Capítulo 9

-Dios eres tan bonito -inconscientemente David acarició su rostro muy tiernamente mientras veía su boca-. Dios de verdad quiero besarte.

-Tengo los labios inflamados idiota.

-Aún así quiero hacerlo, pero me da miedo lastimarte. Siento que no te e besado en un siglo.

-Deja de exagerar -Erick se alejó unos centímetros, David se acercó más.

-¿Me dejas besarte?.

-¿Mh?.

-Si no quieres que te bese, entonces aléjate por qué no puedo contenerme más. No te imaginas cuanto extrañé esto.

-Mh, debemos volver a clases -Erick le recordó-. ¿Y David? Se que no debo decirte esto pero... No me compres un teléfono.

-pero...

-prometelo

-Pero lo necesitas.

-Estaré bien, ahora prometelo.

-Yo prometo no comprarte un celular. David estaba frustrado, no había obtenido su beso puesto que Erick se marchó rápidamente, al menos se siente un poco mejor se consoló. El martes no logró hablar con Erick ya que este se había marchado rápidamente y el también tenía asuntos con sus papás, afortunadamente hoy era miércoles y Erick tendría que verlo si o si.

-Sube -ordenó David-. ¿Puedo besarte? Di que si -suplico en cuanto el chico estuvo a su lado.

-Estas conduciendo, concéntrate.

-Cuando lleguemos a mi casa ¿Me dejas besarte?.

-De acuerdo.

-¿De verdad puedo?.

-Si, ahora concéntrate en el camino -Erick suspiro. En cuanto entraron a la casa David se apoderó de los labios de Erick.

-Ya calmate David, tenemos que hablar sobre esto.

-¿Sobre qué?.

-Sobre el hecho que continuamente me estas besando.

-¿Te molesta?.

-No, no del todo al menos.

-¿Entonces?.

-David, soy un hombre gay en mis 20, necesito mas que besos y esto me esta confundiendo demasiado.

-¿Que te confunde?.

-El hecho de que no eres gay, además dejaste en claro que no querías una relación conmigo. No sé cómo funciona entre heterosexuales pero si me besas tanto y tan a menudo es imposible que no me exite.

-Osea que...¿Si te besó te pones caliente?.

-Si, así es como funciona el ser humano la mayoría del tiempo. Por eso creo que deberiamos parar esto.

-¿Es porque soy guapo?.

-Eres guapo no voy a negar eso, sería hipócrita de mi parte no aceptarlo.

-¿Entonces por qué quieres dejar de hacer esto?.

-Es incómodo para mí, ya que tu no eres gay.

-Si sobre eso, lo e estado pensando y creo que podría ser Bi.

-¿Crees? Has estado metiendo tu lengua en mi boca desde que nos asignaron juntos.

-Si pero allí está el detalle, yo no quiero meter mi lengua en ninguna otra boca, solo me pasa contigo.

-Admito que eso es extraño, pero descubrir tu sexualidad generalmente lo es.

-Entonces... ¿Puedo meter mi lengua en tu boca?.

-¿Y si mejor te hago otras cosas con esta boca que tanto te gusta? Así decides de una vez.

Había sido una mala idea provocarlo, Erick había creído que si le hacía "otras cosas" con su boca, David decidiría que eso no era lo suyo, se detendría y no volvería a besarlo ya que últimamente se había encontrado pensando en David demasiado a menudo y eso no le gustaba para nada. En lugar de eso había despertado una bestia furiosa e invasiva a la que ya no le era suficiente solo besarlo, había sido su culpa Erick lo sabía pero mientras se vestía en silencio tratando de no despertarlo no podía dejar de reprocharselo.

Erick sonrió cuando su abuelo le entregó el nuevo aparato, era un celular sencillo pero igualmente útil. Lo que no lo hizo muy feliz fue la visita de David, este se veía feliz.

-David, que bueno que vienes. Erick no nos dijo que tenía que estudiar -la mujer mayor le reclamó a su nieto.

-Por qué no tenemos clases hasta las 2 abuela ¿Que haces aquí? -se dirigió a su compañero un tanto molesto.

