CAPÍTULO 5: YA NO QUIERO ESTAR CONTIGO

CAPÍTULO 5: YA NO QUIERO ESTAR CONTIGO

Después de que la policía se llevará a Criss, los amigos de Anie junto con ella acompañaron a Toño a la enfermería para que lo revisaran, una vez que vieron que no tenía más que los golpes fueron con Anie a su casa, ya que aún seguía temblando de la impresión por lo que había pasado. Toño la abrazo y le dijo que no tuviera miedo, que ellos la cuidarían y no dejarían que él le hiciera daño. Ella solo asintió con la cabeza agachada. La acompañaron a su casa y después de asegurarse que estaba en casa más tranquila, se despidieron y todos se fueron a sus casas.

Al otro día era sábado por lo que no había clases, no había quedado con sus amigos de verse, sus padres habían salido a hacer unas compras, por lo que no estaban en casa, su hermano tuvo la oportunidad de ir a estudiar en el extranjero, ya vivía allá desde hacía un año, por lo que solo vivía ella con sus padres, de repente sonó el timbre de su casa, después de unos momentos de pensarlo, ella salió a ver quién era y se llevó una sorpresa al ver quien era la persona que había tocado, quiso cerrar la puerta pero él puso el pie impidiendo que ella cerrará. Empujo la puerta para abrirla y trato de entrar pero ella no se quitó de la puerta sujetándose con fuerza del marcó de la misma impidiéndole el paso.

Anie: ¿Qué haces aquí?, no quiero verte, dijo muy seria pero segura, aunque por dentro temblaba sin parar.

Criss: Anie tenemos que hablar, ¿qué hacías con el idiota ese?, Criss también mostraba molestia en sus palabras, se veía muy enojado.

Anie: no hacíamos nada malo, no estábamos solos, solo estábamos bailando y lo hacíamos todos en grupo.

Criss: ¡no me digas!, ese no te ve con ojos de amiga y yo no voy a permitir que se te acerque, tú eres y serás solo mía, le dijo mientras le daba una cachetada a Anie que le dejo la mejilla roja y doliendo, ella estaba impactada de lo que acaba de suceder.

Anie: estás loco, ya no aguanto más tus celos, tu egocentrismo, no quiero seguir siendo tu novia, cada día me aíslas más y yo no puedo más, te estas volviendo en mi pesadilla, no puedo seguir así, quiero que te vallas y no vuelvas, dijo Anie muy molesta y casi gritando.

Criss: amor no puedes hacerme eso, tu sabes que yo… sin ti, yo… yo… me muero… no puedes dejar… pero fue interrumpido por Anie.

Anie: ya no me chantajes con lo mismo, siempre me dices lo mismo, que te vas a dejar morir, que te vas a aventar de un puente, ya no más, ya no quiero estar contigo, vete y déjame en paz, dijo Anie gritando tratando de soltarse de su agarre.

Criss: ni creas que te liberaras fácilmente de mí, tú no puedes dejarme, nunca podrás alejarte de mí.

Anie: ya no quiero volver a verte, entiéndelo, vete y no vuelvas, le dijo gritando.

Criss: tú no vas a dejarme, dijo mientras dio media vuelta enojado y se fue.

Anie entro a su casa, subió corriendo a su habitación, se vio en el espejo de su baño, tenía ligeramente hinchada la mejilla del golpe que Criss le había dado, aparte de muy roja, no podía creer que ya hubiera empezado esa etapa como le había dicho Jimena, prometió no dejar que le pasará lo mismo que a la tía de su amiga. Además que no quería vivir ese tipo de vida, teniendo miedo a que le volviera a pegar cuando se enojará y le impidiera ver a otras personas y más a sus amigos.

Cuando sus padres regresaron ella bajo y les pidió hablar con ellos, al alzar su cara sus padres se preocuparon al verle la mejilla roja y ligeramente inflamada. Hablo con sus padres sobre lo que había sucedido en su noviazgo en los últimos meses y lo que había pasado el día anterior en la universidad y rato antes en su casa cuando ellos no estaban. Ellos muy molestos por lo que estaba sucediendo se reunieron con los padres de Criss y les explicaron el problema y que iban a poner una demanda para que Criss no se volviera a acercar a su hija, que les estimaban a ellos y por eso les decían pero no permitirían que Criss siguiera dañando a Anie. Los padres de Criss entendieron y tomaron una decisión para ayudar a su hijo, sabían que él era algo posesivo y agresivo en algunas ocasiones, pero no creyeron que pasara algo así, pensaban que con Anie era diferente y ella lo estaba cambiando, hasta que los padres de Anie les comentaron lo sucedido, lo mandaron a estudiar al extranjero para que no volviera a acercarse a Anie y le prohibieron regresar sin permiso de ellos, solo podría ir en ocasiones especiales pero no le permitirían acercarse a Anie.

Paso un tiempo antes de que Anie se sintiera segura, que su corazón se sintiera tranquilo pero con la cercanía y apoyo de sus amigos y familia siguió adelante. Toño siempre estaba pendiente de que ella estuviera bien y que comiera mientras estaban en la universidad. Un día acompaño a Anie a su casa.

