Hola, quería decirte esto. Tal vez no contestes o no envíes nada, pero sólo quiero que lo sepas.
Desde que te fuiste de mi vida no he dejado de pensar en por qué lo hiciste. Aún no logro imaginar un futuro feliz sin ti a mi lado.
A menudo voy al café donde solíamos tener citas y también a la biblioteca, donde nos reíamos bajito por los chistes malos que se nos ocurrían en ese preciso momento. ¿Te acuerdas de aquella vez que la señora de la biblioteca nos miró raro por uno de esos chistes? En ese instante no podía dejar de pensar en su cara, sin saber si reírme más o quedarme callado.
Siendo sincero… te extraño. Demasiado, diría. En mi galería aún tengo más fotos tuyas que mías; nunca las he borrado, no he tenido el valor de dejarte en el pasado, porque lo que siento por ti sigue siendo muy fuerte. Y pues… te amo, y lo seguiré haciendo hasta mi último día.
Att: Lucas