largas y bien trabajadas, su piel está ligeramente bronceada como las arenas del desierto, bajo el calor del sol, sus ojos logran captar el azul del cielo, en un día de tormenta.

Zoid Malek, tiene la misma estatura de su hermano, su personalidad es más atrevida y dominante, su cuerpo está muy bien trabajado, tiene un dorso tonificado, así como sus grandes piernas, esto es por las horas que le dedica a su cuerpo en el gimnasio, su piel color arena y sus lindos ojos negros como la noche con esos diminutos rayos de luna.

Zaid Malek es estudiante de segundo año, en medicina pediatra. Zoid Malek es estudiante de segundo año en finanzas y economía internacional.

Para el cumpleaños número 20 de los hermanos Malek, su padre les obsequio un viaje de dos semanas por el mar Mediterráneo en un yate que también les obsequio. Los chicos esperaron a tener vacaciones en la universidad para emprender su viaje.

Ya estaba todo listo y planeado, el yate que su padre les regaló es muy grande y lujoso, tiene tres camarotes principales, una estancia comunal, un cuarto de baño, cocina, terraza con un jacuzzi, más los camarotes de la tripulación, el yate está tripulado por el capitán, un comandante, un cocinero y dos meseros.

Llegó el día esperado y zarparon a mar abierto salieron del puerto de Alejandría, con destino a el Líbano, este sería un viaje cultural y nocturno ya que gustaban de contemplar las viejas civilizaciones y vestigios de estás, está fascinación era un gusto adquirido de parte de su padre y madre. Y como buenos jóvenes Alfas en busca de su omega destinado, frecuentaban los lugares nocturnos de más popularidad en los distintos lugares a donde llegaban.

Su primer destino fue Raouche Rock, es una hermosa isla, sus costas están conformadas por varias formaciones rocosas de gran tamaño y espectacularidad, las formaciones son muy impresionantes y se encuentran prácticamente por todas las costas de la isla, por la noche los jóvenes alfas, se prepararon y acudieron a los antros más populares de esta ciudad, después de un gran día y una muy movida noche, regresaron cansados al yate a dormir. El capitán continuo su curso rumbo a Chipre.

Su nuevo destino es Limassol, ya eran casi las 11 de la mañana cuando los hermanos decidieron desembarcar he ir a visitar el castillo de Limassol y sus lugares históricos, es una ciudad muy cálida, pasaron el resto la tarde entre restaurantes y cafés, por la noche, Zaid estaba cansado y prefirió descansar, pero el incansable de Zoid se alistó y marcho al más exclusivo bar del puerto, donde conoció a varias chicas y chicos y pasaron un buen rato de copas.

Cómo de costumbre despertaron en mar abierto, su ruta consistía llegar a una ciudad al medio día o por la tarde, pasear por los centros turísticos, restaurantes y por la noche unos cuantos tragos en algún antro del lugar y mientras dormían el capitán seguía con el itinerario rumbo a la próxima ciudad a visitar.

Esta vez llegaron a Rodas, está es una isla de Grecia sus lugares culturales son impresionantes, Zaid y Zoid, pasaron la tarde y noche paseando por sus calles, ninguno de los dos tuvo ganas de fiestas nocturnas, así que decidieron pasear por la playa, cerca de ahí se encontraba un café típico de la ciudad donde preparaban su propio pan de manera artesanal, pidieron dos capuchinos y unos baclava. Todo fue genial y regresaron al yate.

Al amanecer estábamos por llegar a el puerto de Heraclio, pero el capitán nos informó que tendríamos que regresar a Egipto nuevamente lo más pronto posible ya que nuestro padre ha sufrido un accidente. Así que el capitán decidió rodear la isla de creta, y emprender el viaje de regreso.

Los dos estábamos algo ansiosos, ya que no se nos informó que tipo de accidente o la condición de nuestro padre, el viaje de regreso fue algo estresante, por falta de información y por la pequeña tormenta tropical que se estaba formando, los vientos eran fuertes, pero hasta un punto moderados, esas fueron las ocho horas desgastantes de toda nuestra vida, llegamos al puerto de Alejandría como a las 10 de la noche, ya nos esperaba esperando un vehículo para trasladarnos a la casa.

Apenas llegamos a casa y nuestra nana, nos aviso que ya tenía las maletas hechas. Nos sorprendimos mucho por lo dicho por la nana. Ella nos dijo que papá se encontraba visitando la ciudad de Ankara, así que tendríamos que ir a buscarlo a Turquía.

Los boletos de avión indicaban la salida a las 6:15 am, descansamos unas horas y tomamos nuestras maletas nuevamente, nos dirigimos al aeropuerto, el trayecto fue tranquilo habían pasado varias horas para cuando llegamos al aeropuerto de Ankara, desperté a Zoid y bajamos del avión, tomamos nuestras maletas y nos dirigimos a subir a un taxi.

El conductor del taxi nos dejó en un hospital de la ciudad. Entramos en este y preguntamos en la recepción por el profesor Zalithe Malek, la señorita nos indico que se encontraba en la habitación 18 del cuarto piso, tomamos el ascensor las puertas se abrieron en el cuarto piso y salimos de este.

Al llegar a la habitación 18, entramos sin tocar, papá estaba platicando con un señor, parecían viejos amigos.

Papá nos dio la bienvenida y nos presentó a su amigo – muchachos el es el Sultán Ahmed Osmán de Ankara – un viejo amigo.

Saludamos al sultán Osmán con los debidos protocolos y nos presentamos.

Los médicos nos informaron que debido a la caída de nuestro padre en la mezquita Aslanhane, al resbalar de un andamio, sufrió la quebradura de tres costillas y un esguince del tobillo derecho, por lo cual pasaría tres días más en el hospital y tendría que permanecer en reposo por dos semanas más.