-Vine a ver como seguías -David se refería a los moretones en su cuerpo ya que todavía no sanaban del todo, o al menos esa excusa fue la primera que se le ocurrió.

-Oh ¿Veniste a ver como seguía de su espalda? Erick dijo que se tropezó en tu casa ayer -el anciano sonrió dulcemente a su nieto.

-Si señor, Erick se resbaló en un trecho mojado de mi casa ¿Por cierto, que tal sigue el golpe? -David parecía a punto de romper en risas, Erick lo miró con odio.

-Muy mal, le estaba diciendo a mi abuelo que en tu casa hay un perro insoportable que babea horrible sobre mi, es probable que ya no vuelva a tu casa ya que es su culpa que mi espalda duela.

-Erick, no seas así.

-Es la verdad, no soportó a ese perro.

-Bueno es tu culpa que ese perro babee tanto sobre ti -se burló David.

-Si ya lo se, debí darle una patada la primera vez que lo hizo.

-Eso es cruel, pero sigo diciendo que es tu culpa por provocarlo.

-En fin, esa es la razón por la que no voy a volver a tu casa -David lo miro sin saber que decir, ya que esto último pareció decirlo en serio.

-Ignoralo David, este niño no puede dejarte solo con su proyecto -uno de los abuelos dijo.

-¡hey! Se supone que estés de mi parte. Ahora tu largo, que es hora de almorzar.

-Erick hijo, se amable con tu compañero ¿Porque no van a comer afuera?.

-Si es una gran idea, vamos -David se emocionó.

-Voy a comer con mis abuelos, así que vete.

-Erick...se amable, además lamento mucho decirte esto cariño pero solo empaque comida para nosotros, así que ve y no olvides ser amable.

-Si abuela, ven.

-Hijo olvidas tu celular -el hombre corrió tras el con el aparato en la mano.

-Oh, tienes un nuevo teléfono -David miró el aparato que era de los más económicos y de una marca que nunca había visto.

-Si, mi abuelo lo compró para mi -Erick se mostraba orgulloso del acto de su abuelo y sonrió, esa sonrisa que de verdad volvía loco a David.

-Te ves muy bien cuando sonríes -medio alcanzó a decir David.

-Vamos -Erick le hizo señas para que lo siguiera hasta un pequeño lugar que vendia batidos y hamburguesas.

-¿Vamos a comer aquí? ¿Y si nos intoxicamos o algo?.

-Si no te gusta vete.

-¿Por qué estás molesto?.

-No lo estoy.

-Erick estas pisando mi pie con mucho odio.

-Lo siento, no estoy molesto contigo, bueno si estoy. Pero no demasiado, lo lamento.

-¿Que esta pasando?.

-No es nada.

-Claramente es algo.

-Estoy bien.

-¿Vamos a mi casa?.

-No tengo tiempo, debo trabajar.

-¿Y si no vas? ¿Eso sería mucho problema?.

-Mis abuelos son personas bastante mayores David, necesitan ayuda.

-Creo que son perfectamente capaces de atender su negocio.

-Si, pero yo debo hacer algunos repartos, antes de irme a la universidad.

-Erick yo...de verdad necesito besarte y otras cosas -había tanta necesidad en esas palabras.

-Paga y vamos a tu auto ahora, me quedan 15 minutos.

-Si -David obedeció y rápidamente se encontraron empañando los vidrios del auto.

Al siguiente día lo primero que David miró cuando estacionó su auto fue a Matt, este sonrió amable. Era una cosa buena que Erick no haya podido venir con el esta vez.

-Dave, ¿Como estas?.

-Es David no Dave recuerda eso ¿Que quieres?.

-Diana...

-¿Y?.

-Diana no a parado de llorar por lo que le hiciste.

-¿Y eso porque habría de importarme? Consuelala tu, ¿no?.

-Como puedes ser tan testarudo, entiende de una puta vez que no hay nada entre ella y yo.

-Claro, mira no tengo tiempo para esto, de todas formas Diana y yo rompimos. Así que dejame en paz -David pidió antes de marcharse.

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