Prólogo.-

Las cosas en la Tierra como planeta y en el mundo en lo que se refiere la vida humana han cambiado por completo, nuestro "Planeta Tierra" ya no era el mismo, ni tampoco la forma de vivir. La llamada evolución en la que muchos creen, o tanto desastre hecho por el mismo ser humano quizá fue lo que llevó a que "El cambio" ocurriera.

En realidad no importa qué, menos ahora que sobrevivir se ha vuelto la razón por la que cada uno "que ha tenido la suerte", como muchos dicen o la oportunidad de aún existir.

La superficie terrestre que existe es escasa, casi nula, ahora la vida debe vivirse en bases subacuáticas o submarinas, lo cual gracias a tecnologías avanzadas fue posible. Nunca se supo, ni aún hasta la fecha cuál es la cantidad exacta de personas que lo han logrado pues es tambien se desconocida la cantidad de bases que existen en toda la extensión de agua que ahora es el planeta. Debido a que la relación entre ellas suele ser limitada o incluso inexistente.

En mi caso formar parte de éste nuevo sistema de vida se volvió una costumbre tal como lo fue en su momento mí vida anterior. Ya no creía en que algo fuese a cambiar para mí, esos ya no eran mis planes más bien, resignada ya no lo esperaba. Pero en el momento que apareció él, cambio todo, no lo sabía por supuesto pero era la persona que dejé de buscar o de esperar ya ni se desde hace cuanto tiempo, tanto que hasta me cuesta recordar.                                                        Completamente opuestos, como el agua y el aceite o el frío y el calor o la noche y el día... Como quieran llamarlo, luz y oscuridad, bueno en realidad ahí nos parecemos, los dos cargamos nuestros propios tormentos, aún así su llegada a mi vida no fue lo que en aquellos sueños lejanos pensé que sería. No! todo lo contrario.

Al principio solo hicimos cortocircuito y nos dedicábamos a dañarnos a propósito. Después la convivencia obligada y la rutina quizá sin darnos cuenta hizo que esa misma electricidad nos consuma, ni él ni yo éramos conscientes de que estar separados era peor que el intentar estar juntos.

Nunca me hice muchas preguntas sobre cómo vivir mí vida pues, gracias a Dios tuve mi familia, una buena, padres, hermanos, abuelos a los que disfruté hasta en mí adolescencia, pero jamás en mi caso, jamas aunque amé, jamás me amaron, al menos no en serio y lo digo en lo que se refiere al amor que un hombre le puede llegar a tener a una mujer, así que eso también me hizo ser la persona que actualmente soy...

Solitaria, que aunque sé que necesito de los demás para poder lograr metas o alcanzar sueños, yo voy por la vida evitando ese tipo de acercamiento, puede sonar algo absurdo que una persona quiera eso para sí misma, pero bueno, tal vez solo es la costumbre, las cosas que me han tocado vivir o mí forma de ser, o puede que ninguna de ellas y solo me excuso para no pensar en la realidad que muy en el fondo oculto, el dolor, la pérdida, el sentimiento de vacío y sobretodo el nunca haber encontrado mi lugar en el mundo como muchos dicen.

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