Toño: ¿Cómo te sientes Anie?, ya paso algunos meses desde lo de Criss.

Anie: me siento bien, más tranquila, creo que ya supere esa etapa de mi vida y espero no volver a pasar algo igual.

Toño: me da gusto por ti Anie, eres una mujer muy especial y no te mereces que una persona como él detenga tu progreso, él no te merecía. Por cierto, estaba pensando que si el fin de semana salimos de paseo para que te distraigas, hemos estado muy estresados por los exámenes finales y creo que merecemos algo de diversión para relajarnos.

Anie: ummm, creo que tienes razón, también les dirás a los demás para que nos acompañen.

Toño: claro, todos necesitamos una salida para distraernos, dijo el sonriendo.

Se pusieron de acuerdo y se coordinaron con sus amigos para ir al parque de diversiones, para poder ir todos juntos ese sábado y después irían a ver una película al cine. En casa de Anie se reunieron las chicas en espera de Toño y Octavio (otro amigo de ellos y compañero de la universidad), para ir al parque de diversiones, Ángel y Jimena no pudieron acompañarlos ese día. Cuando llegaron se fueron en la camioneta de Toño. En el parque de diversiones subieron a varios juegos, jugaron tiro al blanco donde Toño gano un osito de peluche que le regalo a Anie, jugaron las canicas, ahí todos tuvieron de regalo unas alcancías, fueron a otros juegos donde ganaron otros peluches y una lotería, jugaron también otros juegos, comieron algodón de azúcar, golosinas típicas, fresas con crema y hot dogs, todos se divirtieron mucho, pero más Anie, que tenía mucho tiempo sin tener un día tan divertido y menos en compañía de sus queridos  amigos, ya que al poco tiempo de hacerse novia de Criss dejó de salir con sus amigos y después de terminar con él no estuvo de ánimo de salir, se sentía triste y solo quería dedicarse a sus estudios para no distraerse.

Octavio: ¿Cómo se la pasaron chicas?, pregunto uno de los chicos que iba con ellas.

Estela: muy bien, fue un día muy divertido.

Celia: yo también me la pase súper, gracias Toño por invitarnos a venir.

Toño: solo quería que nos divirtiéramos un poco, tiene tiempo que no lo hacíamos, pero lo que más deseaba era que Anie, se relajará un poco, han sido meses pesados para todos, pero para ella aún más, dijo mientras ponía su brazo sobre el hombro de su amiga.

Anie: gracias Toño, tu siempre estás pensando en mí, eres un gran amigo, dijo mientras lo abrazaba, se sentía muy bien al lado de Toño.

Después del parque de diversiones fueron al cine, al salir platicaron otro poco y después Toño los llevo a sus casas, siendo Anie la última en llevar.

Toño: me alegra que te hayas divertido, me gusta verte sonreír de nuevo, como cuando te conocí, dijo mientras estaba él frente a ella y le tenía la mano sobre su hombro.

Anie: gracias Toño, no sé cuándo fue la última vez que me divertí como hoy, por cierto gracias por mi osito, está muy lindo, dijo señalando el osito que se había ganado y le había regalado a ella.

Toño: me alegra que te haya gustado, me retiro, debes estar cansada, se acercó a darle un beso de despedida, el cual dejo cerca de la comisura de sus labios, te veo luego.

Anie se quedó sorprendida, no sabía si había sido intencional el darle ahí el beso o había sido sin querer, se despidió con la mano al verlo alejarse y voltear antes de entrar a la camioneta y entro a su casa sin dejar de seguir asombrada.

Pasaron los días, se siguieron viendo en la universidad como siempre, estaban en los últimos días de clases, estaba por terminar ese semestre, Toño se graduaría y dejaría de verlo en la universidad. Toño le pidió que fuera su pareja en la fiesta de graduación y ella acepto, durante la fiesta bailaron y platicaron, después de un rato le tomo de la mano y la llevo al jardín, estando ahí se volteó a verla a los ojos y le dio una flor que saco de su saco.

Toño: Anie, ya han pasado varios meses desde lo de Criss, pero aun así, sé que tal vez pienses que no deseas empezar una nueva relación… pero créeme que nada me haría más feliz que aceptaras ser mi novia… eres una mujer maravillosa y sería el hombre más feliz de la tierra si me aceptarás como tu novio, le dijo mientras le tomaba las dos manos y la veía a los ojos.

Anie: yo… mmm… este, ella se quedó sin palabras, no sabía que decir.

Toño: no te preocupes, si no estás lista aun, no pasa nada, yo entiendo, le dijo mientras la abrazaba, le vio sus ojos cristalizarse y lo que menos quería era hacerla sentir mal.

Anie: sí, dijo despacio mientras hacia una pausa y se dejaba abrazar por Toño, si acepto, Toño se separó un poco para verla a los ojos.

Toño: escuche bien, ¿si aceptas?, dijo con voz apenas audible.

Anie: SÍ Toño, acepto ser tu novia, dijo mientras se ponía de puntitas y le daba un beso en la mejilla.

Toño: gracias, es el mejor regalo de graduación que podía recibir, le dijo abrazándola y la tomaba por la cintura mientras la alzaba por el aire dándole vueltas, estaba muy emocionado.

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