Prólogo

Soy Lya Nol, tal vez te preguntes ¿qué hago vestida de novia? ¿porqué mi vestido está manchado de sangre? ¿Quién es el hombre que está en el piso, muerto aquí a mi lado?

Para explicarte las circunstancias que acabo de describir es necesario comenzar por el principio...

Soy Lya Nol, tal vez te parezca una mujer insignificante, incluso yo misma me siento así muchas veces pero desde que tengo memoria me han preparado para cuidar del negocio familiar.

Para eso fue necesario formarme fuerte, valiente y lograr dar la clara imágen de una persona cruel y desalmada. Que las personas me respeten y teman era muy importante.

Mi padre, el temido Eun Nol o mejor conocido como "el rey de la mafia" me ha dicho desde niña que el día que él ya no esté, todo el imperio que ha construido sería mío, mi responsabilidad.

Para mantener oculta mi identidad mis padres vivían separados, yo llevaba una vida completamente ordinaria junto a mi madre, en la ciudad T.

Mi padre por otro lado, vivía en la ciudad A y nos visitaba muy pocas veces, siempre rodeado de sus hombres de confianza.

La primera vez que comprendí a qué se dedicaba realmente, fue a mis 15 años. Regresaba a casa de mi madre después de una jornada en el colegio e inesperadamente un hombre comenzó a forcejear conmigo intentando subirme a un coche.

Seguramente no sabía que me han obligado a aprender todo tipo de artes marciales y de defensa desde pequeña, lo tomó por sorpresa que pudiera resistirme hasta lograr soltarme de su agarre y poder escapar.

Luego de eso mi padre se ocupó personalmente de atrapar a este hombre.

Me llamó para que lo reconociera, al decirle que sí, que era la misma persona que había intentado herirme, sin dudar ni un solo segundo, le disparó.

Al principio me sorprendió mucho, aunque no me asusté porque no era la primera vez que veía a mi padre o a sus hombres con un arma en la mano, pero jamás habían disparado delante de mí.

Mi madre y yo nos mudamos a la ciudad A para que estemos mejor protegidas.

Fue un cambio realmente grande, la presencia de hombres armados por toda la casa, cámaras de seguridad incluso en las habitaciones.

Aún así mi madre insistió en que debería asistir a la escuela, a una nueva, claro está.

Unos años más tarde cuando tenía 18, fuí secuestrada por un grupo enemigo.

Fueron días muy duros, me tenían en una habitación oscura, sin darme ni siquiera agua, me golpearon e insultaron hasta cansarse.

Algún tiempo después supe que mi padre había asesinado al hermano del hombre que me mandó secuestrar.

Finalmente Song Miu llegó a mi rescate. Estaba segura que si alguien podía salvarme, ese era él.

Desde la primera vez que mis ojos se cruzaron con los suyos, me sentí completamente cautivada por su belleza era delgado y alto, tenía unos brazos realmente fuertes, se notaba a simple vista que se ejercitaba mucho también tenía el cabello rizado de color café, pero sin dudas lo que más me gustaba de él eran sus ojos color avellana.

Aunque él era unos seis años mayor que yo, había sido mi primer amor... pero lo nuestro fue imposible, no porque él no me quiera, sino porque mi padre les tenía prohibido a sus hombres acercarse a mí, si lo hacían pagarían con sus vidas.

Mi madre murió asesinada ese mismo año. Mi padre no me permitió llorar su muerte.

Me dijo: "En la jungla, sólo los animales más feroces sobreviven, no hay lugar para los débiles, terminan convirtiéndose en presas de los demás" luego del funeral de mi amada madre me subieron a un avión rumbo al gran castillo familiar que se encontraba en otro país. Era una fortaleza casi impenetrable supongo que por eso mi padre escogió ese lugar para esconderme hasta que acabó con los responsables de causar el asesinato de su querida esposa.

Mi papá me amaba mucho, a pesar de su fama de despiadado y cruel yo fui siempre su debilidad, estar lejos mío en un momento como ese fue muy difícil para ambos pero yo acepté su decisión porque comprendía que era la única manera que encontraron él y mi abuela para protegerme y poder mantenerme a salvo de sus enemigos.

Ahora tengo 24 años, mi padre acaba de ser asesinado y es momento de demostrar que no se equivocó al elegirme como su sucesora a pesar de haber sido muy cuestionado por esa decisión ya que tuvo que lidiar con personas que no me creían capaz de manejar los negocios familiares por el simple hecho de ser mujer, llegando incluso a aconsejar que para ser su heredera debería primero casarme, pero mi padre se opuso a esa ridícula idea y dejó claro que él me creía realmente preparada y que si algún día llegase a ser necesario casarme sería por formar una gran alianza y sumar más poder a nuestro apellido, no porque me haga falta un hombre para poder ser la jefa.

Él confiaba en mí ciegamente pero ahora me lo han arrebatado y con su muerte también se llevaron un pedazo de mi alma, por eso no descansaré hasta encontrar a los culpables detrás de su muerte.

Ahora sólo somos mi abuela y yo, ella es toda la familia que me queda, sé que es una mujer fuerte pero perder a su hijo la dejó completamente devastada aunque intenta ocultarlo y finge estar bien, fue ella quien cuidó de mí luego de que asesinaran a mi mamá.

Ahora llegó mi turno, es mi momento de proteger a mi familia como sé que mi padre lo hubiese hecho.

Me falta mucho por aprender de este ambiente, pero después de todo lo llevo en la sangra, el mundo de la mafia corre por mis venas, es parte fundamental de mi ADN.

Debo demostrar a todos aquellos que me creyeron incapaz que estaban equivocados, voy a enseñarles que una mujer puede convertirse en una gran líder, que se puede ensuciar las manos con sangre de sus enemigos y que no le tiemble el pulso a la hora de cobrar venganza. Así será.

Sé que estés dónde estés, seguramente te haré sentir muy orgulloso de mí, papá.

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