Un almuerzo.

Narra Arisbeth......

Nada me hacía más feliz que mirar desde el balcón y verlos llegar, pero extrañamente este día no era igual, Aldair bajo del auto y me miró desde abajo con su bella sonrisa que hacia resaltar sus dientes blancos, yo bajé enseguida y le abrí la puerta, me dirigí hacia el y le di un muy fuerte beso.

Arisbeth: Estás muy guapo.

Aldair: Nada comparado con tu belleza amor.

Era sensacional ver cómo el se esforzaba por ser el más romántico, y cada día me convencia un poco más de que me quería.

Arisbeth: En dónde está Eider?.

Aldair: Bueno, el ha decidido quedarse en casa, quería jugar un poco de videojuegos y cosas de niños.

Arisbeth: Valla, el ya es demasiado grande al parecer.

Aldair: Jamás será demásiado grande para mi.

Hacia apenas 3 meses que Aldair me había pedido que fuera su novia, y la semana pasada había sido el cumpleaños de Eider, le habían regalado muchas cosas y entre ellas unos videojuegos a los cuales el les daba muy buen uso en sus ratos libres, por qué a pesar de ser un niño pequeño, el era muy inteligente.

Arisbeth: Ah que debo está muy agradable sorpresa.

Aldair: Solo queria pasar a ver a mi novia y a darle unos cuantos besos.

Yo me abalanze sobre el y lo llene por completo de besos, pero el último beso fue diferente, el me aparrago en la puerta y yo no pude evitar montarme en el, su suave barba me hacía querer estar más y más serca de el, pero el se detuvo, me bajo muy lentamente y me miró a los ojos.

Aldair: No amor, no quiero que sea así de básico, quiero algo único.

Arisbeth: Valla, está es la tercera vez amor, me haces pensar que lo tienes chiquito.

El carcajeo, lo cual era muy extraño verlo en el.

Aldair: Oh no lo creo.

El tomo mi mano y la paso por encima del bulto de su pantalón, y claramente pude darme cuenta que no, pero mi corazón se acelero y mi piel se erizo, entonces el me solto y hablo.

Aldair: Isaías está de vuelta, y que te puedo decir, el tiene una hermosa esposa, fue muy rápido pero el dice estar enamorado.

Arisbeth: Wow, si fue muy rápido.

Aldair: Iremos a almorzar, quisiera saber si irías conmigo.

Yo sonreí y lo mire, era más que obvio que quería ir con el, me encantaba que me incluyera en todos sus planes.

Arisbeth: Bien, a qué hora pasarás por mi?.

Aldair: Arréglate miamor, nos iremos ahora mismo.

Yo me sorprendi demásiado, aún faltaban un par de horas para el almuerzo, no sabría en cuántas horas estaría lista.

Aldair: Planeaba regresar más tarde, pero nada me haría más feliz que ver a mi princesa arreglarse.

Yo lo tome de la mano y subi con el hacia mi habitación, después de una hora estaba lista.

Según el, no era nada formal, el se había mandado a pedir un par de prendas muy frescas, pues era un día bastante soleado y húmedo.

Aldair: Eres un verdadera diosa, mi cielo.

Yo le di un beso y juntos salimos de mi mansión en dirección al restaurante donde nos veríamos con Isaías y su esposa.

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