Capítulo 4

MARTES, 1 DE MARZO...

MAÑANA... 

MI MAID.

MÁX... 

Mi cabeza es movida sumamente, y me traía de mi sueño profundo, agarre con más fuerza mis sábanas, no quería levantarme, estoy muy cómodo y abrigado.

— señor máx. Por favor levántese  — mi maid seguía moviendo mi cabeza.

— no quiero. 

— señor máx. Ya son más de las 8 de la mañana, no pensará seguir durmiendo, verdad?  — dejo de moverme  — hoy le prepare su platillo favorito si no se levanta se le va a enfriar.

Ella sabía mi punto débil, a renegadas me pare de la cama, me miró, tengo puesto un pijama, no me embriague a noche, así que recuerdo bien y yo dormí con un pantalón.

— no se preocupe señor máx. Yo lo cambié.

— ya me doy cuenta, pero no era necesario

— señor máx. Mi deber es darle la máxima comodidad, si dormía sin camisa  podría resfriarse  — su cara tomo un pequeño rubor  — además, señor Max… — parecía que el resto no le podía salir.

— no te preocupes, gracias, y los chicos siguen dormidos? — me quité mi pijama y quedé en bóxer.

— sí, están en la oficina, tal vez debería despertarlos señor máx.

— si, eso haré.

Fui a la oficina, aún tenía algo de somnolencia, quería dormí, llegué a mi oficina, todo era un chiquero, las mujeres ya se habían ido, mire a mi escritorio y había un papel. Lo miraré  después.

— remix carajo, qué haces durmiendo conmigo y además de cucharita  — juan se quitó tan rápido como puedo del lado de remix, que parecía confundido.

— a no sé, qué hacías tú en mis brazos?, soñé que le daba duro a algo y, se sentía apretado   — dijo remix confundido y, colocando una mano en su cabeza. 

— espera remix... No me digas que  — juan coloco sus manos en sus nalgas  — dime que te dormiste después de tener 5 veces sexo con ella, por favor dime que te dormiste  — en su cara está escrito el terror.

— lo siento, no me acuerdo  — remix se paró y la sabana sé cayo, remix está en bóxer.

— no me jodas remix, encima sin ropa, estás más dotado que máx. Como me haces esto?  — juan parecía a punto de llorar.

— máx. Que la tienes pequeña dice  — Marcos también se había levantado. 

— mi querido amigo Marcos, espero que la mujer de ayer allá podido sentir algo  — dije molestando a marcos.

— máx. El tamaño no importa solo como lo mueves.

— o si, si, me queda muy claro  — sonreí entre

dientes.

— te burlas de mí máx.?.

— ja, ja máx. Déjalo tranquilo, no tiene la culpa, él tiene razón, solo importante como lo muevas y en que posición la coloques   — Martín también se había levantado.

— tienes razón Martín, el problema es cuando no duran ni tres minutos en ninguna posición — dijo cesar riéndose.

— tratas de decir que soy precoz?.

— ya basta, es muy temprano para las mariconadas, ya no llores Juan, en fin no quedarás embarazado, míralo por el lado bueno — le dije a Juan que lloraba en una esquina.

— Max no jodas, eso no me ayuda  — me respondió Juan enojado.

— vamos, vamos, yo tengo la solución, así todos estaremos bien   — dijo Marcos, todos podíamos adivinar lo que iba a decir.

— hagamos lo entré todos  — dijo Marcos sonriendo. 

— largo  — dijimos todos a la vez.

— pero que agua fiestas  — marcos miro el reloj que está colgado en la pared   — ya es tarde, tengo una reunión con unos clientes, me voy, gracias por todo chicos, estaremos en contacto  — mi maid llego y lo acompaño a la salida.

Después de que Marcos saliera, remix me miró  — máx. Tienes todo preparado — la recocha ya pasó, ahora su tono de voz es serio. 

Asistí — todos prepárense  — llamé a mi maid, ella vino al instante  — traerlos.

Mi maid asistió y salió, al poco tiempo trajo una caja negra y la abrió. En ella 6 aretes en forma de cruz.

— tomen uno cada uno  — todos asistieron y tomaron uno, solo quedó uno.

Mi maid salió y trajo una aguja y un hielo. Le dio una a cada uno, todos sin dudarlo se perforaron una oreja, la cruz es negra y en el medio tenía un punto de luz rojo, me acerque a una pared de mi oficina y la toque, la pared se dio la vuelta revelando un estándar repleto de armas, saque 5 pistolas, le tire una a cada uno, todos la atraparon y la miraron. 

— bien, estamos completos. 

—  máx. Estaremos en contacto  — dijo  Remix colocando el arma en la parte de atrás de su bóxer.

— ya saben como funciona los aretes, no?  — todos asistieron.

Tomaron un baño, comieron algo y se fueron, mi casa quedó sola otra vez. Solo mi maid y yo quedamos, veía la pistola en mi mano, la coloqué en la mesa.

— señor máx. Por favor venga  — mi maid me llamó. Para uno de los tantos cuartos que hay, me pare y, fui. 

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