Tortura.

Ye Zhen

Verla totalmente destrozada me parte el alma, sus gritos no paran, es como si hubiese experimentado anteriormente un dolor así de grande al perder a su padre, me asusta verla con un dolor desencajado, sin escuchar y aferrarse a mi consuelo.

-No lo puedo perder, por favor, no de nuevo, Ye Zhen, mi amor, me duele...

Cae colapsada en mis brazos, me desespero al verla con sus ojos cerrados, pálida y sin aliento.

-An, mi amor, abre tus ojos, por favor no me hagas esto.

-Hijo, sólo se ha desmayado, recuestala en el sillón.

La levanto en mis brazos, la recuesto con delicadeza y acaricio su rostro con suavidad, la amo, amo sus ojos, sus labios, su misteriosa forma de actuar, su forma atrevida de hablarme y me duele verla destrozada de esta manera.

-Padre, explícame que sucedió.

-Hijo, nosotros mismos no sabemos que ocurrió, nuestro amigo llegó con buenas noticias, estaba herido si, pero nada grave, Lo hice revisar apenas me enteré, luego que estábamos tomando el té, comenzaron a explotar zonas cercanas del Palacio, él nos mantuvo a salvo hasta llegar acá, no entró con nosotros, dijo que se encargaría de todo, pero no he dado con su paradero después que todo se calmó, luego llegó ésta soldado (señaló a la amiga de An) no sé que pudo haber pasado.

-Con respecto a eso General Ye, el Gran General me envió para resguardar a sus Majestades, no había nadie de confianza, la mayoría de los soldados como usted mismo vio fueron asesinados, el escuadrón de élite fue encomendado a una misión y es por ello que no se encuentran, el paradero de nuestro Gran General Li, no lo sabemos con exactitud.

-Entonces, Hay posibilidades de que esté con vida.

-Es lo que quiero encargarte hijo, no confío más que en ti, además me dijiste que saben quién está detrás de todo esto.

-Cierto, tenemos un testigo, no van a creer de quién se trata.

-¿Quién es? (pregunta mi padre intrigado)

-Se trata de Cai Li.

-¿Qué? (dicen ambos sorprendidos)

-Esa chica que era tu prometida, la cual ¿Salvaste una vez?

-Si, además está detrás del atentado anterior.

-No lo puedo creer, se veía buena chica cuando estuvo viviendo con nosotros en el Palacio y le permitimos ser tu prometida.

-Ahora entiendo el que se fuera, nos odia, sólo utilizó nuestro cariño para atacarnos (dice mi madre molesta)

-Eso no es lo importante ahora, debo ir a averiguar donde están esos hombres, tendré que interrogarla ya que la que sabe todo es la General Li, pero ahora esta indispuesta.

-Hum, hace rato nos dimos cuenta que la tuteabas y llamaste amor, ¿Hay algo que debas decirnos?

-Madre, este no es el momento...

-No creas que nos vamos a quedar así.

Cuando me mira con esos hermosos pero penetrantes ojos me deja sin aliento, mi madre es hermosa, cálida, dulce pero con un temperamento del demonio cuando haces las cosas mal y sé que me dará una fuerte lección cuando se entere que estuve con Li Xia' An sin antes presentarla ante ellos.

-Sólo te puedo decir que la amo, es una mujer increíble, ahora me voy, debo econtrar a mi futuro suegro lo antes posible.

-Suerte hijo y ten cuidado.

-Trae a nuestro amigo de vuelta.

-Lo haré, Lo prometo, soldado Rong Xue,le encargo a sus Majestades.

-Los mantendré a salvo.

-No está demás decirle a quién más.

-La mantendré segura, es mi amiga.

-Gracias.

Me retiro para ir directamente al cuarto de torturas en mi residencia, dejó algunos de mis soldados para que organicen el lugar, revisen todo exhaustivamente, mientras debo sacarle toda la información necesaria a Cai Li sea por las buenas o por las malas, todo sea por encontrar al padre de la mujer que amo y no volver a ver tanto dolor en su rostro.

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-Tsk, para, no puedo decir nada.

-Estoy dándote una oportunidad Cai Li, por nuestra relación pasada, por el aprecio que dices tenerme, dime quienes son esos imbéciles.

-No puedo, hice un juramento.

-Como tu quieras.

Agarro una pequeña daga punzante y la introduzco en su pierna lentamente causándole a propósito un insoportable dolor, se ve como esta conteniéndose, tomo una pinza metálica y la coloco en uno de los dedos de su pie.

-No, Zhen, duele, por favor, no hagas esto, ya esa estúpida mujer lo sabe.

-Ella no está consciente para decirlo, por ello te estoy diciendo que digas quienes son, donde están y que te pidieron hacer.

Su cuerpo esta débil por los golpes que le dije a mis soldados que le dieran, los ha soportado como imaginaba, pero no contaba que sería yo quien la torturara, no tendré piedad ya que mis padres están involucrados en esta contienda.

-Será mejor que hables antes de que me canse y empiece a arrancar cada una de las uñas de tus dedos.

-No te atreverías.

-Pff, no soy el mismo en este momento, no quieres saber de lo que soy capaz.

-¿Tanto la amas?

-No lo hago sólo por ella, involucra a mis padres, si no los detengo van a seguir intentando matarlos.

-Eso te beneficiaría, serias el próximo Emperador.

-No quiero ser el próximo Emperador, sólo quiero que hables de una vez por todas antes de que se me agote la paciencia.

-No lo haré.

-Tu lo quisiste.

Estire mi mano a mis soldados, ellos entendían mi método de torturas, me pasan una pequeña aguja y agarro su mano introduciéndola por entre la uña, sus gritos no se hacen esperar.

-Para, duele como el infierno, para 😭

-¿Lo dirás?

-Es... Es la familia Wang, son ellos, me contrataron para matar a tus padres y deshacerme de esa mujer.

Su respiración es trabajosa, detengo mis torturas, envío a varios de mis soldados a los lugares donde más frecuenta esa familia y pensar que me parecía una familia ejemplar, admiraba como manejaba el condado.

-Bien, ¿tienen un lugar en especial donde pueda encontrarlos?

-Una cabaña cerca del Templo Dalí, es un lugar secreto detrás de un valle.

-Muchas gracias Cai Li, lamento haber recurrido a esto pero no me dejaste otra opción.

-Me ha quedado claro que me odias.

-No te odio, sólo no confío en ti y te has convertido en una criminal.

-Lo hice por nosotros.

-No hay un nosotros, eso terminó desde el día en que te fuiste sin decir adiós, me tengo que ir.

-Siempre te voy a amar Zhen.

-Espero que no sea así, mereces un futuro mejor y no será a mi lado, sólo empieza a hacer las cosas bien.

Su llanto no me causa ninguna emoción, todo lo arruinó en el momento que me atacó e intentó dañar a lo que más amo rompiendo sus promesas, sólo espero que su futuro sea mejor, ahora me dedicaré a hacer justicia y atrapar a esos maleantes e hipócritas de los Wang.

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