RECUERDOS DE UN AMOR (Yo Fui Tu Primer Amor II)

Pues es la única condición que pongo para que podamos iniciar una relación y tú te adueñe de mi corazón galán de hecho tengo que confesarte algo que nadie más sabe, después de l que paso con aquellos hombres que golpearon a Mina al día siguiente fui a sacarme permiso para portar armas así que el permiso ya lo tengo ahora quiero que tú me enseñes lo que haga falta para poder estar a tu lado, respondió Cloe con una determinación que sorprendía a Marcus.

Él la sujeto fuertemente por la cintura y la beso una vez más pues se le hacía un gesto tan valioso, pero muy peligroso para ella.

¿Qué es lo que te estoy haciendo pequeña?

Nada, no me estás haciendo nada y no te atrevas a desertar en mí estos sentimientos hacia ti y después quieras dar marcha atrás Marcus, sé que a la vista de todos puedo lucir como una inofensiva adolescente, pero te juro que cuando me importa alguien puedo dar la vida por esa persona sin pensarlo.

Ahora mi pregunta es ¿quieres entrar tú en mi vida con mis condiciones o no galán?.

Dijo Cloé seriamente mientras se mordia el abio en espera de la respuesta del hombre que la tiene pres entre sus brazos, le rogaba todos los santos del cieloque él dijera que si pues en verdad quería que Marcus fuera su primer amor.

Yo no huyo de los problemas, al contrario, los enfrento cara a cara y siempre hago todo lo posible para darle una sosolución trato de estar preparada para cualquier sorpresa, no me dejo influenciar por nada ni nadie Marcus desde pequeña sé muy bien quien soy y hacia donde voy y defiendo lo que quiero con uñas dientes y no me importa si tengo que derramar sangre por proteger lo que amo.

¿Asi que tú decides si me aceptas o no?

Ella se separó un poco del cuerpo de Marcus para darle su espacio para que tomara una decisión, aquí me tienes entre tus brazos dispuesta a todo por ti.

Marcus vio con admiración la determinación de aquella niña y el sentimiento que tenía por ella creció aun más, a quería y la quería suya para siempre.

Muy bien acepto, Cloé, pero con una sola condición.

Está bien cual es sa condición?

Que me jures que usarás el arma solo como último recurso y solo cuando veas que en verdad no te queda ms opción que recurrir a ella de lo contrario te quitaré tu permiso para portar armas y sabes que tengo el poder para hacerlo.

¿Trató hecho?

Marcus extendió su mano para cerrar dicho acuerdo con un apretón de manos, él sabía que sería muy peligroso para Cloe adentrarse en ese mundo pues no era nada fácil arrancarle la vida a un ser humano por más que este se lo merezca y no quería que ella cargara en su conciencia la muerte de nadie, pero la quería en su vida pues estando con ella se olvidaba del mundo enteró, hasta podría decir que es un hombre común como cualquiera con anhelos de ser amado por una mujer tan especial como lo era Cloe.

Muy bien acepto, respondió Cloe tomando la mano de Marcus y después se paró de puntillas para robarle un beso apasionado que los llevo nuevamente a las caricias más subidas de tono pues el deseo carnal se encendía con el más mínimo roce de sus cuerpos, pero ninguno de los dos se atrevía a dar el siguiente paso ambos pensaban que era muy pronto y n querían arruinarlo por una simple calentura.

Marcus separo un poco a Cloe para darle un respiro y no asfixiarla con sus besos tan intensos además que ya dolía estar tan cerca ella. Cloe aceptas ser mi novia?.

Pregunto Marcus interrumpiendo aquel momento tan acalorado pus no quería tomarla esa noche, ella era especial y quería las cosas fluyeran lentamente pues quería que su relación fuera para toda la vida.

Sí, acepto Marcus respondió con un beso y muy feliz de que su primer amor fuera un hombre como él. Jamás se había dado la oportunidad de conocer a nadie para no salir lastimada, pero con Marcus quería arriesgarse a todo por él.

Después de unos cuantos besos más y un sin fin de despedidas Marcus salió de la casa de Cloé para ir a descansar pues se había asado todo el día con ella.

Te veo mañana mi amor, esa palabra se escuchaba tan sensual en sus labios que hacía que Cloe se derritiera por él pensaba Cloé en sus adentros más candentes.

Mañana te llevaré a unlugarr muy especial.

Me parece muy bien galán, en ese momento un ruido en el estómago de Cloé interrumpió su charla.

Jajajaja

Lo siento es que no he comido nada, oye ven te invito a cenar dijo Cloé.

Marcus asintió con la cabeza y entro nuevamente a la casa de Cloé y con una sonrisa picarona cambio los plan de Cloe, pero mejor yo invito y la próxima vez tú me sorprenderás estas de acuerdo?.

Mmmm está bien galán vamos, lo deja me voy a cambiar el uniforme y en un segundo estoy contigog, pero pasa para que no estes aquí afuera ya hace fríoo dijo Clo preocupada porque su novio no pescara un resfriado.

Su novio, esa palabra se escuchaba tan bien en sus labios que no pudo evitar ruborizarse mientras pensaba en ello.

Marcus fue a su auto y saco de la cajuela unos pantalones negros junto con una playera y una chamarra de cuero para cambiar su atuendo pues él también llevaba puesto el uniforme de la universidad, al entrar nuevamente se encontró con Nora la cual llevaba la charola con el servicio de café y le pidió de favor le indicará un lugar en donde pudiera cambiarse de ropa.

Nora lo llevo a una habitación que se encontraba en la planta baja la cual era utilizada por la tía Giorgina cuando estaba de visita en casa, al ser una mujer mayor se negaba a subir y bajar escalera por un dolor crónico en las piernas.

Al salir Marcus de aquella habitación Cloe ya lo estaba esperando en compañía de Nora la cual l dijo donde es que se encontraba aquel hombre tan apuesto. Ambas mujeres quedaron sorprendidas al ver lo guapo que lucia Marcus n aquellos pantalones entallados que mostraban sus pernas marcadas por el ejercicio.

—¿Nos vamos?

Pregunto Marcus al ver que ninguna de las dos mujeres decía algo, era un poco incómodo para él, el ver que su novia lo observará con la mirada, pero que la mujer que la acompañaba lo hiciera lo hacía sentir acosado pues era una mujer de mediana edad que bien podría tener la edad de su madre.

Cloe aprovechó para ponerse unos pantalones ajustados y aun abrigo largo que cubría la mayor parte de su cuerpo ambos salieron de casa y Marcus la llevo a un pequeño restaurante donde solía ir a cenar muy a menudo y justo cuando entraron Cloé se dio cuenta de las miradas que le lanzaban las mujeres a su novio pues el atuendo de Marcus no dejaba nada a la imaginación y la prueba era que las meseras del lugar babeaban al verlo sin pestañear.

Cloé quería sacarles los ojos por desnudarlo con la mirada, pero prefirió ignorarlas o de lo contrario podría arruinar su salida con su novio así que disfruto de aquella exquisita cena pues tendría que mentalizarse de que no seria ni la primera ni la última vez que ocurriría algo así cuando salieran juntos y no estaba dispuesta a pasar un mal rato por culpa de esas mujeres, después de todo Marcus era su novio.

Orgullosa Cloé tomó la cintura de Marcus mientras se dirigían a una de las mesas que se encontraban vacías al fondo de aquel lugar para dejarles muy claro que él le pertenecía, Marcus aprovecho dicho gesto para darle un beso en los labios para dejar en claro a todos los hombres que estaban presentes que aquella hermosa mujer era suya pues no le quitaban la vista de encima Marcus era el hombre más feliz del mundo a lado de Cloe pues la consideraba la mujer ideal que un mafioso deseaba tener en su vida.

¡UN MAFIOSO!